miércoles, 7 de julio de 2010

Argentina: el regreso de una oposición destructiva (¿o destructora?)

Carta Abierta/Mendoza - http://www.surysur.net/?q=node/14074

Hay diferencia entre hacer obstrucción y hacer oposición. Sin dudas que la crítica constructiva en pro de mejoras en la condición del país es siempre necesaria al funcionamiento democrático. Sin embargo, la oposición cerrada y total, la que a todo dice "no" y busca impedir el funcionamiento institucional, nada tiene de aporte a la democracia.


Menos aún la curiosa situación que se da en Argentina, donde la derecha que apoyó a la dictadura se mezcla con el radicalismo y con sectores que se dicen de izquierda, en una mezcla indigesta que carece de toda posibilidad de servir a algún proyecto de gobierno -jamás tendrían coherencia entre sí-, cuya única convergencia es la acción disolvente contra quienes gobiernan hoy según el mandato electoral legítimamente otorgado.

Sabemos que la globalización económica consiste en el aumento del poder de los capitales multinacionales por sobre los estados-nación. Por ello, ha disminuido la capacidad política de maniobra de cada país frente al silencioso accionar de las fuerzas económicas trasnacionales. Ello redundó en lo que vimos en los años noventas: todos los sectores políticos se parecieron entre sí, con la única receta del achicamiento, el ajuste y las propuestas del FMI con aumento de la deuda externa. Esto es, la subordinación de la política a las ciegas leyes de aumento de la ganancia de los grandes pulpos económicos.

A comienzos de este siglo, se empezó a ver algo distinto a esto en diversos países de la región: Bolivia, Venezuela, Brasil y Ecuador entre ellos. Se recuperó el gasto social, la capacidad directriz del Estado y la posibilidad de reorientación de la renta pública. Aparecieron gobiernos que, sin plantearse una ruptura frontal con el capitalismo (que hoy sería altamente improbable), abandonaron la lógica del capitalismo para unos pocos.

Lo mismo sucedió en Argentina desde el año 2003, proceso dado en cada país con sus singularidades. Aquí, como en esas otras naciones hermanas, la deuda externa dejó de crecer y comenzó a suturarse parte de la deuda social. Desaparecieron los ajustes constantes, y se comenzó un proceso de gradual integración sudamericana. Se inició una política de derechos humanos que es un enorme logro institucional, así como lo es una Corte Suprema independiente. Y la anterior calamidad permanente, que llevó en su momento a cobrar con bonos o a que se bajaran los sueldos y jubilaciones antes del año 2001, fue cediendo a una política que ya no requirió hacer de la represión su recurso tan habitual como salvaje.

A esas mejoras se opone hoy la variopinta oposición, que junta socialistas con macristas, radicales con peronistas de derecha, Stolbizer con Duhalde o Nosiglia con Bulrich. Creìamos que el Mundial los llevaría a una tregua, pero ni siquiera eso ocurrió.

Vuelven en los medios y en el Congreso con renovada voluntad de obstrucción, con una sostenida ofensiva. Y suman asuntos diversos a granel: destacamos entre ellos la negativa a publicar lo dicho por Sadous, el ocultamiento de la condición de los que aparecen como hijos adoptados por la Sra. de Noble, y el paradojal pedido de un 82% para los jubilados.

La declaración de Sadous ha sido pedida, porque una tapa del diario Clarín publicó lo que pretendidamente había pasado en una sesión secreta de comisión del congreso. Como siempre, se trata de desprestigiar acciones del gobierno, más aún si son en relación con Venezuela. Lo cierto es que se ha pedido la versión taquigráfica de lo dicho en el Congreso, y la negativa opositora a darla muestra que -según parece- se inventó lo puesto en una tapa de diario, caso que obviamente no sería el único en esa clase de comportamiento mediático falaz.

Los que aparecen como hijos adoptivos de la Sra. de Noble -principal propietaria del grupo Clarín- han cometido en variadas ocasiones acciones para impedir que se pueda reconocer su ADN. Así la acción judicial lleva alrededor de ocho años. Ahora bien, si nada hubiera que ocultar, no se entiende por qué estas interminables maniobras dilatorias. Por tanto, la presunción de que se trata de hijos de desaparecidos se hace cada vez más ineludible. En este caso, la obstrucción se hace al accionar de la justicia.

Y lo más insólito es que los grupos que rebajaron las jubilaciones al mínimo (el peronismo federal cuando gobernaba con Menem, y el radicalismo que con De la Rúa las rebajó un 13% tras años y años de estar congeladas), ahora piden lo imposible: 82% móvil e inmediato para todos. Es exactamente lo contrario de lo que han hecho como gobierno y sostienen en su política opositora. Pero si no pueden hablar mal de medidas del gobierno (entrada de casi 3 millones de nuevos jubilados al sistema, recuperación de los depósitos de las AFJP, Asignación por Hijo), han decidido pedir lo imposible. Es decir, ahora piden políticas sociales al estilo de las que promueve el gobierno nacional, pero haciéndolas inviables. Ello es evidente en que hablan de otorgar el 82% pero se niegan a que el Estado pudiera recaudar para sostenerlo (la oposición a la Ord. 125 fue ejemplar al respecto).

Los jubilados vienen cobrando regularmente, siempre a tiempo y con aumentos dos veces por año. Y muchísimas personas que habían trabajado pero no podían acceder a la jubilación, la tienen gracias a decisiones de este gobierno.

La seriedad de la propuesta opositora se muestra en la intervención de Cobos en este debate. Su restitución del 82% en Mendoza fue sólo para los que lo tenían antes de 1996, y por cierto se hizo en acuerdo y colaboración financiera con el gobierno nacional, al cual él apoyaba en ese entonces. Esa restitución llegó sólo a un 3,5% de la masa de jubilados. Sin embargo, el ex-gobernador quiso presentarlo como ejemplo de un 82% que pudiera darse a todos, lo que es algo muy diferente. Notoriamente se trató de promover confusión, prometiendo lo que en la práctica no se hizo antes, ni es ahora viable.

Se juega con las expectativas sociales. Los que gobernaron fundiéndonos como país, ajustándonos al extremo, ahora piden un gasto social que ellos jamás quisieron dar. Los que se fueron del gobierno en helicóptero echados por el enojo popular, nos dan lecciones de cómo tratar a los jubilados. Los que llevaron los salarios a condiciones mínimas e irrisorias, pretenden obligar a una descompensación presupuestal que nos lleve nuevamente a endeudarnos con organismos internacionales. Pues si bien es necesario revalorizar las jubilaciones, cabe advertir que ello podría hacerse sólo gradualmente, sin la presión política de quienes ponen el tema como lema de campaña y asumiendo que en ese caso deberán pagar trubutos nuevos quienes más tienen, que son precisamente los aliados políticos de aquellos que hoy lanzan al aire esta consigna.

