sábado, 30 de octubre de 2010
HASTA SIEMPRE COMPAÑERO
Argentina: El factor K
Juan Carlos Monedero - http://alainet.org/active/41908
viernes, 29 de octubre de 2010
Cuál es la razón de la masiva movilización
Tres filósofos urgan en el sentimiento colectivo y ensayan una explicación al fenómeno - http://www.elargentino.com/nota-112143-medios-122-Cual-es-la-razon-de-la-masiva-movilizacion.html
A la muerte de Néstor Kirchner le siguió –y le sigue– una masiva movilización popular a la Plaza de Mayo, una peregrinación en la que una porción significativa del pueblo argentino fue a despedir al hombre que marcó la primera década del siglo XXI. Con distintos matices, tres filósofos coincidieron en explicar que lo que llevó a la gente a integrar esa procesión responde a la irrupción de un hecho histórico que desenmascaró la falsedad del discurso mediático que pretende ocupar el lugar de la opinión pública y permitió, al mismo tiempo, advertir la emergencia de una voz y un sentir que corre “por lo bajo”, por los márgenes de la pantalla de tv o las páginas de los diarios. Pero también visibilizó los modos y las prácticas históricas de un pueblo que no duda en poner el cuerpo y ocupar los espacios públicos para ser sujeto y parte de la historia de nuestro país. Al menos así lo comprendieron y lo explicaron a Diagonales Ricardo Forster, León Rozitchner y Martín Retamoso. Para el filósofo, ensayista, investigador y profesor de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA Ricardo Forster, la masiva movilización popular a Plaza de Mayo es “un acontecimiento histórico que pone en evidencia eso profundo, invisible o invisibilizado por ciertos dispositivos mediáticos: el pueblo argentino estaba despidiendo a Néstor Kirchner con emoción, con intensidad, con fuerza, con una mezcla de tristeza y de convicción de que hay que avanzar, que hay que crecer en la herencia y en la fortaleza de ese hombre que dio vuelta a la página del país”. Desde su lectura, el pueblo despidió a un hombre que “cambió un país que estaba rajado, destruido, pero no sola económicamente, sino que estaba destruido en sus tramas más esenciales, en la vida social, cultural, política. La política estaba literalmente vaciada de contenido, arrojada al tacho de la basura, y ahora sentimos que pudimos volver a discutir absolutamente todo en el país. Y aunque faltan mil cosas, Argentina está hoy metida de cuajo en la historia latinoamericana y yo creo que la gente está agradeciéndole profundamente a Néstor Kirchner”. “Lo que está sucediendo es un agradecimiento del pueblo que le está diciendo a la canalla que se fue un hombre memorable, extraordinario, que puso el cuerpo, que puso el alma para tratar de hacer un país más vivible, más justo, con una mejor distribución de la riqueza. Yo creo que Néstor Kirchner en ese sentido está dejando, junto a Cristina también, una historia increíble: la de una pareja con un amor de chicos que atraviesan las vicisitudes del país y que están continuando la historia de la Argentina”, detalló Forster. Para el doctor en ciencias sociales, profesor de filosofía de la Facultad de Humanidades de la UNLP e investigador del Conicet Martín Retamoso, la peregrinación del pueblo “tiene que ver con una percepción colectiva, con una proyección de un modo de consciencia histórica, que el pueblo tiene de muchos procesos históricos, que tiene que ver con ciertos momentos en los cuales el imaginario colectivo, la presencia de una voluntad colectiva a la vieja usanza de Gramsci, y que aparece sin las estructuras organizativas”. “Tiene que ver con que en un momento hubo una percepción histórica, que conjuga pasado, presente y, sobre todo, futuro. Creo que esa concepción histórica de la historicidad