martes, 28 de febrero de 2012

Oaxaca - [wahaka] México

oaxaca by Sergio Elbio
oaxaca, a photo by Sergio Elbio on Flickr.
Alberga una rica composición multicultural donde conviven más de 16 grupos étnicos. Al igual que los otros estados de la federación, Oaxaca posee una constitución, un código civil, un código penal y un escudo propio.

sábado, 25 de febrero de 2012

Grecia debe romper con la Troika y suspender el pago de la deuda

Por Éric Toussaint - http://alainet.org/active/52999

Es urgente que los movimientos sociales de Europa expresen una auténtica solidaridad activa con el pueblo griego y constituyan una plataforma común europea de resistencia a la austeridad con el fin de conseguir la anulación de las deudas ilegítimas.

Una gran parte de la población griega ha mostrado desde el primer memorándum de mayo de 2010 una oposición creciente a las medidas de austeridad impuestas por las autoridades griegas y la Troika: huelgas generales, ocupación de las plazas públicas, manifestaciones en las calles, movimientos de resistencia a los aumentos de las tarifas de los servicios y los transportes, sin olvidar el relanzamiento de la actividad de algunos servicios como el del hospital de Kilkis en Macedonia o la recuperación de la actividad, el 15 de febrero de 2012, del periódico Eleftherotypia conducido por los trabajadores.

La sumisión y el compromiso del gobierno griego con la Troika agravan la situación económica del país y violan los derechos económicos y sociales de la población. El último plan, falazmente llamado «de salvamento», constituye una etapa más del abandono de la soberanía griega a favor de la Unión Europea y los acreedores: el total de los nuevos créditos irá a reembolsar una deuda ampliamente ilegítima y será gestionado directamente por los acreedores.

Los pueblos de los países del sur del planeta han estado sometidos durante dos decenios (desde 1982 a principios de los años 2000) a ese tipo de política que utiliza el pretexto del reembolso de la deuda como arma para destruir una serie de conquistas sociales que constituyen los derechos fundamentales de la sociedad. Argentina es un caso emblemático. Después de 25 años de políticas neoliberales (1976-2001) y una sucesión de planes de austeridad llevados a cabo por el FMI, en diciembre de 2001 estalló una rebelión popular que llevó a la caída del gobierno. Las nuevas autoridades decretaron unilateralmente la suspensión del reembolso de la deuda pública en forma de títulos vendidos en los mercados financieros por un montante de 90.000 millones de dólares. Hasta hoy es la suspensión de pago más importante de la historia. Después de tres años de suspensión de pago durante los cuales el gobierno, en medio de una crisis pre-revolucionaria (Diciembre 2001- inicio 2003), estableció una política de relanzamiento económico y se negó a seguir las recomendaciones del FMI, Argentina impuso a los acreedores una reducción del 65% de la deuda. A finales de diciembre de 2001 Argentina suspendió también el reembolso de su deuda bilateral (por un montante de 6.500 millones de dólares) con respecto a países como España, Francia, Alemania, Italia, Gran Bretaña… agrupados en el Club de París. Esta suspensión de pagos dura desde hace diez años y Argentina va muy bien. Entre 2003 y 2012, su tasa media de crecimiento anual ha llegado al 8%. Si Argentina no hubiera suspendido el reembolso de la deuda y no hubiese rechazado los dictados del FMI y los demás acreedores, habría sido incapaz de beneficiarse a partir de 2004-2005 del aumento de los precios de los productos que exporta al mercado mundial. Todos los beneficios habrían sido engullidos por el reembolso de la deuda. Bajo la presión popular, las autoridades argentinas han rechazado los aumentos de las tarifas eléctricas, del agua, de las telecomunicaciones, etc. que querían imponer las multinacionales extranjeras y el FMI. Las condiciones de vida de los argentinos han mejorado notablemente y en la actualidad los ciudadanos europeos toman el camino de ese país para intentar conseguir un trabajo digno.

El ejemplo de Argentina demuestra que rechazando someterse a los acreedores y al FMI para pagar una deuda ampliamente ilegítima se puede levantar la cabeza y mejorar las condiciones de vida de la población.

Como señalé al principio de este artículo, es necesario que el combate de los griegos no se quede aislado, hay que construir un amplio movimiento de solidaridad con él y que el conjunto de los pueblos europeos construya un frente de resistencia para la anulación de la deuda ilegítima y la total refundación de una Europa de los pueblos por medio de un proceso constituyente auténticamente democrático.

Éric Toussaint, doctor en ciencias políticas, presidente del CADTM Bélgica www.cadtm.org, ex miembro de la Comisión de la Auditoría Integral del Crédito Público en Ecuador (CAIC) que derivó en la suspensión del pago de una parte de la deuda ecuatoriana.  Dirigió con Damien Millet el libro colectivo La deuda o la vida, Icaria editorial, Barcelona, 2011.

Este articulo ha sido publicado por Eleftherotypia , diario griego recuperado por sus trabajadores.

jueves, 23 de febrero de 2012

Villa La Angostura - Puerto Manzano- Argentina

Puerto Manzano es un barrio de la localidad de Villa La Angostura sobre un brazo que se extiende sobre el lago Nahuel Huapi. Se encuentra aproximadamente a 7 km del centro de Villa La Angostura.

sábado, 18 de febrero de 2012

DEMOCRACIA VS. MEDIOS DE COMUNICACIÓN

POR ROBERTO FOLLARI - http://www.cronicon.net/paginas/edicanter/Ediciones68/cro3.htm 

Vemos en algunos de nuestros países de Sudamérica -muy especialmente aquellos donde los gobiernos han afectado algunos intereses económicos dominantes- cómo arrecian campañas mediáticas ciertamente impiadosas, monocordes, repetitivas y sistemáticas: según ellas, los gobiernos elegidos por el voto popular serían ilegítimos en su accionar, y por ello se los rechaza por pretendidos ataques a la libertad de prensa, cuando no incluso por supuestas tendencias autoritarias que estarían deformando las condiciones democráticas.