Ojalá la memoria social pueda mantenerse, más allá del ruido mediático. Si se llegara a dar crédito a estos cantos de sirena de los líderes del desastre nacional, de los campeones del colapso en el 2001, de los destructores sistemáticos de la economía y la institucionalidad del país, corremos el riesgo de que la estabilidad conseguida se vaya perdiendo, y nos retrotraigamos a los tiempos en que la patria parecía desvanecerse cada día bajo nuestros pies.-

domingo, 4 de julio de 2010

La utilización de redes sociales y sus herramientas para campañas electorales

Jhonnatan Gamboa - http://alainet.org/active/39263

Estamos ante un fenómeno que día a día toma mayor trascendencia en la forma de hacer política en las campañas electorales: la evolución de las tecnologías y a su vez de las redes sociales ha colocado en el escenario internacional un nuevo actor, como bien lo afirmaba Manuel Castells no solamente han cambiado las redes también la tecnología. Es decir, que la red, pone juntos varios elementos, varias personas, varios trozos de empresa o varias empresas para hacer algo juntos.


Tiene la ventaja de la flexibilidad, de la adaptación rápida a la demanda: cuando hay una demanda fuerte se organiza la red, cuando no la hay, se disuelve y se usan nuevos recursos. Pero tiene un gran problema: la coordinación.

Ahora bien, centrémonos en el tema netamente de las campañas electorales. En principio definamos el termino Web 2.0: está comúnmente asociado con un fenómeno social, basado en la interacción que se logra a partir de diferentes aplicaciones web, que facilitan el compartir información, la interoperatividad, el diseño centrado en el usuario y la colaboración en la World Wide Web. Ejemplos de la Web 2.0 son las comunidades web, los servicios web, las aplicaciones web, los servicios de red social, los servicios de alojamiento de videos, las wikis, blogs, mashups y folcsonomías. Un sitio Web 2.0 permite a sus usuarios interactuar con otros usuarios o cambiar contenido del sitio Web. En contraste a sitios web no-interactivos donde los usuarios se limitan a la visualización pasiva de información que se les proporciona1.

Este hecho ha traído un cambio revolucionario en varios sentidos de hacer y ver la política, por lo cual surge la necesidad de aplicar e innovar a su vez en las estrategias de comunicación y del cómo hacer parte de esta nueva dinámica, ya que se ponen en la mesa de debate escenarios que antes no estaban contemplados.

Por ende si las entidades del gobierno no intentan modernizar el Estado interactuando de forma directa en donde están los canales de comunicación quedarán al margen de grandes temas y necesidades que requieren los ciudadanos en tiempo presente. Esto al mismo tiempo lleva a una distancia entre lo que plantea el gobierno y sus ciudadanos, porque al no saber sus necesidades todos los mensajes que se generen no tendrán un impacto fuerte ni positivo en la comunidad.

Este proceso de modernización del Estado viene de la mano con los avances en la tecnología, la creación de redes, donde interactúan empresas, personas e instituciones de una manera rápida y flexible de adaptación instantánea a la demanda de la sociedad. La fuerza expansiva en la última década de los medios de comunicación y en especial Internet con las redes sociales ha generado una herramienta clave en los proceso electorales, esta modalidad ha tomado gran trascendencia a nivel mundial y especialmente en América Latina donde cada día son más los candidatos o proyectos políticos que se promueven a través de la web 2.0. Si bien para muchos críticos este es un fenómeno sin trascendencia, ya que responde a un hecho de consumo que no significa votos reales, el fenómeno desde mi punto de vista va mucho más allá y será el caballo de batalla en procesos electorales en un futuro no muy lejano.

Para ilustrar un poco mas el tema valdría la pena retomar algunos casos recientes, donde el papel de las redes sociales juega de manera crucial un efecto positivo de cara a elecciones presidenciales.


Casos

Estados Unidos

Para muchos la participación activa de redes sociales en elecciones presidenciales comienza con la contribución del equipo de trabajo de Barack Obama. Sin embargo existen casos anteriores a este, como el de España, con la administración de José Luis Zapatero, donde se utilizaron las redes de diversas maneras pero sin un efecto tan contundente. Por esto el uso y el efecto positivo que tuvo la campaña on line de Obama a la cual fueron dirigidos altos recursos tecnológicos y humanos coloca como referencia de la Web 2.0 a esta administración.

¿Como lo hicieron? Entendiendo el contexto político en principio. El desgaste que traía consigo el gobierno de Bush, la crisis económica que se veía venir y el alto costo de tener soldados en Afganistán e Irak fueron algunos de los puntos más relevantes que le abrieron la puerta a esta administración para interactuar con el disconformismo de sus ciudadanos. Todo este panorama se empieza a observar reflejado en las redes, los usuarios de Facebook y Twitter dan inicio a una ola mediática de apoyo al nuevo cambio, rechazando lo ya mencionado de las anteriores gestiones, con consignas como “no mas guerra”, “no mas soldados muertos”, se abre una puerta de admiradores de la propuesta de Barack Obama, además la descendencia afroamericana y la propuesta de reforma al sistema de salud le da un contexto de inclusión en todas las esferas de la sociedad el cual es muy bien aprovechado. Es en este momento donde verdaderamente entra a la contienda el equipo de comunicaciones de esta administración, visualizando el contexto y atendiendo al llamado de la sociedad, emprendiendo una campaña mediática sin precedentes a través de las redes sociales. La estrategia utilizada en principio fue otorgar la Dirección de los Nuevos Medios de Comunicación de campaña a uno de los fundadores de Facebook, Chris Ughes, el cual genero un movimiento de magnitudes impensables para la administración.

De esta manera la red social Facebook a la que están suscritos más de 300 millones de personas en el mundo, con 70 millones de usuarios registrados en Los Estados Unidos logro captar 6 millones de usuarios que se identificaron como “Amigos o fans de Obama” durante el proceso electoral. Además de esto se formaron, a través de las Redes Sociales, más de treinta mil grupos de voluntarios y cerca de doscientos mil actos electorales2.

Es de resaltar en esta campaña la presencia del Equipo de Comunicación de Obama en Facebook el cual se encargó de subir videos, contestar mensajes y hacer un debate diario con iniciativas nuevas en cada momento. Un debate amplio que atendió y escuchó las necesidades inmediatas de los usuarios. Además no conformándose sólo con las redes sociales, utilizaron las bases de datos de las mismas para generar correos electrónicos, donde la idea principal era acercar al usuario a la página oficial (my.barackobama.com) para que se expresara y dejara sus opiniones acerca de todo su contenido, generando así una dinámica de debate.

De esta manera y ya con un panorama firme establecen el “yes we can” como emblema a través de un video3 consiguiendo un record de visitas en el mismo. A su vez aprovechando el fuerte consumo al que responde el ciudadano promedio norteamericano, se ingenió una campaña por medio de SMS para informar acerca de eventos locales, difundir en tiempo real los resultados obtenidos en las encuestas realizadas a lo largo de la Campaña y recordar el día concreto y lugar correspondiente en que se llevarían a cabo las votaciones. Un claro ejemplo de la utilización de mensajes de texto es cuando la administración Obama anuncia su formula vicepresidencial, el político Joseph Robinette "Joe" Biden, Jr. Momento en el cual se enviaron más de tres millones de mensajes de texto4.


Sitios utilizados:

http://www.my.barackobama.com/

www.youtube.com/watch?v=jjXyqcx-mYY

http://www.facebook.com/barackobama

http://twitter.com/BARACKOBAMA


Chile

En las recientes elecciones de Chile los candidatos a la presidencia incorporaron a las campañas electorales un fuerte trabajo en lo que se refiere a comunicación política por Internet, desarrollando páginas, blogs, cuentas de seguidores en Facebook, Flickr, canales en YouTube y utilizando de forma constante las cuentas de Twitter. Este último jugó un papel principal a lo largo de toda la campaña, logrando que los medios masivos de comunicación estuviesen al tanto para generar artículos de opinión de último momento.