de estos procesos genera, para las prácticas del pueblo argentino que no son las mismas que las de otros pueblos, una necesidad de ocupar el espacio público, preocuparse, poner el cuerpo en esos espacios. Y generar en ese ritual, en esa liturgia revisada, modos de reconocerse”, detalló. Para Retamoso, el pueblo se reconoce en su historia: “Creo que así como fue el 17 de octubre, como fue el diciembre de 2001, o el bicentenario, o incluso la muerte de Eva y Juan Perón, me parece que hay una percepción colectiva de que existe un proceso histórico que está cambiando en el cual es necesario estar presente. Me parece que es para el modo de percibir colectivamente para los argentinos, que no es igual para todos los países, y que tiene que ver con una tradición histórica de cómo enfrentar los momentos históricos”. Por su parte, el filósofo, docente y pensador de izquierda León Rozitchner aseguró que se expresó eso que corre “por abajo” del discurso de los medios. “No sorprende –afirmó Rozitchner–. Aunque estamos regulados por la mirada y la perspectiva de los medios, es evidente que existe algo que de todas formas se sentía: que había un apoyo a Kirchner”. “Eso estaba tapado por toda la mirada interesada en deformar la apreciación de la realidad, a tal punto que uno no podía creer en lo que veía porque pensaba siguiendo lo que los medios decían. Es decir, los medios se interponían entre nosotros y la realidad, pero en momentos tan dramáticos, creo que emerge la verdad de la situación: de alguna manera demuestra claramente el apoyo de la gente”, detalló. Desde su mirada, es la composición popular de la movilización lo que explica por qué la gente fue a despedir en masa a Kirchner: “Claro que no son damas con las cacerolas de barrio Norte. Con sólo mirar la gente que estuvo en la Plaza de Mayo se ve que es gente de los barrios que no viste en Dior ni compra en mercados de lujo. Esa gente de los barrios estaba presente, y espontáneamente llenó la plaza. Y creo que eso muestra algo que los medios y la opinión llamada pública distorsiona completamente”. El hecho histórico, explica el filósofo, “vuelve a devolver el reconocimiento de que lo que uno percibe por abajo en la gente, el efecto que uno siente en las medidas que el gobierno ha tomado, y sin –visto desde otra perspectiva– ser la revolución, sí ha habido una transformación radical de aquellos de los cuales habíamos hablado antes y que abre una perspectiva de una argentina diferente y nueva”. Anoche, el pueblo que comenzó a ser parte de la historia ocupando el espacio público fundacional de nuestra patria apenas conocida la muerte del ex presidente, continuaba la vigilia.
Susurros
La Plaza / Impresiones
A la salida del subte, a la salida de ese caldo espeso y húmedo en que los militantes de juventud habían convertido ese ámbito cerrado con consignas cantadas y emociones encontradas reflejadas en ojos rojos, una Avenida de Mayo muda recibe a un grupo de jóvenes llegados desde La Plata. Un silencio gutural e inexplicable: había miles de personas que deambulaban casi por inercia. Pero hay algo. Un sonido, o una canción que viene de los árboles. Tan poético pero tan cierto que se siente en la panza. La fricción del viento con las hojas recientemente verdes de los árboles devuelven ese rumor, ese susurro inconfundible de la naturaleza. Todo parece pasar en cámara lenta. Casi onírico. Los vendedores de chucherías nos devuelven a la realidad… o hacen más inverosímil la escena. Nico, que ya estaba en la plaza, los recibe con un beso y un abrazo fuerte a cada uno. Nico está hecho mierda. Está desencajado. Los ojos saltones, rojos, corroídos por tanta lágrima. Es una imagen, esa de los ojos rojos, que se repetirá por miles.