En verdad, son estas posturas propaladas desde unos pocos pero poderosos medios de comunicación (ya sea gráficos, radiales o televisivos) las que afectan negativamente la democracia.

Es curioso que la opinión de un puñado de dueños de medios y de periodistas afines pretenda ponerse por encima de la voluntad popular, y dictaminar qué es lo que deba entenderse por ejercicio democrático del poder. Por cierto que hay siempre derecho a disentir con la opinión de las mayorías, pero habrá que hacerlo con el cuidado y el respeto del caso.

Cuando, en cambio, se pretende que el punto de vista mayoritario de la población sería intrínsecamente ilegítimo, y de hecho actores sociales que nadie eligió se erigen en supuestos dueños de la verdad cívica por encima -y en contra- de la voluntad mayoritaria, es evidente que se está lesionando las condiciones de representación que son propias del sistema democrático.

Párrafo aparte merece la cuestión de la libertad de prensa. La misma en ningún caso puede entenderse como impunidad para el agravio o la injuria, o para simplemente escribir falsedades. Tampoco para exagerar las noticias que vengan bien al interés de quienes dirigen el medio, y minimizar o ignorar las que caigan mal al mismo.

Por supuesto que la libertad de opinión -que es una cuestión diferente- debe estar siempre garantizada. Y es cierto que ella lo está a tal punto en el caso de nuestros países, que gracias a su vigencia (y al abuso intencionado que algunos hacen de la misma) se puede permanentemente hacer prédica contra los gobiernos legítimamente elegidos.

Como no nos cansamos de afirmar quienes hemos tenido que soportar dictaduras extremas, como lo fue la criminal última dictadura en Argentina, cuando alguien puede reiteradamente afirmar por los medios que se está ante una situación de dictadura o de enorme autoritarismo, se demuestra en los hechos todo lo contrario; solo donde no hay dictadura puede alguien escribir en un diario o decir por TV que la hay.
Pues si hubiera dictadura, hablar en un medio contra el gobierno sería simplemente imposible. En Argentina, alrededor de 100 periodistas asesinados durante la dictadura muestran elocuentemente lo que afirmo.

No hay gobiernos perfectos, y los que tenemos no lo son. Van en buena dirección estructural en muchos casos, lo cual no obsta para que pueda hacérseles críticas fundadas. Pero la crítica es un ejercicio responsable, no se parece al ataque, la invectiva o la agresión.

Cuando se apela a estos últimos se desnuda la falta de convicciones y argumentos; se deja de cumplir la función pública que corresponde cubrir a un medio, aun cuando este sea de propiedad privada (pues opera dentro del espacio de constitución de opinión ciudadana y le corresponde asumir las responsabilidades pertinentes) y se antepone el derecho de unos pocos dueños de grandes medios a imponer su punto de vista, sobre el derecho a la información veraz e ideológicamente plural que tiene el conjunto de la población, derecho que es propio de millones de personas.

El Telégrafo, Guayaquil, febrero 17 de 2012.

jueves, 16 de febrero de 2012

Europa: la austeridad predadora e inútil


XAVIER CAÑO TAMAYO.*
- http://www.surysur.net/2012/02/europa-la-austeridad-predadora-e-inutil/

 

Decía Bertolt Brecht que hay muchas maneras de matar. Clavar un cuchillo en el vientre, condenar al hambre, negar auxilio en la enfermedad, empujar al suicidio, llevar a la guerra… Pocas están penalizadas. Hoy, en Grecia, hay mucha más ciudadanía con mayor riesgo de morir que hace dos años. Por la austeridad.

Salarios y pensiones se han rebajado entre un 50 y un 70%. Más de 60.000 negocios han cerrado y otros tantos lo harán este 2012. La quinta parte de asalariados trabaja jornadas reducidas y cobra por debajo del salario mínimo. Se han destruido más de medio millón de empleos y los parados son casi un millón (20%).

Medio millón de familias carece de cualquier ingreso y seis de cada diez hogares no pueden pagar sus facturas. Los servicios públicos, liquidados o privatizados. Las ollas populares se multiplican y las ONG reparten 20.000 comidas diarias en Atenas, por ejemplo. La malnutrición hace estragos en los niños y el hambre aparece en las ciudades.

Si un griego pierde el empleo, pierde el seguro médico y ha de pagar para ser atendido. Decenas de miles de ciudadanos inválidos, enfermos o con patologías infrecuentes están condenados a muerte segura a corto plazo por la supresión de subsidios a medicamentos.

Sobre tales cosas, Naciones Unidas ha dictaminado que “es inadmisible que un Estado cierre las escuelas, universidades, desmantele servicios públicos y abandone la población al caos para disponer de fondos y pagar a acreedores extranjeros o nacionales. El Estado no puede sobrepasar determinados límites”.

Pero además, las medidas draconianas impuestas por la Unión Europea y el FMI no ayudan a Grecia a recuperarse. Al revés. Más recesión, más desempleo, más pobreza.

Al otro lado del Mediterráneo, en España, con cinco millones de desempleados en aumento, cambian hábitos de consumo. En millones de hogares hay economía de guerra, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas. Un 60% reduce gasto en alimentación, ropa, electricidad, agua, gas, vacaciones e incluso cuidado de la salud.

Y según Eurostat (estadística de la Unión Europea), España es el país europeo donde más aumentó el riesgo de pobreza hasta afectar casi al 21% de la población.