Un caso particular y sin precedentes que vale la pena resaltar en el caso chileno es la transmisión en directo de un debate presidencial televisivo por medio de twitter , en el cual los usuarios daban su opinión acerca de los diferentes temas y posiciones que adoptaba cada candidato en sus respuestas, registrando hasta 600 comentarios por minuto. Es dable mencionar que mucho antes de tener sitio propio en Internet, el candidato en ese entonces y ahora presidente Miguel Juan Sebastián Piñera Echenique creó su perfil en Facebook e innovó con un formulario donde solicitaba a los votantes que le cuenten "el Chile que quieren", lo que generó una gran respuesta y aceptación de los usuarios. Cabe resaltar que el medio elegido por el grupo de trabajo de Piñera fue la red social Twitter con la cual logró más de 30.800 personas que se adhirieron a su red; y el cual utilizó diariamente para contar novedades de su campaña.

Sin embargo esta administración, al parecer, no comprendió del todo bien la utilización de las redes sociales y su universalidad, copiando de una manera poco creativa campañas utilizadas en Estados Unidos por Barack Obama y por José Luis zapatero en España, lo que conllevo a fuertes críticas.

Sitios utilizados:

http://www.mojatexchile.ning.com/

http://twitter.com/SebastianPInera

www.youtube.com/user/sebastianpinera


Venezuela

El caso de Venezuela podríamos decir que es atípico al orden de ideas que llevamos en el texto. La diferencia radica en la utilización de las redes sociales, esta vez no como instrumento para llegar a una presidencia, si no por el contrario, se manejan como defensa a un modelo en construcción con la consigna que el uso de estas herramientas mejorará la calidad de vida del pueblo venezolano. Esta estrategia comunicacional parte con la designación de Tania Díaz como Ministra de Información y Comunicación, la cual incentiva la utilización de las redes sociales como medio para fortalecer la imagen del gobierno y responder de forma inmediata a los comentarios en contra del gobierno realizados por medios de comunicación privados.

A esta estrategia se le dio el nombre de operación Trueno Comunicacional, una iniciativa que tiene como objetivo llegar a cada rincón del país para luchar contra "la mentira" y "democratizar la información" establecían textualmente fuentes del gobierno.

Esta operación se realiza a través de celulares, Internet y sus redes sociales, Facebook, twitter, blogs, volantes y también a través de murales callejeros, con la participación de mas de 70 estudiantes de educación media de entre 13 y 17 años, que tienen como principal objetivo contrarrestar la "andanada de ataques contra la revolución bolivariana" que vienen haciendo los medios de comunicación privados, así como fomentar "una nueva manera de ver el mundo a través del socialismo”, establecía la Ministra de información y comunicación.

Como podemos observar existe ya una diversidad en la manera de interpretar las redes sociales en la manera de hacer política, en este caso se pasa de crear una campaña con fines electorales a difundir y defender la postura de un gobierno, con un mecanismo de respuesta inmediata, donde a un comunicado de los medios que atente contra las postulaciones del gobierno, inmediatamente estos jóvenes por medio de las redes sociales difunden y rechazan tales afirmaciones.


Sitios utilizados:

http://www.facebook.com/pages/Hugo-Rafael-Chavez-Frias/37071909882

http://twitter.com/chavezcandanga

http://www.chavez.org.ve/


Colombia

El reciente caso de elecciones para presidente en Colombia resulta muy interesante a la hora de estudiarlo por varias situaciones; si bien observamos la increíble fuerza de las redes sociales, también presenciamos que las redes por si solas no son tan confiables para asegurar votos reales. Si no se consolida una estructura fuerte, con objetivos claros y concretos que tengan un seguimiento constante y dinámico la red no será más que un vínculo virtual en el cual se generen grandes discusiones sin llegar al objetivo primordial que es el voto real.

Ahora pasemos al suceso. La inclusión de las redes sociales en Colombia toma verdadera trascendencia cuando el candidato del Partido Verde y ex alcalde de Bogotá, Antanas Mockus, invita como formula vicepresidencial a Sergio Fajardo, reconocido académico y ex alcalde de Medellín, el cual posee una imagen favorable por su gestión en una de las ciudades mas conflictivas del país. Después de este pronunciamiento se da inicio a un boom mediático en las principales redes sociales, siendo Facebook la herramienta elegida por los adeptos, captando el mayor numero de fans hacia Antanas Mockus y su partido, llevándolo en tan solo doce días a escalonar 12 puntos en las encuestas, pasando a ocupar el segundo lugar en intención de voto, algo que no se había registrado en la historia política de Colombia de cara a unas elecciones presidenciales.

Las redes sociales como Facebook y Twitter se convirtieron en iniciativas propias de la ciudadanía y se llegó a registrar un fan cada 6 segundos, llegando a 400 mil seguidores, un efecto mediático tan fuerte que hasta un importante sector de actores representativos de la vida nacional se suman a tal acontecimiento, y producen y publican a través de Youtube un video por iniciativa propia, al margen del partido pero apoyándolo directamente. Este comercial llegó a registrar 606627 visitas, dato que no es menos relevante. De ahí en más el efecto se extendió adentro y fuera del país en diferentes ciudades del mundo como: New york, Paris, Londres y Buenos Aires donde asistían en ocasiones más de 100 personas en apoyo al candidato del Partido Verde.

Sin embargo y para sorpresa de muchos, la creciente oleada mediática distorsionó las encuestas nacionales y, hasta los propios medios de comunicación nacionales y extranjeros se vieron enceguecidos por esta ola virtual que registraba casi un empate técnico entre los dos candidatos, cosa que no sucedió: en la primera vuelta el Partido Verde tan solo llegó a conseguir un 23 por ciento, mientras el candidato del Partido de la U y sucesor de las políticas del actual presidente, llegaba aun 48 por ciento.

Cabe aclarar que este resultado tuvo varios matices, por un lado, encontramos una de las contras de estas redes sociales y que también será fruto de futuros debates: “las campañas de desprestigio”, que al estar en una base de datos tan diversa y sin una manera efectiva de regulación llegan a hacer tan efectivas como las propias para llegar al poder. Así como encontramos equipos de trabajo para construir proyectos y hacer debates sobre diferentes temas, también encontramos equipos de marketing negro y especialistas en este tipo de campañas oscuras on line que dirimen de manera directa el buen uso de las redes sociales con fines democráticos.

De igual manera, el fuerte apoyo que tiene el gobierno de Uribe Vélez de gran parte de la sociedad fue otro de los ítems que se vio reflejado en los comicios, tema que no traeremos a coalición para no distorsionar el contenido. Siguiendo lo anterior y, ya pasando a segunda vuelta, los dos candidatos, se llega a un contundente triunfo de Juan Manuel Santos con casi un 70% de apoyo sobre un 29.8% de apoyo al candidato del Partido Verde Antanas Mockus. Para muchos, fue, además de la derrota del Partido Verde, la derrota de las redes sociales frente a la maquinaria tradicional de hacer política.