No se habla mientras se camina hacia la plaza. El rumor del viento con los árboles acompaña. A medida que la plaza queda más cerca, otro murmullo comienza a invadir el espacio inabarcable. Se juntan 2 ó 3 agrupaciones, se despliegan las banderas y se forma una columna de 200 personas. 200 jóvenes que, a 2 cuadras de la plaza, empiezan a aplaudir. A cantar consignas políticas. Es una retroalimentación: las personas, en general mayores, que estaban en las adyacencias, se van abriendo para dejar paso a esa columna; la reciben con aplausos que fogonean los cantos de los pibes, que se sienten acompañados. Hay química militante.Entonces, de frente a la plaza, la iconografía es otra. Es una iconografía peronista. Kirchnerista. Está llena la plaza de las Madres y de la Abuelas. Hay banderas, hay bombos, hay cantos. Hay liturgia. Hay ojos rojos. Muchos. Cientos. Miles.La escena tiene un ritmo espasmódico. Por momentos, el frenesí militante, la alegría de militar la política, se frena. Hay sosiego. Y ahí aparecen los ojos rojos. Es que el tipo era esencialmente un militante. También un líder. Y un conductor. Pero, básicamente, un militante. Dicen que la política pasa por el cuerpo. Dicen, entonces, que algunos engordan haciendo "política". Otros, sin embargo, le ponen el cuerpo. Lo ponen a disposición. La política les pasa por el cuerpo. Y, a veces, el cuerpo (esa maldita perfección con fecha de vencimiento) no es capaz de aguantar la autoexigencia militante: los mandatos de la convicción, la pulsión del espíritu, la certeza de la responsabilidad. A veces, el cuerpo no es capaz de aguantar. Las consignas que se cantan en esa espiral contradictoria en que se convirtió esta gran escena son políticas. Son "los soldados del pingüino", "a pesar de la bombas y los fusilamientos (…) no nos han vencido". Suena un hit: "Andate Cobos, la puta que te parió". "Néstor, mi buen amigo, esta campaña volveremo´a estar contigo, militaremos de sol a sol…". La Marcha. No podía ser de otra manera. Es que muchos de los que están en la plaza, y la mayoría de los que arengan, cantan y lloran casi al mismo tiempo, son jóvenes. Son esa juventud que es el principal emergente del kirchnerismo que no estaba politizado antes del 2003. Hay una pancarta, entre las miles y miles que se atiborran, pegada allá en las vallas que rodean la Casa Rosada: "Néstor, tu mayor legado a la Juventud es la Militancia: volvimos a creer que un país mejor es posible".Son los pibes, es la Juventud, los que recogen el mayor legado. Ahí hay una relación profunda, de lealtad… de amor. Por eso las consignas identitarias, cantadas con el alma y con convencimiento, se mezclan con otras en donde se cataliza la bronca por lo inexplicable (la puteada a Cobos). Y en medio de eso, el llanto. En medio de eso aparecen esos segundos donde la realidad irrefutable golpea. Ese instante en el cual se zarandean en la mente las imágenes y los sonidos disparados por la TV, por el Facebook y por el Twitter, consumidos hace un rato o en tiempo real y que son una mochila emocional. Sentados en el cordón están el padre, la madre y dos hijos. Los mayores no tienen más de 30 años, los nenes son casi bebés. Lloran todos: los papás por el dolor, los nenes por el cansancio. Una señora, de unos 70 años, lee las pancartas y banderas ofrendadas sobre la valla y se emociona: "Si eso es verdad, entonces su vida valió la pena", sentencia en relación a la consigna del legado para la Juventud. Un pibe, barba prolijamente descuidada y pelo largo, que hace 10 segundas saltaba y vociferaba la marcha peronista, ahora tiene la mirada perdida allá, en la nada. Los ojos rojos. Entre las sábanas (esas banderas inmensas), como surcando pasillos laberínticos, salen desde el epicentro (la pirámide de Mayo, donde se erige una escultura inflable gigante de Evita) señoras bien que no paran de mojar pañuelos de papel.El movimiento Evita viene entrando. Es una columna inmensa. La antecede una furgoneta con varios parlantes sobre el techo. Como en el mar, las oleadas de cantos van chocando: desde el epicentro, allá donde está la Evita gigante, hacia la periferia, en la calle. Es un caos de alegría militante mezclada con una tristeza envolvente. De repente las ondas expansivas se unen en una gran ola: el himno nacional suena en los parlantes. Nadie habla. Los dedos en V bien altos. Se escucha la introducción en un silencio sagrado. Entonces, aparece ese nuevo rumor, ese susurro mágico. Tan poético como real: es el roce del viento, ahora con las banderas. Allá en lo alto, donde las cañas depositan la simbología popular, las caras de la historia, las consignas de ayer y de hoy. Ahí arriba flamean las banderas y, mientras se escucha el tibio sonido del himno nacional, devuelven esa sinfonía maravillosa: la tela depositaria de la identidad y el roce maravilloso con la naturaleza. Es una alegoría para sublimar la ausencia. Al menos por un rato.
jueves, 28 de octubre de 2010
Bisagra en la política de DD.HH.