Por obra y gracia de la austeridad

Sonia Mitralia, de CADTM de Grecia, denunció en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa que la austeridad es un peligro para la democracia y los derechos sociales. “A los dos años de la terapia de choque impuesta a Grecia por el Banco Central Europeo, la Comisión Europea y el FMI, el balance es catastrófico, indignante e inhumano. Incluso los impulsores de esas políticas reconocen su fracaso.

Si la austeridad draconiana hubiera sido eficaz, la deuda pública griega sería el 120% del PIB en 2020: igual que en 2009, cuando empezó todo. Han diezmado un país para nada”.

Sin embargo, BCE, Comisión y FMI imponen la misma austeridad que saben fracasada. En Portugal, España, Irlanda, Italia, en toda Europa, la austeridad draconiana impuesta hunde la economía. Vicenç Navarro recuerda que “en España, los recortes del gasto público no han producido una bajada de intereses de deuda pública del Estado, al contrario, los intereses han aumentado a nivel insostenible. Y lo mismo ocurre en Irlanda, Portugal e Italia.”

Las políticas de austeridad no solo son fracaso y desastre. Un manifiesto del movimiento 15 M denuncia que “asistimos a un golpe de Estado cuando nuestros dirigentes acatan las directrices de instituciones no elegidas democráticamente, como Comisión Europea, Banco Central Europeo o FMI, que atienden solo a los intereses de grandes fortunas y corporaciones. Eso no es austeridad. La pretendida austeridad no es más que una despiadada transferencia de riqueza del 99% que estamos abajo al 1% que nos pisa. Es un saqueo y una estafa”.

Y los juristas Jaume Asens y Gerardo Pisarello nos recuerdan que “cuando el poder se despeña por la ilegalidad o consiente la irrupción de una legalidad privatizadora, a menudo mafiosa, la protesta ciudadana, la desobediencia, adquieren nueva luz. Aparecen, no ya como desórdenes susceptibles de ser criminalizados sino como el primero de los derechos para instaurar, en ese acto de rebelión, un orden jurídico alternativo, más igualitario y libre de violencia”.

Habrá que estar preparado para esas respuestas ciudadanas.
——
* Periodista, escritor
Centro de Colaboraciones Solidarias
En http://www.adital.com.br
.

miércoles, 8 de febrero de 2012

La expansión del nuevo colonialismo

ALBERTO MALDONADO.* - http://www.surysur.net/2012/02/la-expasion-del-nuevo-colonialismo/

Siento mucho haber acertado cuando escribí que ha nacido al mundo el nuevo colonialismo. Y, de lo que se ve, se propone establecerse en cualquier país de esta Tierra. El mundo creía que nunca más ese monstruo podría establecerse, una vez que se constituyeron las Naciones Unidas. Ahora —a comienzo del siglo 21— podemos ver a ciencia cierta lo que significa la prepotencia del llamado unipolismo. (Que, en palabras más nuestras, quiere decir que hay un solo imperio que manda, con o sin el respaldo de los imperitos; los demás, obedecen. Y si no obedecen, pues ahí les va el “bombardeo humanitario” tipo Libia).

Y siento aún más que haya predicho que el próximo objetivo de tan “humanitarios y democráticos” imperios, son Siria, paso obligado a Irán, que es el verdadero propósito del gran imperio (EEUU) No porque no entienda que hay un plano de venganza (el secuestro del personal diplomático norteamericano que estaba en lo que fue su sede diplomática, cuando fue derrocado el Sha de Irán) sino porque tiene petróleo.

Ya lo dijo Eduardo Galeano: si esos países sembraran solo rabanitos, el imperio y los imperitos, ni caso que les harían. El problema es que tienen petróleo; y bastante. Pregunto: ¿será el mismo destino de Venezuela y la franja del Orinoco? No tanto porque es “díscolo” y quiere establecer el socialismo siglo 21; y eso, para el gran imperio es pasado de moda, cuanto porque tiene las reservas petroleras más grandes del mundo, a tres días de viaje de los petroleros.

Desde luego “mis visiones” nada tenían de adivino o de oráculo. Voces más autorizadas y más documentadas que la mía, han sido coincidentes en las dos proyecciones. Y la gran pregunta es: ¿y ahora quién podrá defendernos? Porque de lo que se ve, el gran imperio y los imperitos se reservan todos los derechos; ellos son los que dicen esto está bien y esto está mal. Por supuesto, en todos nuestros países existen los corifeos; es decir aquellos que, sin pensar dos veces, dicen esto está bien o está mal, según.

Excepto Irak, ya no es tiempo de invasiones, sin los respectivos permisos, que para eso están el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, o el Tribunal Penal Internacional de La Haya, o la Interpool, o la Comisión de Derechos Humanos, etc. El nuevo colonialismo –de lo que se ve y se lee- se caracteriza porque hay que prodigar en los países “díscolos” una especie de resistencia ciudadana, que para eso han quedado los llamados mercenarios (sicarios).

Con la ayuda de las grandes redes comunicacionales y los principales medios de comunicación del mundo, lo primero que hay que hacer es divulgar que en tal o cual país, la oposición “libre y democrática” está batallando y es objeto de asesinatos masivos. Entonces, hay que salvar a esa población, hay que armarla, hay que darles recursos (no importa si tienen que bloquear sus propios fondos) y hay que “restablecer” la democracia y la libertad, a sangre y fuego.

Mucho de eso se aplicó en Libia. El mundo entero recordará que, de pronto, los grandes medios y sus redes informáticas comenzaron a divulgar que, en una ciudad petrolera del norte de Libia, se había constituido un frente de resistencia y que se daban grandes manifestaciones contra el estrafalario coronel Kadaffi.,

Por supuesto, ya se habían producido miles de muertos de entre los “rebeldes”. Una cadena del tercer mundo (Telesur) llegó, sin problemas, a Trípoli (la capital de Libia) y no solo que no encontró un solo muerto (de los miles que hablaban) sino manifestaciones populares a favor de ese gobierno. Todo el mundo sabe que Kadaffi fue detenido en su tierra natal, arrastrado por los mercenarios y asesinado en plena calle.