Es dable mencionar que un partido que se consolidó en tan solo 4 meses fue el segundo en intención de voto y se convirtió en la nueva fuerza política, perfilándose de cara al futuro, todo esto gracias, en su mayoría, a las redes sociales como Facebook y Youtube, herramientas fundamentales en esta campaña.

Como ultimo dato, para dejar en claro lo expuesto, tenemos que, según el portal de estadísticas Facebakers.com, Mockus es el séptimo personaje a nivel mundial con 684.341 fans en la red social. También es el único latinoamericano entre los 15 nombres iniciales de esta lista. En el primer lugar de este ranking se encuentra el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Además obtuvo un crecimiento del 60 % en el último mes en su página de Facebook, lo que equivale a 255.322 nuevos seguidores, ubicándolo en segundo lugar en la lista de los grupos de dicho portal con más usuarios a nivel mundial5.

Sitios utilizados:

http://www.antanasmockus.com/

http://www.youtube.com/watch?v=Vqn0oL8T-qc

http://www.facebook.com/a.mockus

http://twitter.com/antanasmockus


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Después de haber examinado estos casos y advertir la influencia de las redes sociales en los procesos electorales, encontramos que si bien la dinámica de las redes ha tomado un fuerte impulso, todavía no está del todo experimentada y faltan muchas cosas por establecer y generar. Las redes están y tiene su propia fuerza pero si no las entendemos caeremos en un vacío mediático de esfuerzos.

Partido: líneas, principios, misión, visión, objetivos generales y específicos.

Equipo de trabajo interdisciplinario: estará compuesto por comunicadores sociales, politólogos, sociólogos, creativos y management organizacional. Que estarán a cargo del diseño y el desenvolvimiento de las redes.

Equipo de soporte y mantenimiento: conformado por expertos en sistemas de red que den respuesta inmediata a los inconvenientes y temas de la tecnología en red Web 2.0

Grupo de analistas de resultados: que bien puede ser el equipo de trabajo interdisciplinario, el cual en este pasó se encargara de disgregar todas las necesidades de los usuarios, contestar mensajes y establecer prioridades. Al mismo tiempo identificaran los diferentes grupos que nacen en el proceso.

Este punto es pieza clave, por que acá es donde realmente se genera el contacto con los usuarios, se responden sus inquietudes intentando generar un vínculo de compromiso con la causa, para esto se hace necesario un especial tacto y conocimiento de pies a cabeza del contexto político en que se desarrolla.

Contacto cara a cara: Establecer reuniones y dejar que la redes tomen una dinámica propia, pero siempre llegando con un grupo preparado a las mismas. En el caso particular pude ver como la dinámica propia de las redes creo lideres nefastos para campañas importantes, que a su ves desanimaron a una parte del conglomerado, por tal razón se hace necesario tener un equipo ágil y dado a la elocuencia en las reuniones de plazas y multitudes que tengan como finalidad convertir esos mismos fans on line en votos reales que seria el fin último.

Conclusiones

El uso de las redes sociales comienza hacer y será una herramienta fundamental de cara a sucesos electorales y a todo lo que tenga que ver con la nueva forma de ver y hacer el arte de la política, es una manera fácil y directa de acceso al ciudadano. Sin embargo es fundamental no improvisar ya que es una fuerza a veces incontrolable, por ende hay que tener claramente visualizado el panorama, el porcentaje de usuarios que tienen acceso a Internet, definir a que sectores llega el mensaje, un equipo de trabajo interdisciplinario constante y de ahí en delante construir una modelo de seguimiento que acompañe un proceso real mas que mediático.

También es dable mencionar que si bien existe un furor en la utilización de las redes sociales éstas, a su vez, son muy susceptibles a huir de los temas políticos, por eso hay que visualizar todos los contextos antes de entrar a influir y actuar en las mismas. La red posee una dinámica propia que a su vez se hace difícil de controlar, pero como el fin no es controlar la red si no por el contrario difundir un programa o proyecto basado en las necesidades de la sociedad, esta dinámica se convierte en un vínculo de doble vía donde ganarán todos los actores del proceso.


RECOMENDACIONES

tener claro el contexto político en que se desenvuelve.

dejar que las redes sociales tomen su propia dinámica pero siempre teniendo uno o varios centros propios (página oficial, video oficial, etc.)

innovar en el mensaje, no repetir, ni siquiera acercarse a modelos ya propuestos de páginas, videos, logos, se han de campañas nacionales o internacionales. La creatividad en los medios se hace fundamental ya que el conglomerado de usuarios en su mayoría pertenece a un rango de 18 a 35 años que navega constantemente por la web.

Hacer un filtro de mensajes concretos con fines específicos para no generar spam y el desgaste de los mismos.

Hacer una base de datos con los usuarios más comprometidos tanto a nivel nacional como internacional con el fin de establecer líderes a fines que no distorsionen ni confundan el mensaje.

Interactuar de manera directa con los usuarios a través de videos y charlas programadas on line, que hagan un contacto más real.

Cuando se llegue al paso de las reuniones ya sea en plazas, centros o diversos lugares, por iniciativa del grupo de trabajo, del partido, o de los usuarios, incentivar cada reunión con un emblema o símbolo que demuestre la transformación del contacto virtual al contacto real.

Continuar con el vínculo después de lograr el objetivo, innovando y atendiendo de la misma manera a los ciudadanos.


BIBLIOGRAFIA

http://es.wikipedia.org/wiki/Web_2.0

http://www.hoytecnologia.com/noticias/Obama-lidera-clubes-fans/94593

http://www.youtube.com/watch?v=jjXyqcx-mYY

http://www.my.barackobama.com/

www.youtube.com/watch?v=jjXyqcx-mYY

http://www.facebook.com/barackobama

http://twitter.com/BARACKOBAMA

http://www.america.gov/st/democracy-spanish/2009/March/20090324104732emanym0.1252558.html

http://www.mojatexchile.ning.com/

http://twitter.com/SebastianPInera

www.youtube.com/user/sebastianpinera

http://www.facebook.com/pages/Hugo-Rafael-Chavez-Frias/37071909882

http://twitter.com/chavezcandanga

http://www.chavez.org.ve/

http://www.antanasmockus.com/

http://www.youtube.com/watch?v=Vqn0oL8T-qc

http://www.facebook.com/a.mockus

http://twitter.com/antanasmockus

http://www.cicodi.org/PublicacionesPorCategoria.aspx?CategoriaId=9

http://www.laolaverde.com/?cat=6


Lic. Jhonnatan Gamboa

1 http://es.wikipedia.org/wiki/Web_2.0

2 http://www.hoytecnologia.com/noticias/Obama-lidera-clubes-fans/94593

3 http://www.youtube.com/watch?v=jjXyqcx-mYY

4 http://www.america.gov/st/democracy-spanish/2009/March/20090324104732emanym0.1252558.html

5 http://www.laolaverde.com/?cat=6

viernes, 2 de julio de 2010

La Copa del Mundo y la política de la inmigración: ¿Dirán lo que piensan algunos jugadores?