(*) Delegada regional de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Del cuadro de Videla a los juicios
“Fue el primer presidente en escucharnos y en hacerse eco de nuestros reclamos de siempre”, dijo Verónica Castelli, de HIJOS. “Promovió reformas profundas”, señaló el CELS. Taty Almeida, de Madres Línea Fundadora, aseguró que siente “un dolor muy grande”.
La profunda tristeza no cambió, pero después de los primeros momentos los organismos de derechos humanos pasaron del shock a moverse a la Plaza del Congreso o difundir precisos comunicados de apoyo a la presidenta Cristina Fernández. Néstor Kirchner aparece allí como el primer presidente que hizo de la política de derechos humanos una política de Estado. El hombre, como recordaron las Madres, que se asumió desde el primer día como hijo de las Madres de Plaza de Mayo. “¡Es espantoso, qué querés que te diga!”, dijo Taty Almeida, de Madres Línea Fundadora. “Es de los cincuentones, que es la edad que tendrían nuestros hijos hoy en día, y es un dolor muy grande, y la pucha si sabremos las madres de qué se trata el dolor, pero sabemos reponernos para poder estar fuerte y acompañarla a Cristina, a nuestra querida Presidenta.”
miércoles, 27 de octubre de 2010
Néstor Kirchner puso de pie a la Argentina
Y esas mismas palabras pueden repetirse hoy ante la pérdida irreparable que significa la muerte de Néstor Kirchner. Expresan el dolor que sentimos todos aquellos que luchamos por el bienestar de nuestro Pueblo, por una Patria Justa, Libre y Soberana. Lucha que tendrá, a partir de ahora, nuestros esfuerzos redoblados en el acompañamiento al proyecto nacional y popular que encabeza nuestra presidenta Cristina Fernández. Kirchner fue la expresión de un Pueblo cansado de la injusticia, decepcionado por la falta de respuesta de una democracia por la que tanto bregó. Un emergente de la rebelión popular que los días 20 y 21 de diciembre de 2001 ganó las calles para profundizar la democracia y no para derribarla. A partir del 25 mayo de 2003, día en que Néstor Kirchner asumió la Presidencia de la República, la Argentina se puso de pie. La economía se recuperó. El trabajo fue el motor de la nueva etapa. Los trabajadores recuperaron paulatinamente sus ingresos y la democracia se fortaleció de la mano de las paritarias y los convenios colectivos de trabajo. Con ellos, comenzó a recuperarse el consumo, la producción y la perspectiva de una vida mejor. También se recuperó soberanía. El Fondo Monetario Internacional dejó de dictar la política económica. La deuda externa de ser la piedra en el cuello que nos impedía respirar. Argentina volvió a mirar a su Pueblo, a sus hermanos de América Latina, a dejar atrás las oprobiosas relaciones carnales. La Unasur, de la que fue Secretario General hasta su muerte, fue la mayor expresión de unidad y emancipación de los pueblos liberados por San Martín, Bolívar y los patriotas DE LA PATRIA GRANDE. La Justicia, con mayúsculas, también fue un pilar de la reconstrucción nacional. El juicio y castigo a los responsables del terrorismo de Estado dejó la retórica para hacerse realidad. No hubo impunidad, tampoco discrecionalidad. La RENOVACION O DEPURACION (democratización) de la Corte Suprema de Justicia fue mucho más que la demostración de la independencia de poderes. Significa una garantía para todos los argentinos, incluso para quienes nos negaron durante años las garantías más elementales. Néstor Kirchner puso a la Argentina de pie. Y eligió hacerlo CON (desde) el Pueblo, desde las necesidades y aspiraciones de los más humildes. Esto le costó mucho. El ataque DE (a) las corporaciones, a quienes enfrentó. La injuria DE LOS GRUPOS MEDIATICOS (del poder mediático), de los dueños de los agronegocios, con quienes SE PLANTÓ (habló) de igual a