Cesaron los bombardeos “humanitarios” de la OTAN y se impuso una verdadera dictadura, patrocinada, desde luego, por el gran imperio y los imperitos. Todavía no sabemos qué va a pasar en ese país y solo se ha filtrado que la verdadera oposición a la invasión ha comenzado; y que ya hay una ciudad que ha sido rescatada de los ”rebeldes” (mercenarios). De lo cual dicen nada o muy poco esos mismos medios, que para eso son muy “democráticos y libres”.

A lo que voy. El carácter “humanitario y civilista” del gran imperio y de los imperitos no podía quedarse ni callado ni quieto. De pronto, hallaron una manera “más civilizada” de colonialismo “más humanitario y moderno” Con mayor razón si el país “a salvarse” tiene petróleo; y del bueno. Y “más mejor todavía” (como diría nuestro pueblo) si el país ofrecía un mar de agua dulce, cristalina y pura, en tierras que pintaban desérticas. Lo cual “encontraron” (¡Oh casualidad!) en Libia

Y con Siria se está aplicando la misma receta. Como una especie de continuación de la llamada “primavera árabe”, de pronto, aparecieron unos rebeldes “sirianos” (¿así se les dice?) que comenzaron a matar civiles sirios; entre ellos, no pocos niños, mujeres, ancianos. !Qué cosa tan terrible! Y, por supuesto, los “humanitarios” cristianos de este lado (occidental y cristiano) ya quieren ir a salvar a esos pueblos que, según sus cuentas, ya pasan de 5.000. Eso sin contar los soldados y civiles del lado del señor Asaad, que también han muerto.

Sin pensarlo dos veces, los occidentales y cristianos “salvadores” presentaron una resolución, según la cual, el Consejo de Seguridad de las NN.UU. daba a la vieja y corrompida OTAN y, desde luego, al gran imperio, permiso para nuevas franjas aéreas y bombardeos humanitarios.
Solo que, esta vez, Rusia y China, que tienen derecho al veto, no quisieron correr los riesgos que asumieron en el caso Libia, y que dieron campo abierto para que la vieja y corrompida OTAN programara los “bombardeos humanitarios” y la invasión de ese país, sobre la base de “rebeldes” (mercenarios)

Siria, desde luego, por esta negativa, no está libre de una invasión “democrática y libre” Seguirá el desangre y los mercenarios continuarán su acción. El imperio y los imperitos se reservan el derecho a invadir cualquier país (Siria es uno) si aquello les sirve a sus propósitos. Y, en este caso, matarían dos pájaros de un solo tiro. Le sacarían un clavo al gran dog del Medio Oriente (Israel de Netanyahu y de los “lobbys” nortamericanos) y podrían estar más cerca de Irán, que es el objetivo final del gran imperio y de los imperitos. Ojalá no adivine otra vez.

En esta parte, una aclaración obligada. No hay datos (ni cercanos, peor lejanos) que estos países hayan tenido o ensayado alguna vez la democracia occidental y cristiana. Los mismos aliados del gran imperio y de los imperitos (Jordania. Arabia Saudi, Bairet, etc.) tienen monarquías (satrapías) o gobiernos dictatoriales, desde hace décadas.

¿Cuántos años gobernaba Egipto el señor Mubarak? ¿Cuántos el de Túnez? ¿Cuántos va el señor del Yemen que está atendiéndose en EEUU? Es decir, no es ni exclusivo ni nuevo que en Siria haya un gobierno hereditario, como el del señor Asaad. Tampoco estamos defendiendo ese estilo.

Y tampoco creemos en la democracia occidental y cristiana (de antaño) que solo garantizaba que la gran oligarquía y sus diversos sectores (importadores y exportadores, banqueros, principalmente) se turnen en el poder político (el económico ya lo tienen y lo disfrutan) a fin de que todo siga igual que siempre; que haya pocos millonarios y muchos pobres, que “Taita Dios” así lo ha querido (tesis de la nueva CONAIE y del MPD)

Lo que en verdad preocupa a muchos es que el gran imperio y los imperitos sigan aplicando en el mundo del siglo 21 la ley del embudo. Esta ley (según los viejos ecuatorianos) es para los de poncho; es decir para los más pobres. En este caso, para los países que pretendan ser soberanos y dignos. ¡Que eso dice la declaración de las Naciones Unidas! Cierto, muy cierto; pero, cuando los imperios y los imperitos les da la gana, pues invaden cualquier país, con armas de última tecnología (inteligentes, dicen) Por citar un caso: Irak. Por citar otro: Libia.

¿Quién será el próximo? Eperemos que no le toque a América Latina.

Puedo estar equivocado; pero ¿alguien me puede informar si la Corte Penal Internacional ha dictado ya una orden de captura contra el señor Bush, hijo, por haber invadido Irak con una mentira? ¿Alguien me puede informar si la Comisión de Derechos Humanos de la OEA ya ha pedido el
enjuiciamiento del Presidente yanqui y los militares que invadieron y mataron muchos civiles en Panamá, en Granada, en República Dominicana? ¿A quién le toca esta salvación “libre y democrática?

Razón tiene el presidente de Venezuela (Hugo Chávez) cuando denuncia que hace poco un acorazado de esos que tiene solo el imperio, espiaba en agua territoriales venezolanas y huyó, presuroso, a aguas internacionales, cuando fue detectado por la Marina venezolana. Y razón tiene el Presidente Chávez, de dudar de esos grupos de venezolanos que, en Miami arman jaleo cada vez y cuando. ¿No estarán preparando un nuevo capítulo de “rebeldes venezolanos” que demandan ayuda a los EE.UU. para nuevos “bombardeos humanitarios” pero sobre este país?