Jules Boykoff* - http://www.surysur.net/?q=node/14020

La Copa del Mundo está produciendo situaciones caprichosas: la rápida eliminación del actual campeón, Italia; todos los equipos africanos con la excepción de Ghana vencidos en la primera vuelta; y algunos equipos con pocas probabilidades, como Japón y Eslovaquia, calificados para octavos de final. Nos hemos fijado mucho en la falta de entusiasmo de Inglaterra, en el merecido éxito de Suramérica y en la patética implosión de Francia. Pero el torneo también ha suministrado convincentes corrientes políticas que merecen nuestra atención.



Para comenzar, varios países europeos con políticas de inmigración extremadamente draconianas se han beneficiado masivamente de dicha inmigración. Mientras la extrema derecha aumenta su retórica contra los inmigrantes, son ellos los que en realidad han ayudado a esos países a lograr el éxito en la Copa Mundial. Alemania, por ejemplo: sin Mesut Ozil –hijo de un trabajador turco– cuyo maravilloso disparo contra Ghana aupó a Alemania a la segunda vuelta, los alemanes no sólo sería claramente menos imaginativos, sino que habrían estado hace tiempo de vuelta en Alemania tomando hefeweizen [cerveza de trigo, N. del. T.] y viendo el resto del torneo en la televisión. Cacau, nacido en Brasil, ha inyectado energía al ataque alemán después de obtener la ciudadanía la primavera pasada. Su impresionante compañero Miroslav Klose nació en Polonia, como Lukas Podolski, y ambos fueron estrellas en la campaña de la Copa Mundial de Alemania en 2006.



En Suiza, cuyo principal partido político, la Union Démocratique du Centre, ha impulsado la política contra los inmigrantes y trató de ilegalizar la construcción de minaretes, Gelson Fernandes, nacido en Cabo Verde, marcó el gol del triunfo contra el poderoso equipo español mientras Blaise Nfuko, nacido en el Congo, ha asegurado una presencia permanente y atlética en la delantera. ¿Y dónde estaría Portugal sin su hábil trío de Pepe, el centrocampista, el delantero Liedson y el robusto mediocampista Deco cuyo juego fue esencial en la calificación de Portugal para Sudáfrica? A pesar de los lamentos racistas en Arizona, el equipo de EE.UU. también se ha beneficiado de la inmigración.



Los padres de Jozy Altidore –quien fue vital para el éxito de EE.UU. en este Mundial– emigraron de Haití. Altidore lleva regularmente una muñequera con una bandera haitiana para reconocer su herencia; por cierto, la muñequera también tiene una bandera de EE.UU.



Semejantes éxitos de los inmigrantes en el escenario de la Copa Mundial han provocado una ola de doble pensamiento orwelliano cuando los hipernacionalistas aficionados al fútbol tienen simultáneamente dos ideas contradictorias en sus cráneos. Con las venas del cuello hinchadas mientras vitorean al equipo de su país, esos fanáticos destilan xenofobia durante el día y se ponen los colores del equipo nacional de noche.



Pero los reaccionarios y conservadores europeos no son los únicos que sufren de doble pensamiento. Yo también sufro, aunque en un sentido diferente. Me doy cuenta de que la FIFA está estafando a Sudáfrica cuando los beneficios récord salen del país y se prioriza la extravagante construcción de estadios sobre las necesidades básicas de la ciudadanía. La FIFA y sus promotores han recitado de memoria el tema de costumbre, la charlatanería de la filtración de riqueza utilizada para racionalizar todas las extravagancias del deporte internacional. También existe la sucia práctica de los patrocinadores corporativos que imponen su posición comercial privilegiada, persiguiendo a los oportunistas del marketing como si fueran despreciables asesinos. En conjunto es una tarjeta roja abominable y apoyo pleno a los disidentes que marchan contra estas graves injusticias.



Y a pesar de todo no puedo dejar de sumergirme enteramente en los vaivenes de esta Copa del Mundo. Evidentemente amo el fútbol, pero también creo que los futbolistas tienen potencial para presionarnos colectivamente hacia una sociedad más justa. Terry Eagleton escribió recientemente: “en estos días, para la mayoría el fútbol es el opio del pueblo, o su cocaína, o su crack”. La clave sutil de este párrafo es “la mayoría”.



Didier Drogba, calidad socialDe hecho, muchos futbolistas han decidido nadar contra la corriente en medio de este clima social, involucrándose en distintas labores de trabajo benéfico. Dirk Kuyt, de Holanda, dirige una fundación que mejora las posibilidades deportivas de los discapacitados. Joseph Yobo, de Nigeria, ha hecho un trabajo importante de mejora social con jóvenes en el Delta del Níger, distribuyendo más de 300 becas de estudios. Otro Super Eagle de Nigeria, Nwanko Kanu, dirige una fundación para personas con problemas cardíacos.



Pero el trabajo de caridad no es lo mismo que adoptar una enérgica posición pública sobre temas controvertidos como la inmigración o a la guerra, por no hablar del activismo por la justicia social. Debido a la naturaleza híper-comercializada del fútbol, los jugadores no quieren molestar a los patrocinadores (existentes o potenciales), exasperar a los dueños y administradores de los equipos o atraer la malevolencia de unos fanáticos que les gritan que lo que tienen que hacer es callar y jugar. Tiene más sentido seguir el camino de David Beckham y convertirse en un atleta polisémico, para todos los usos, a quien los espectadores puedan interpretar de cualquier manera.



Pero no puedo abandonar la naciente esperanza de que los futbolistas puedan decir lo que piensan. Puede que estéis murmurando en vuestro interior que las probabilidades de que esto suceda son tan grandes como que el entrenador francés Raymond Domenech sea nombrado Director Técnico del Año de la Copa Mundial. Pero los jugadores han ido más allá del trabajo benéfico, como Didier Drogba, que emplea su capacidad futbolística como plataforma para ayudar a reconciliar facciones políticas en la Costa de Marfil.



Y el cronista deportivo Dave Zirin tiene razón: “El deporte es, a fin de cuentas, como un martillo. Y un martillo se puede usar para darle a alguien en la cabeza o para construir algo hermoso. Depende de cómo se utilice”. En estos últimos días de la Copa del Mundo, me entusiasmará la mezcla deleitable de trabajo en equipo, pericia individual y arte que sólo el fútbol puede suministrar. Pero también espero que un futbolista conocido llegue a blandir su martillo sociopolítico para construir algo más grande que él mismo y ciertamente más grande que el Trofeo de la Copa del Mundo de la FIFA.


*Ex futbolista, representó al equipo olímpico de EE.UU. en partidos internacionales. Profesor asociado de ciencias políticas en Pacific University en Forest Grove, Oregón.

jueves, 1 de julio de 2010

200 años de periodismo. De La Gaceta a la ley de medios

Por: Eduardo Blaustein eblaustein@miradasalsur.com  - http://sur.elargentino.com/notas/200-anos-de-periodismo-de-la-gaceta-la-ley-de-medios

Si en 1810 la Revolución de Mayo se dio, entre otros factores, como batalla contra el monopolio comercial español, doscientos años después la disputa antimonopólica es otra. Volvieron también los lenguajes jacobinos, en un curioso giro de la Historia. Hitos, continuidades y rupturas en dos siglos de periodismo argentino: del Facundo de Sarmiento a Arlt, de Walsh a la dictadura, y de allí a la blogósfera. Paradoja bicentenaria, con algo de forzada: si el nacimiento de La Gaceta en el Año 10 tuvo mucho que ver con el proceso de una prensa europea nacida como “tribuna de doctrina” de las burguesías en ascenso –disparador retomado en la fundación del diario La Nación–, el jacobinismo que latía en los viejos escritos de Mariano Moreno está de regreso, con otros modos. Sucede doscientos años de periodismo después, en un escenario de polarizaciones y trincherismo. Contra buena parte de las virtudes que se adjudica la moderna prensa libre –objetividad, neutralidades, reproducción fiel de la realidad, defensa de los intereses ciudadanos– hoy se verifica un curioso giro de la historia construido, según de qué actor se trate, entre destemplanzas, manipulaciones, dicotomías feroces y un mínimo envoltorio de corrección política diseñado para enmascarar los intereses que se defienden.