igual. Sabía que ponía en riesgo su salud, sin embargo eligió seguir la lucha porque por sobre todas las cosas era un enorme militante. Y quiso el destinto que su gélida y entrañable tierra santacruceña fuera el lugar de su último latido. Quedó claro que no dejó sus convicciones en la puerta de la Casa Rosada cuando le tocó presidir los destinos de la Patria. Néstor Kirchner inició el camino que hoy sigue su compañera y Presidenta Cristina. El camino que todos aquellos que abrazamos la causa por la justicia social, la independencia económica y la soberanía política tenemos la obligación de continuar. *Sergio Fernández Novoa, vicepresidente de Télam y presidente del Consejo Mundial de Agencia de Noticias |
martes, 26 de octubre de 2010
La gran estafa de un todopoderoso
lunes, 25 de octubre de 2010
La Unidad 9 abrió una puerta
En ese sentido, la causa de la Unidad 9 y la condena a los médicos no sólo echa luz sobre la participación civil sino que muestra también cómo una institución legal –qué otra cosa es una unidad penitenciaria– fue parte del sistema represivo ilegal. “La Unidad 9 entra dentro del aparato represivo a fines de 1976, cuando llega el general Sasiaiñ. Hasta ese momento había un director, había habido episodios pero muy aislados –dice Pérez Aznar–. Sasiaiñ venía de estar en Córdoba como general, donde en la UP 1 ya se venían aplicando las leyes de fuga. También en ese año se habían cometido las masacres de Margarita Belén y de Palomitas. Asimismo, Dupuy llega como una especie de enviado del Servicio Penitenciario Bonaerense para suscribir y aplicar este régimen en la Unidad 9. Ahí es donde entra esto que nosotros dijimos en el alegato: todo el tiempo se entraba y se salía de la legalidad a la clandestinidad”.
También quedó en evidencia que en las cárceles “legales” de la dictadura existió una persecución tendiente a la destrucción psicofísica y, en muchos casos, la muerte, de los presos políticos, lo cual extiende el universo represivo a las doce mil personas que, según cálculos extraoficiales, estaban en ellas. Una represión ilegal que además se extendió a los familiares de no pocos detenidos. Hay alrededor de 15 familiares desaparecidos de detenidos en la Unidad 9.
Por último, pero no menos importante, sacó a la luz pública a una nueva generación de actores jurídicos, con abogados que no superan los 40 años, dispuesta a investigar hasta las últimas consecuencias –y sin dejar de lado a ningún tipo de actores– los delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura. Pérez Aznar supera en poco la edad de 30 años, Barbuto ronda los 40. El fiscal Hernán Schapiro, autor del brillante alegato final en la causa, tiene 38 años. Ellos, y muchos otros, tienen la firme convicción de que sólo hay Justicia si se investiga hasta las últimas consecuencias. Como dice Barbuto, mientras termina el último mate: “Para dar vuelta la página de un proceso histórico, ésta tiene que estar escrita. Si la doy vuelta en blanco, no doy vuelta nada. Estos procesos están escribiendo la historia, porque es muy importante que la verdad, si se trata de delitos, tenga fundamento en una sentencia jurídica. Es la única manera”.
domingo, 24 de octubre de 2010
Argentina: La Presidenta de la Nación encabezó un multitudinario acto en Chivilcoy
Anuncios durante el acto de 156º aniversario de la fundación de la ciudad
La Presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner encabezó el multitudinario acto realizado ayer al mediodía en el centro de la ciudad por el 156º aniversario de la ciudad de Chivilcoy, en el que se anunció la pavimentación por etapas de todas las calles ubicadas entre la Primera y Segunda Circunvalación, la extensión de cloacas, la finalización del Barrio Federación, y la remodelación de la plaza 25 de Mayo.