Me da hasta risa (sin quitarle nada del dramatismo que tiene) que le critiquen al juez español Garzón, que las oficia de gran veedor del nombramiento de la nueva Corte Nacional de Justicia en Ecuador, solo porque sus pares españoles le hayan enjuiciado por pretender juzgar a los asesinos y criminales, de la era del generalísimo Francisco Franco. Yo encuentro que es lógico que, en estos tiempos, se lleve a juicio al juez Garzón ya que ha pretendido revolver la historia reciente (Franco murió en 1975) con mayor razón si los auténticos herederos de Franco han vuelto al gobierno político de ese país “tan culto y tan cristiano”

Los latinoamericanos, en cambio, no podemos olvidar “las bondades” de cinco siglos de colonia española y que los españoles (inclusive los curas españoles) se pasaron décadas discutiendo si nuestros indios tenían o no alma, eran seres humanos o no. Y pensar que haya izquierdistas
ecuatorianos que estén junto a semejantes herederos.

¿Qué fue el Informe Rattenbach?

 

http://www.diarioregistrado.com/politica/57554-que-fue-el-informe-rattenbach.html - Informe Rattenbach es el documento resultante del trabajo de la comisión creada en el gobierno de Reynaldo Bignone, cuyo fin fue el de analizar a las fuerzas armadas durante la Guerra de las Malvinas.

 

Tras la derrota en la Guerra de las Malvinas, la Junta Militar de la última dictadura argentina, en un intento por tomar otra vez la iniciativa política perdida por el descontento popular y el descrédito de las Fuerzas Armadas, creó una comisión encargada de analizar y evaluar el desempeño de dichas fuerzas en el conflicto bélico del Atlántico sur. Este informe ha sido catalogado como "el documento más objetivo y fidedigno sobre la responsabilidad de los jefes militares y subalternos, que podría ser la base para un futuro juicio por la verdad sobre este conflicto bélico".

La comisión se creó por decreto secreto2 el 2 de diciembre de 1982 (resolución nro. 15/82) durante el gobierno de Reynaldo Bignone y llevó el nombre oficial de Comisión de análisis y evaluación de las responsabilidades políticas y estratégico militares en el conflicto del Atlántico Sur.

La comisión estuvo compuesta por: Teniente General (R) Benjamín Rattenbach (Ejército)General de División (R) Tomás Armando Sánchez de Bustamante (Ejército) Almirante (R) Alberto Pedro Vago (Armada) Vicealmirante (R) Jorge Alberto Bofi (Armada) Brigadier General (R) Carlos Alberto Rey (Fuerza Aérea) Brigadier Mayor (R) Francisco Cabrera (Fuerza Aérea)

La comisión recibió amplios derechos para solicitar "informes, documentos, antecedentes y todo otro elementos que se estime útil, a cualquier organismo público y a personas físicas o jurídicas públicas o privadas, todos los cuales estarán obligados a proporcionarlo dentro del término que se fije bajo apercibimiento de Ley. Al efecto, no se podrá oponer disposición alguna que establezca el secreto de lo requerido."

El fin de la investigación fue definido en el decreto como: El desempeño en el ejercicio de las funciones y las responsabilidades emergentes respecto de la conducción política y estratégico militar del conflicto. Las responsabilidades de cualquier persona, sean de carácter penal, disciplinario y/o del honor que surjan de lo actuado y que, a su juicio, deban ser investigadas y juzgadas por la jurisdicción común o militar respectiva, en la forma que legal y reglamentariamente corresponda.

La comisión entregó el resultado de su trabajo en un informe escrito de cinco partes: Introducción. En la introducción se describen los fundamentos legales y las razones de la investigación, sus fuentes, su nomenclatura y la estructura del informe.

Antecedentes del conflicto. Se analizan detalladamente los pasos realizados por el gobierno para solucionar el conflicto así como el contexto internacional y regional en que tuvo lugar el enfrentamiento.

Evaluación y análisis crítico. Se investiga el accionar de las fuerzas armadas argentinas durante la guerra en base a informes solicitados a los oficiales que cargaban responsabilidad en los hechos. Es un análisis crítico y hecho en un lenguaje objetivo que a veces puede parecer hiriente. Las fallas son nombradas y analizadas.

Determinación de las responsabilidades. Se listan las responsabilidades de los estamentos militares y civiles durante la guerra, entre otros de: la Junta Militar, Poder Ejecutivo y Gabinete, cada uno de los Comandantes de las Fuerzas Armadas, Estado Mayor Conjunto, etc. Asimismo encuadra las responsabilidades en el marco jurídico argentino.

Experiencias y enseñanzas

Nombra concretamente las recomendaciones en: -Organización de la Nación para la Guerra-Política Militar -Código de Justicia Militar -Servicio Exterior -Inteligencia Estratégica-Acción Psicológica -Doctrina Conjunta -Debilidades de las FF.AA. en el conflicto

Por último se redacta el acta de constancia de finalización de la comisión, donde se nombran los destinatarios de los diez ejemplares firmados del informe, estos son, la Junta Militar, los Comandantes en Jefe de las tres ramas de las Fuerzas Armadas y un ejemplar para cada uno de los seis miembros de la comisión.

Consecuencias del informe

El informe recomendó penas graves para los responsables de lo que calificó como una "aventura militar" (que implicaban la pena máxima para algunos de ellos), pero su influencia sobre el juicio posterior fue prácticamente nula.

Sin embargo, desde el punto de vista político e histórico el informe sepultó definitivamente cualquier intento de los dirigentes militares y políticos de la época por encubrir o relativizar sus responsabilidades.

Según testimonio del hijo del Teniente General Rattenbach, el informe fue adulterado para proteger a los jefes militares, eliminándose referencias a los cargos "en lo penal militar" de los altos jefes y a la rendición sin combatir en Georgias.