La historia argentina en términos de publicaciones, periodismo, periodistas e industrias culturales es riquísima y da para el regocijo. Tiras de nombres posibles: Moreno, la generación del ’37, Alberdi y el joven Sarmiento, ese librazo de nuevo periodismo que es el Facundo, así como lo es Una excursión a los indios ranqueles de Mansilla. El Mosquito y la vieja Caras y Caretas. Las publicaciones anarquistas o las de las colectividades inmigrantes. Y Arlt y Crítica y González Tuñón y el Horacio Quiroga que colaboraba en La Nación (como José Martí, desde el Norte). Y más adelante Scalabrini, Jauretche, Selser. Todo Walsh y el diario de la CGT de los Argentinos. Y las plumas admirables de La Opinión, Enrique Raab entre tantas. La ardua búsqueda de un periodismo a la vez masivo y revolucionario en Noticias. Para hacer stop en los ’70: el espanto de la prensa en dictadura.

Pioneros. Los nombres tienen su peso pero acaso importen más los contextos históricos y culturales. Los señalaron bien Aníbal Ford y Eduardo Romano cuando hablaban del proceso alfabetizador e integrador de un potente sistema educativo público como generador de públicos preparados, ávidos de lecturas. Argentina fue siempre pionera primero en el desarrollo de sus industrias periodísticas, luego radiales, luego televisivas, finalmente en términos de penetración del cable (por años tuvimos mayor desarrollo que varios países europeos) y del uso de internet.

Si se trata de los viejos años del periodismo escrito, todavía en los ’70 nuestro país duplicaba el promedio de consumo de diarios y revistas en América Latina (182 diarios por cada mil personas, contra los 80 por mil de la región). Llegaron más tarde crisis, retrocesos, transformaciones culturales y un ciclo de decadencia: la circulación de diarios bajó un 40% entre los ’70 y el ’90. De 2 millones (1970) a 1,2 millones de ejemplares (1990), pese a un crecimiento poblacional del 50 por ciento.

Octavio Gettino señaló en sus trabajos sobre industrias culturales que en los momentos históricos en los que se registró una mejor distribución de la riqueza se dieron los picos máximos de producción y venta de publicaciones, libros o películas. Si se trata de la circulación de revistas, en 1973 se tiraban 233,8 millones anuales de ejemplares, con 337 títulos. En los ’40 y ’50 sólo las revistas de historietas editaban unos 70 títulos y 1,3 millones de ejemplares. Hacia 1973 la editorial de Dante Quinterno tiraba 800 mil ejemplares. En 1991, ese mismo rubro de las historietas se había reducido a 270 mil ejemplares. Más de un semanario de interés general hoy puede darse por satisfechísimo si vende 20, 30, 40 mil ejemplares.

La explosión de la televisión, el cable e internet explican sólo parcialmente el descenso. La era mutó; asistimos al estallido de lo visual, los tiempos de los “cansancios de lectura”, la imposición de textos cortos virando a tontos, las lógicas del infoentretenimiento, el impacto, el vértigo sin sentido, la banalización, la espectacularización. Si es por la función de industrializar el miedo, habrá que transigir: tal como lo describe la historiadora Lila Caimari en su libro La ciudad y el crimen. Delito y vida cotidiana en Buenos Aires 1880-1940 (Sudamericana), el género policial y esa lógica inherente de temor al Otro ya gozaban de buena salud en el siglo XIX. En los años ’30 la crónica roja circulaba en diarios leídos por capas ilustradas de la población. Otros añadirían con razón que, a su vez, esos géneros no fueron más que el reciclado de viejas tradiciones populares.

Otro mundo, otras voces. Lo demás es sabido: la era de la concentración mediática en todo el mundo y en nuestro país también. Las inequidades –el recorte de derechos– en el acceso a la producción y la emisión de información y cultura. El gran cambio que se está registrando no sólo en Argentina sino en buena parte de nuestro continente, en términos de crítica de la comunicación establecida y construcción de otros sistemas posibles, habla de una vitalidad social perdida en los países centrales. En todo el mundo se habla de fenómenos de degradación, pérdida de credibilidad y de penetración de los medios que no obedecen sólo a nuevas pautas de consumo ni a la aparición de las nuevas tecnologías. Termine como termine el proceso de judicialización de la Ley de Servicios Audiovisuales, el debate generalizado ya forma parte de un proceso cultural fantástico, de una nueva conciencia social y de nuevos modos de resistencia cultural.

miércoles, 30 de junio de 2010

Argentina: escuelas públicas y subsidios a las escuelas privadas (I)

Elena Luz González Bazán.* - http://www.surysur.net/?q=node/14008

Los que crean que la educación y la capacitación es un gasto, no saben lo que cuesta la ignorancia. La Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en su capítulo tercero, desde los artículos 23 al 25 hace los planteos esenciales sobre el tema educativo. En este articulado sostienen el reconocimiento y afirman se debe garantizar la educación en los principios de la libertad, ética, solidaridad para lograr un desarrollo integral.




A su vez, afirma la igualdad de oportunidades y posibilidades para el acceso, permanencia, reinserción y egreso del educando. Luego en este primer artículo referido a la educación plantea la igualdad en la calidad educativa.



Bien, por otro lado, un "paneo" de la situación de escolarización inicial, primaria, media, terciaria y universitaria demuestran otros aspectos no menores para pensar en la hecatombe actual de los edificios escolares de nuestra ciudad y las graves consecuencias que ha acarreado en materia de seguridad, calidad educativa, igualdad de oportunidades, construcciones adecuadas y todo lo que plantea el articulado de la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires de 1996.



Asimismo, la Constitución, garantiza 10 años de escolaridad obligatoria, también diseña que pueden los particulares llevar adelante emprendimientos privados de educación y —hay que decirlo— en su gran mayoría reciben subsidios del Estado comunal, garantizado por la constitución cuando sostiene en el segundo parágrafo del artículo 25: La Ciudad puede realizar aportes al funcionamiento de establecimientos privados de enseñanza, de acuerdo con los criterios que fije la ley, dando prioridad a las instituciones que reciban a los alumnos de menores recursos.



A partir de la década de 1991/2000, con Susana Decibe como ministra de Educación y Daniel Filmus como asesor, los técnicos educativos reformulan el concepto de educación pública, que pasa a ser el sistema en su totalidad. En el nuevo discurso se menciona a todas las escuelas como iguales, sólo que algunas son de gestión estatal y otras de gestión privada.