Cristina Fernández de Kirchner asistió por segunda vez a Chivilcoy en su carácter de Presidente de la Nación, y cerró el acto con un emocionado discurso donde resaltó las distintas decisiones políticas adoptadas a partir del año 2003.
El acto se inició formalmente a las 12.30, minutos después del arribo de Cristina Kirchner a Chivilcoy, y tuvo además la presencia del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, el ministro del Interior Cdor. Florencio Randazzo, el ex presidente y secretario general de la Unasur, Néstor Kirchner, el ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Dr. Ariel Franetovich, el jefe de la SIDE, Héctor 'Chango' Icazuriaga, y un importante número de funcionarios nacionales, provinciales e intendente de la región.
Asistencia al acto Según las estimaciones realizadas por la Jefatura Departamental de Mercedes, de la Policía de la provincia de Buenos Aires, unas 22 mil personas habrían asistido al acto. Así lo dio a conocer a este medio el jefe de la Policía Comunal de Chivilcoy, comisario inspector Juan Carlos Agüero, aunque otras versiones hablan de un número cercano a las 15 mil.
Hubo también numerosas delegaciones escolares, representantes de los establecimientos educativos del distrito en todos sus niveles, que se ubicaron casi en su totalidad en el sector del atrio de la Iglesia Mayor. Más allá de las cifras, miles de chivilcoyanos se volcaron a las calles durante todo el día de ayer, desde muy temprano, para participar no solo del acto oficial sino también para ver pasar a la Presidenta de la Nación en su recorrido desde el Polideportivo, su paso por la firma Martelletti Hnos. hasta el centro de la ciudad, y disfrutar de las innumerables propuestas protocolares, deportivas y artísticas que se desarrollaron en la plaza 25 de Mayo.
El arribo de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner arribó a Chivilcoy en el helicóptero presidencial, junto al ministro del Interior Florencio Randazzo, a las 12.20 aproximadamente.
Aterrizó en el Polideportivo Municipal donde ya la estaba aguardando el gobernador Daniel Scioli, y los funcionarios provinciales y municipales, encabezados por Aníbal Pittelli, Ariel Franetovich y la diputada provincial Graciela Rolandi. En el Polideportivo se habían dado cita cientos de vecinos que fueron a saludar a la Presidenta, que salió rumbo a la fábrica de Martelletti Hnos.
En el trayecto, que realizó en una combi casi a paso de hombre, asomada a la ventanilla, fue saludando a cada uno de las personas, de todas las edades, que hicieron una especie de cordón humano en todo su recorrido. Luego ingresó a la planta molinera, donde procedió a la inauguración de una fábrica de fideos finos, cuya producción estará destinada, en gran parte, a la exportación, y luego se encaminó hacia el centro de la ciudad donde la aguardaban miles de personas frente al palco oficial armado sobre la primera cuadra de la calle 9 de Julio.
Acompañada por Néstor Kirchner, Daniel Scioli, Florencio Randazzo, Aníbal Pittelli, Ariel Franetovich y Héctor Icazuriaga, la Presidenta saludó a los asistentes al acto desde el palco y luego se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino, que además, fue interpretada en el lenguaje de señas para sordos por dos alumnos de la Escuela Normal.
Posteriormente, se procedió a la entrega de regalos a la Presidenta y al gobernador Daniel Scioli, y luego se proyectó un video institucional en el que se pudieron observar a varios vecinos de Chivilcoy agradeciendo por las distintas políticas adoptadas por el gobierno nacional, en materia de jubilaciones, Asignación Universal por Hijo, planes de viviendas, cooperativas de trabajo, matrimonio igualitario, Derechos Humanos, entre otras.
sábado, 23 de octubre de 2010
miércoles, 20 de octubre de 2010
Argentina - Petróleo y misiles en el Atlántico Sur: Una provocación a la inglesa