Difusión posterior

El informe nunca ha sido publicado oficialmente, aunque recientemente se ha anunciado su desclasificación y posterior publicación.

La revista semanal Siete Días en sus ediciones nº 858 y 859 (23 y 30 de noviembre de 1983) le dedicó su tapa y gran parte del número a dicho documento; de esa forma éste salía a la luz pública de manera extraoficial. Luego se publicó en forma de libro al menos en dos ocasiones. Actualmente se puede acceder a la versión no oficial a través de diversas páginas web.

En abril de 2007, los diputados nacionales Federico Storani y Pedro Azcoiti presentaron un proyecto de ley (expediente 1350-D-2007) para proceder a la publicación del informe.

El 25 de enero de 2012, la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner anunció la conformación de "una comisión para la reapertura y conocimiento público del informe Rattenbach". 

domingo, 5 de febrero de 2012

¿Dónde estaría Gramsci en la decadente Europa actual?

Jon Juanma* - http://jonjuanma.blogspot.com/

Antonio Gramsci fue un revolucionario, teórico marxista, periodista y filósofo que llegó a ser uno de los principales dirigentes del Partido Comunista Italiano en los años veinte del pasado siglo (alcanzando el cargo de Secretario General). Murió un 27 de abril, el de 1937. En ese momento, con 46 años de edad, sumamente enfermo, se encontraba a punto de salir de la cárcel. Lúgubre morada donde el régimen de Mussolini lo había confinado arrancándolo de los brazos de la humanidad por ser, precisamente, uno de sus grandes: sensible, comprometido con los de su especie y brillantemente inteligente. Todo ello lo colocó irremisiblemente como un destacado y honesto dirigente de los explotados: de la clase obrera italiana. Primero, como miembro del partido socialista, y después, liderando el partido comunista de su tiempo. Pero por la misma razón, también lo situó en el punto de mira de los explotadores.

Hoy día, cuando se cumple el 121 aniversario de su nacimiento1, ante los acontecimientos que se precipitan en cascada sobre el cuello de las clases populares europeas2, entre recortes sociales, mercados insaciables y agencias de rating, cabe preguntarse: ¿dónde estaría Gramsci en esta Europa en crisis de principios de 2012? ¿Dónde nos podríamos encontrar en la actualidad a un pequeño hombre como Antonio3 con su inmensa estatura moral? Y se me ocurren al menos tres respuestas. Depende de si contestamos atendiendo a su dimensión política, intelectual o humana.

En tanto político que fué, no sería difícil imaginárnoslo en alguno de los mayores partidos comunistas o de izquierdas de cualquiera de los países europeos actuales. El comunismo está casi tan mal visto hoy como ayer, y peor que estará, por tanto el símil se nos antoja verosímil. Lamentablemente por ahora, las ideas marxistas no gozan de la misma popularidad entre la clase trabajadora de nuestros días que en la italiana del pasado siglo, cuando una parte importante de ella todavía tenía como referente la recién nacida Unión Soviética y luchaban por un horizonte poscapitalista. Ésta es una asignatura pendiente para los marxistas de hoy: llegó (otra vez) la hora de la revolución y nos pilló con el pie cambiado y los deberes sin hacer... Desde luego lo que está claro es que Gramsci sería lo contrario a un apolítico. Él odiaba la indiferencia como fuerza que ahogaba cualquier progreso históricos. Sin duda, en estos momentos, Gramsci estaría jugándose el pellejo blandiendo razones y luchando por una humanidad que mereciese tal nombre.

En cambio, como intelectual (orgánico) que era, lo podríamos imaginar en los centros de trabajo, de estudio o en las calles agitando a los mejores hijos del pueblo. Y seguro también publicando y debatiendo en alguna medio de Internet que substituyera a su viejo periódico L' Ordine Nuovo. En estos días de enero lo veríamos luchando contrahegemónicamente contra los intentos del bloque dominante actual por suprimir espacios de libertad en la Red, batallando contra la SOPA, la Ley Sinde y todas sus semejantes. Además, siguiendo su propuesta de intelectual orgánico de la clase obrera, tenemos la certeza de que no estaría trabajando a sueldo de ningún periódico burgués por mucho que se autoproclamase “progresista” o “de izquierdas”, porque debido a su insoslayable compromiso obrero frente a los patronos y los politicastros de izquierda, hace tiempo le hubieran prohibido la escritura en cualquiera de sus páginas. Tampoco estaría en ningún partido miembro de la Internacional Socialista que dejó enterradas a lo largo del siglo XX las ideas de Karl Marx y los socialistas de La Comuna de París para acabar abrazando la imposible mano invisible de Adam Smith, aquella que sigue meciendo la cuna, quise decir: “los mercados”.

Pero para finalizar nuestra fantasía revolucionaria cabría preguntarnos, ¿dónde estaría Gramsci como ser humano? La respuesta es sencilla: en la cárcel . O en su defecto, a punto de entrar. Porque en Gramsci no podemos separar su compromiso político, intelectual y ético de su conjunto humano, porque en él todas esas dimensiones confluían hacia la liberación de sus semejantes, todas ellas esculpían armónicamente la esencia de su persona, muchas veces puesta en tensión por los sufrimientos de su presencia, su materia, que nunca fueron lo suficientemente dolorosos para extinguir sus ansías revolucionarias de amor infinito al género humano6.