Bajo esta máscara se busca encubrir que se trata de dos conceptos opuestos: lo público es lo de todos, mientras que lo privado pertenece sólo a algunos, así lo afirma Santiago Duarte, docente del Distrito Escolar 8º.



Por otro lado, las estadísticas del 2005 arrojan la siguiente realidad en cuanto a Instituciones Educativas y matriculación de alumnos.



Enseñanza Privada



Una realidad educacional incontrastable: la mayoría de estos establecimientos privados reciben subvención del gobierno porteño, una cantidad importante de estos establecimientos privados tienen los tres primeros niveles de enseñanza, tanto inicial, primario y medio. Si observamos las cifras arrojadas en el 2005: hay 483 jardines o enseñanza inicial, hasta cinco años o preescolar.



El primario entre 6 y 13 años, de acuerdo a la fecha de ingreso, si es antes del 30 de junio o posterior, son 441 establecimientos y los de enseñanza media 340. De esta totalidad: 405 establecimientos con estos niveles de enseñanza reciben el auxilio de los gobiernos capitalinos en forma de subsidio a la educación.



Baste mirar la realidad educacional y el contexto de este entramado, podemos verificar que la disparidad entre lo privado y estatal es contundente: por lo injusto, por la falta de políticas ciertas de auxilio para todos los sectores sociales, estamos hablando de los niños, niñas y adolescentes. Debiendo realizar una pregunta ineludible: ¿Cuáles son los sectores económicos que estamos privilegiando con la educación privada?



Porque no podemos dejar de resaltar que tenemos en estado calamitoso y semi desastroso a una parte importante de los colegios y escuelas estatales. Donde sus alumnos, acompañados por maestros y padres debieron salir a la palestra, durante los años 2007, 2008 y 2009, para reclamar mejoras, calefacción, agua corriente, sanitarios en condiciones, cables de alto voltaje sin protección, techos en condiciones paupérrimas, a punto de caerse… y así de seguido.



En estos establecimientos estatales, las cooperadoras juegan un papel esencial, por décadas han sido los bomberos voluntarios para solucionar problemas en los edificios, falta de materiales escolares y las diversas jornadas que realizan y seguirán realizando para lograr fondos que dejen en mejores condiciones los establecimientos educativos.



De la misma manera, las escuelas estatales se han transformado en estos largos años en el espacio de asistencia alimentaria, esencialmente en las barriadas más pobres de nuestra ciudad: básicamente en el sur de la ciudad y las escuelas y colegios de diferentes barrios porteños que reciben a los alumnos de más bajos ingresos.



Ya en otros informes hemos detallado ampliamente sobre la explosión demográfica de nuevos asentamientos, villas, casas tomadas en distintos puntos del país, esta problemática se ve directamente reflejada en el aula.



La realidad de escuelas públicas y subvenciones a privados: una política de Estado



Cuando aún era presidente en ejercicio, Néstor Kirchner, marzo del 2007, la cantidad de colegios privados que recibían subvención en la Ciudad de Buenos Aires eran los 405 arriba expuesto y más de 5.000 en la provincia de Buenos Aires, anunciaba aumentos salariales para los docentes, pero también se aumentaban las cuotas de los colegios privados. En la ciudad, mediante el decreto 198 del 2005, el entonces jefe de gobierno porteño, Aníbal Ibarra incluía a la Capital Federal entre los distritos beneficiados.



Es importante aclarar los subsidios que son en todo el país, por esto que más arriba explica el maestro Santiago Duarte y que es parte de una política educativa afirmada desde los tiempos menemistas y para nada desandado por estos gobiernos posteriores, incluido el actual nacional y en nuestro caso los gobiernos porteños.



Volviendo a marzo del 2007, la Dirección General de Educación de Gestión Privada de la Ciudad de Buenos Aires dio vía libre a la medida con una disposición que establecía aumentos retroactivos en los 405 colegios porteños que reciben subvención por parte del Estado. En estos establecimientos, el incremento no podía superar el 9,8 por ciento.



Por su lado, Perpetuo Lentijo, presidente de la Asociación de Entidades Educativas Privadas Argentinas (Adeepra), la cámara que nuclea a los colegios de enseñanza privada, explicaba que en los establecimientos subvencionados, tendrían esos aumentos, pero referente a los que no reciben subsidios sostenía: “Nos quedamos cortos con ese tope de 9,8%. Durante el año, por el 2007, vamos a tener que retocar ese porcentaje”, explicaba Lentijo quien de esta manera anunciaba mayores aumentos, algo así como un 27 por ciento.



En tiempos del presidente Carlos Menem, éste, firma el decreto 2.417, el cual establecía que no se podían aumentar las cuotas durante el año si se invocaba causas como “aumento del costo de vida” o “suba de insumos”. Lo único que justifica este aumento es un incremento en el sueldo de los docentes, se decía. En esta norma se fijaba un tope hasta el 50 por ciento de aumento. Este sería el límite que tendrían los colegios no subvencionados para acrecentar sus cuotas. En estos años, los padres de los colegios privados han puesto el grito en cielo por el aumento de las cuotas.



Fuentes: Revista 23, Tras cartón, INDEC, Portal gobierno porteño, fuentes propias.


* Docente.

domingo, 27 de junio de 2010

Un año del golpe en Honduras

Raúl Zibechi - http://alainet.org/active/39097

El recurso del método

La creciente militarización de la política de Estados Unidos hacia la región está lejos de ser un mal paso: es la consecuencia del desgaste de las estrategias que le garantizaron al hegemonía en América Latina, sumadas al declive de su papel de superpotencia y la aparición de serios competidores. En adelante, se repetirán situaciones similares a la de Honduras.




“Obama es una continuación de Bush, igual que Bush fue una continuación de Clinton, y Clinton de Bush padre. La política exterior y la política imperial estadounidense es continua”, asegura Tariq Ali (Diagonal, 20-VI-10). El intelectual paquistaní estima que existe una decadencia económica de la superpotencia, pero en absoluto política ya que cuenta con la mayor fuerza militar del mundo. “Usa su fuerza militar para dominar el mundo y nadie en este momento puede amenazar ese poderío militar. No hay ninguna evidencia que demuestre que están perdiendo su poder”, concluye.



“América Latina ha dejado de ser el patio trasero. Hemos remodelado la casa, así que el patio está muy revaluado”, dijo Marco Aurelio García, Asesor Especial en Política Externa del presidente Luiz Inacio Lula da Silva en un reciente encuentro convocado por la Fundación Friedrich Ebert en Berlín (Deutsche Welle, 18-VI-10). Al contrario que Ali, García enfatiza el cambio por encima de las continuidades: “Doce países de la región con quienes compartimos fronteras y otros con los que tenemos una amistad sin límites creen, al igual que nosotros, que hay un gran cambio en la situación mundial. Nos encontramos ahora ante un mundo multipolar y queremos tener un lugar en él”.



Una parte importante de las izquierdas y el progresismo piensan como el historiador paquistaní. Otros tantos lo hacen como los dirigentes brasileños. Análisis contradictorios, pero anclados en la misma realidad, tan contradictoria que, en un período de cambios y turbulencias profundas, tiende a generar visiones contrapuestas incluso entre quienes comparten objetivos comunes.