Hoy al igual que ayer, sólo que mucho peor, el capital financiero junto a los gobiernos títeres y el gran capital industrial conforman la fuerza macabra y demoledora de un imperialismo (Lenin) de carácter pornográfico (Fontes) y protonecrófilo (Fromm) que intenta llevar a las mayorías directamente a la tumba. Y todo ello, con el único fin de poder garantizar nuevas expropiaciones que aseguren la reproducción y acumulación constante de plusvalía, cada vez más, concentrada en las manos de unos pocos sádicos magnates capitalistas7. Hoy, al igual que en los tiempos de Gramsci, los espacios de democracia (aunque sea burguesa) tienden a desaparecer y la dictadura del Capital avanza con paso firme; primero enseñando una pata, después sus afilados colmillos y cada vez más su demoniaco cuerpo de mil tentáculos sedientos de cuerpos que ofrecer descuartizados en la pira de los mercados internacionalizados, donde impunemente se trafica todos los días, con la vida y la muerte de millones de nuestros hermanos.

Si no hacemos algo grande en breve, pronto tendremos a varios intelectuales orgánicos en las cárceles europeas: a numerosos familiares que visitar tras las rejas, a varios Gramsci entre cuatro paredes encerrados como si fueran vulgares criminales de la peor calaña, esto es, como si fueran grandes banqueros o especuladores (disculpen la redundancia).Y no es para esto que Gramsci se pasó estoicamente veinte años en la plenitud de su vida atrapado entre cuatro paredes, mientras sus hijos crecían sin la mirada cómplice de su padre y su mujer marchitaba frente a la constante e insoportable ausencia de su amado. No es para esto que Gramsci estuvo escribiéndonos en pequeños cuadernos a escondidas para que después de todo no hayamos aprendido nada y por nuestra inactividad volvamos, sin máquina del tiempo de por medio, no a principios del siglo donde vivió el revolucionario italiano, sino todavía más atrás: quizás a los años de Marx y Engels, a la brutal explotación del XIX. Pero esta vez, como sabemos que la historia no se repite exactamente del mismo modo, rodeados por un paisaje repleto de nanotecnología, Internet móvil y cámaras de videovigilancia controladas desde un no tan lejano espacio “exterior”.

Así desde los barrotes de una prisión imposible, las palabras de Gramsci todavía resuenan y desbordan los cauces de la mediocridad, para desde la fe irremisible de su compromiso histórico recordarnos la necesidad de llevar a cabo la filosofía de la praxis8, en tanto somos a la vez homo faber y homo sapiens. Podemos ser forjadores y sabios, albañiles y filósofos, guerrilleros y artistas. Como una vez nos recordó:

“El hombre es un proceso, el proceso de sus actos”

Partiendo de ello, Antonio se merece que le brindemos un buen homenaje. Se merece, como mínimo, una revolución. Sabemos que tenemos motivos de sobra para rebelarnos, pero tendremos que estudiar, trabajar, luchar y organizarnos por construir una revolución que merezca tal nombre. Para ello tendremos que aprender de los errores de las pasadas mientras nos armarnos de solidaridad y fraternidad internacionalista, únicas armas que nos guiarán al principio de la victoria: al amanecer del mundo socialista, a los albores de una tierra donde la paz y la libertad puedan por fin comenzar a florecer. Será nada más y nada menos que el principio de la verdadera democracia, por la que Antonio Gramsci, entregó su vida. Definitivamente fue un revolucionario al que le faltó una revolución.

Nosotros la haremos en su nombre.

* Jon Juanma es el seudónimo artístico/revolucionario de Jon E. Illescas Martínez, investigador de la FCM en la Universidad de Alicante y la Universidad Complutense de Madrid.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Argentina: Con todo y por todo

Por Luis Tonelli  - http://www.revistadebate.com.ar/2012/01/27/4994.php
La reaparición pública de Cristina, las perspectivas monocromáticas y el catastrofismo mediático opositor.


Volvió. Espléndida. Deslumbrante. Dueña absoluta de la escena. Pudiendo repetir ese poema de Paco Urondo que comienza “Si ustedes lo permiten, prefiero seguir viviendo” y que finaliza “Sin jactancias, puedo decir que la vida es lo mejor que conozco”. 

La Presidenta, en lo que también podría ser el más acabado ejemplo de la videopolítica. Una verdadera show-woman. Salvo en un pequeño detalle: el contenido de sus palabras, lo aludido en sus gestos, la referencia de su simbología. La videopolítica se constituye de lo insustancial. De lo nimio. A lo superfluo. Se explaya profusamente en la nada. Interpela de modo light al votante medio, a ése que no toma posición alguna (de manera independiente). Y la vuelta de la Presidenta a su actividad pública -porque nadie puede pensar que no monitoreó personalmente cada acto importante de Gobierno- fue, por el contrario, plena de definiciones y mensajes -quizá, el principal, el que “vuelve con todo y por todo”. Recargada.

El acto tuvo un aire de reinauguración. De relanzamiento. De nueva etapa. Pese a lo reciente de su victoria con el 54 por ciento, que también tuvo algo de reinauguración. O será que el kirchnerismo, en su virtuosismo en la coyuntura, se 
reinaugura día a día. Florece con el carácter épico que le imprime a cada decisión de gobierno relevante. 

Y si hay una épica, ésta es la de la “causa Malvinas”, a la que la Presidenta se refirió  reconvirtiéndola en gesta diplomática -en la mejor tradición argentina, que tuvo como hito diplomático el conseguido por el gobierno de Arturo Illia, cuando logró en 1965 que la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución 2065, considerara a las Islas Malvinas como un caso de “colonialismo” británico- ¡sorry, pero difícilmente David Cameron pueda conseguir una resolución igual que acuse a la Argentina de colonialismo!

Camino diplomático del que se retrocedió enormemente con la aventura de la dictadura militar, y que en las antípodas de la inefectiva política de seducción menemista, tiene en el nerviosismo del gobierno conservador el mejor indicador de que se cabalga en la dirección correcta. En esa línea, es muy importante la publicidad del Informe Rattenbach (¡al que “el último de facto” el general Reynaldo Benito Bignone clasificó como un “secreto militar y político” que sólo podía ser desclasificado con la recuperación de las Malvinas!). No sólo para conocer en su integridad un informe del que se conoce sólo lo que se filtró, sino también porque, con él, vienen todos los aportes y pruebas documentales que las tres Fuerzas enviaron después de la Guerra para su elaboración.

A la épica malvinera, la Presidenta le agregó otro combate de carácter épico, colocando a las petroleras, en la mira de su ametralladora (por ahora, discursiva). Pero las empresas han puesto las barbas en remojo porque se temen lo peor. El mensaje para ellas, y para todos, también y, especialmente, para “los de adentro” no pudo haber sido más claro: “me gusta la estética. Pero más me gusta la política”. Con todo y por todo.

A tal punto, que la Presidenta salta hacia adelante y hace caso omiso de cualquier consideración hacia el pasado. El tiempo de la “sintonía fina” hace referencia a una “A”, pero no la de ajuste, sino la de las “avivadas”, que se terminan. No importa si esas avivadas fueron consentidas, alentadas o simplemente no percibidas en los dos períodos presidenciales anteriores. Esa interpretación y constatación será para otros, no para el Gobierno.

Y mientras la oposición política habita en un “no lugar” hasta nuevo aviso, las críticas sólo parecen provenir desde los medios opositores, cosa que, paradójicamente, refuerzan la lógica épica del Gobierno, al reproducir en espejo “su” propia épica: una épica de la resistencia. 

Revisemos someramente qué nos 
dicen hoy:
1) que se acabó el viento de cola (especie confirmada por el señor ministro de Economía, Hernán Lorenzino, en su primera declaración pública); 
2) que el Gobierno no tendrá plata para cooptar adhesiones; 
3) que la coalición política K ha comenzado a desintegrarse, con la renuncia de Hugo Moyano a la conducción del PJ bonaerense -con un Daniel Scioli pidiéndole que la reconsidere, y un Florencio Randazzo diciéndole “pelito pa´la vieja, no quiero más quejas”-; 
4) que en el Gobierno mismo ha estallado una guerra interna: Guillermo Moreno pugna por convertirse en el nuevo hombre fuerte del kirchnerismo, La Cámpora avanza, y hay quienes están dispuestos a resistir; 
5) que las cosas no están mejor en términos de la sucesión presidencial: el único candidato importante que tendría el oficialismo, Daniel Scioli, está siendo asediado por su vicepresidente, Gabriel Mariotto, convertido en una suerte de Dante Panzeri que escrutiña críticamente toda acción y actitud del gobernador, y también ahí se avizoran “graves problemas”.

¿Qué panorama, no? ¿Cuánto habrá de verdad en todo esto? Y, seguramente, habrá info, habrá data. Pero, después de tanto tiempo, es evidente para todo el mundo, incluso el menos atento a la política, que en el tratamiento de la información estos medios opositores tienen unas ganas bárbaras de que se vaya todo al mismísimo diablo. 

Ante la debilidad opositora, los medios enfrentados al Gobierno han tomado esa posta, lo cual también le viene de maravillas al mismo kirchnerismo, que declara como su enemigo a quien no concurre a las urnas. Y esto ha terminado siendo un grave problema para los medios. Cuando las críticas las hace la oposición política, queda descontado que también quiere llegar al poder, ganando las próximas elecciones. En cambio, los medios opositores se presentan como un coro de arcángeles, que no sólo dicen “sólo la verdad y nada más que la verdad”, sino que, además, esa verdad se contrapone a la “mentira absoluta” contada por el Gobierno y, encima, le “hace mal a la gente”. 

Al demostrar su enfoque tendencioso, el Gobierno le pegó a los medios debajo de su línea de flotación, aniquilando su principal activo, que es la credibilidad, y volviéndosele en contra su posicionamiento discursivo: “si mienten, entonces, les interesa conseguir poder, y no a través del legitimo mecanismo electoral”. 

Y perdiendo credibilidad, los medios perdieron también potencia crítica en la polarización del blanco y negro. Cada uno escribe para el público que los lee: de este lado, todo negativo. Del otro, para corresponderlo, todo positivo. Y esto se contagia a cualquiera que quiera engancharse en el debate público: hasta los intelectuales profesan el maniqueísmo. Para un bando, el mejor gobierno de la historia. Para el otro, el peor. Pocos utilizan todos los colores que brinda la paleta de pensar y con cabeza abierta. 

Algo que también tiene que ver con la lógica mediática y la videopolítica: vende el escándalo, lo dramático, el anunciar la catástrofe inminente e inevitable. Esa crisis que ya ha comenzado, inexorablemente. Y que, después, es desmentida nada más y nada menos que por la realidad, y que termina reforzando tanto la imagen del Gobierno como también su metodología. Ahí está lo que le sucedió al ejemplo más acabado de esta forma de hacer política: Elisa Carrió, quien se enamoró de su perfil mesiánico y terminó rechazada hasta por sus apóstoles. 

El problema y las consecuencias del catastrofismo mediático opositor son peores que el “suficientismo oficialista” del que hace gala el kirchnerismo y, especialmente, el cristinismo 2.0. Porque para tener razón necesita de una Tormenta Perfecta que arrase con todo. En su ausencia, toda ineficiencia gubernativa potencial queda disimulada en ese “haberse evitado lo peor”, máxime cuando, en cambio, se disfrutó de un largo período de bonanza económica y de iniciativas progresistas esperadas por años y materializadas durante el kirchnerismo.

Y también hay que agradecer que el catastrofismo mediático se haya equivocado por lo obvio: porque lo peor que le puede pasar a la Argentina es caer de nuevo en una crisis sistémica, en una nueva frustración que nos vuelva a postrar colectivamente. Aunque la mejor manera para aventarla sería salir de las perspectivas monocromáticas, dejar atrás y bien atrás, el mundo del blanco o negro.