Definir prioridades



A la hora de considerar las relaciones entre Estados Unidos y América Latina esas divergencias de análisis son también importantes. Una de las preguntas clave es qué tan importante es el continente latinoamericano en la estrategia de Washington. Muchos análisis sostienen que la superpotencia está tan ocupada por las dos guerras que libra (Irak y Afganistán), con su ofensiva contra Irán y por las crecientes desavenencias entre sus aliados, que no tiene capacidad para ocuparse del “patio trasero”.



Entre los graves problemas globales que enfrenta, tal vez el más acuciante sea Afganistán. Un conflicto que no puede ganar y que amenaza con quebrar el frente interno. Un buen ejemplo es lo sucedido estos días con el general Stanley McChrystal, el máximo responsable militar de Estados Unidos y de la OTAN en Afganistán, quien fue forzado a renunciar por un artículo en la revista Rolling Stone donde vierte fuertes críticas al gobierno de Barack Obama. El artículo “retrata la división entre el estamento militar y los asesores de Obama, en un momento delicado para el Pentágono, que se enfrenta a las críticas por su estrategia para intentar dar un giro a la guerra afgana” (El País, 22-VI-10). Otros análisis, como el del portal estratégico europeo Dedefensa, estiman que un año después de haber sido nombrado McChrystal para darle un giro victorioso al conflicto, “la guerra en Afganistán se desintegra, se disuelve” (Dedefensa.com, 21-VI-10).



Los problemas internos que debe afrontar Obama son igualmente graves. El último informe del Laboratorio Europeo de Anticipación Política (LEAP), vuelve a insistir en que la crisis sistémica ha ingresado en la fase de “desarticulación geopolítica” que conduce a la “descomposición estratégica, financiera, económica y social” del sistema internacional (Leap 2020, 17-VI-10). El país más afectado es Estados Unidos que fracasó al pretender establecer, hace sólo un año, al G-20 como el núcleo de una nueva gobernanza global en sustitución del alicaído G-7, lo que torna imposible que los principales países puedan afrontar de modo unificado las dificultades presentes. Prueba de ello son las posiciones en liza frente a Irán.



Entre los graves problemas internos, figuran: el derrame de petróleo en el Golfo de México, que no pocos estiman tiene un impacto similar a los atentados del 11 de setiembre, niveles de desocupación que en algunas ciudades bordean el 40 por ciento, déficits que amenazan a las administraciones locales y estados con la cesación de pagos, deuda pública equivalente al 90 por ciento del PIB, recortes de servicios sociales y otras situaciones inimaginables años atrás. “En muchas localidades no hay recolección frecuente de la basura domiciliaria (o se debe pagar más impuestos), perdieron un día de distribución del correo, disminuyó la protección por falta de policías, deben hacer colas interminables frente a las ventanillas de las administraciones como consecuencia del despido de funcionarios, sus hijos tienen menos profesores en las escueles, las que a su vez brindan menos servicios”, señala el informe. Washington y todo el mundo desarrollado están abocados a una era de austeridad.



Frente a este panorama, preguntarse por el papel de América Latina en la estrategia estadounidense no es ocioso. Empezando por México, país que viene perdiendo la guerra contra el narcotráfico, como lo vienen reconociendo sus autoridades. Convivir con un “Estado fallido”, o en riesgo de serlo, no es un panorama nada auspicioso. En la región se pueden establecer dos tendencias convergentes: una creciente militarización y polarización como forma de estirar el declive de Estados Unidos. Por diversas razones, que van más allá del declive económico y de los problemas internos, la tendencia a buscar atajos por la vía autoritaria cobra cada vez mayor fuerza bajo la presidencia de Obama, lo que la acerca a la de su predecesor.





Un año después de Honduras



A principios de junio el presidente Evo Morales aseguró que la agencia para el desarrollo de los Estados Unidos (USAID) está intentando desestabilizar su gobierno. En concreto, la acusó de infiltrarse en los movimientos sociales para provocar conflictos y amenazó con expulsarla del país (Bolpress, 16-VI-10). La periodista Eva Golinger cita un artículo de The Washington Post firmado por Jeremy Scahill, que asegura que la administración de Obama acaba de autorizar la expansión de la guerra secreta contra los enemigos de Washington: las “fuerzas especiales” se despliegan ahora en 75 países, cuando un año atrás estaban en 60, con 13 mil efectivos civiles y militares (Rebelión, 6-VI-10).



Según el mencionado artículo, un alto militar del Pentágono aseguró que Obama está permitiendo muchas acciones y operaciones que no fueron autorizadas durante el gobierno de George W Bush y que ahora hay más facilidades para las operaciones encubiertas. Este tipo de operaciones forma parte de la nueva Estrategia de Seguridad Nacional (NSS por sus siglas en inglés) difundida por Obama el 27 de mayo. Este año la única novedad que incluye es la apelación al buen estado de la economía para mantener la supremacía global. Por lo demás, el texto de 52 páginas repite el compromiso del actual presidente de mantener la superioridad militar como punto neurálgico de su política exterior, lo que suena contradictorio con los intentos por recuperar la economía ya que supone aumentar el ya abultado presupuesto militar (Jim Lobe en IPS, 28-VI-10).



Estados Unidos enfrenta por lo menos cuatro problemas en la región para los cuales no tienen soluciones a corto plazo: el ascenso de Brasil al rango de potencia global, a caballo de la integración regional; la creciente presencia de China que teje acuerdos estratégicos con países clave; el fracaso de la guerra contra las drogas y la falta de alternativas; y la debilidad de su economía que ya no es gancho para tejer alianzas. En suma, los pilares sobre los que había descansado la hegemonía en la región están seriamente afectados.



“Después de la invasión china de África ahora es el turno de América Latina”, afirma O Estado de Sao Paulo (20-VI-10) a la hora de explicar que el país asiático ha prestado 50.000 millones de dólares a países de la región en el último año y medio. China está tejiendo acuerdos estratégicos dando prioridad a Brasil y Argentina que se han convertido en “importantes puntos de apoyo en América Latina” (Diario del Pueblo, 10-VI-10). Los mandos militares del Pentágono observan con gran preocupación la presencia china en el continente, pero no atinan a diseñar propuestas para contenerla.



Un informe del Servicio de Investigación del Congreso de los Estados Unidos sobre la política de Washington hacia las drogas y la región desde la década de 1970, establece que “en América Latina y el Caribe el narcotráfico ya reemplazó a los conflictos políticos y regionales como la mayor fuente de violencia” (Contralínea, 20-VI-10). El fracaso del combate a las drogas tiene cifras impresionantes: entre 2003 y 2008 las muertes violentas en la región atribuidas al narcotráfico escalaron de 19,9 personas cada mil habitantes a 32,6. De ahí que, en opinión de los autores del trabajo publicado el 30 de abril, se pueden detectar “señales de un distanciamiento entre varios países de la región con la postura estadounidense y apelan a una revaluación de sus políticas antidrogas”.





Socios o competidores



El tercer problema es Brasil. Immanuel Wallerstein cree que Estados Unidos interpreta de modo equivocado la política exterior brasileña. En base a un informe del Consejo de Relaciones Exteriores, cercano a la Casa Blanca, sostiene que Washington le propone a Brasil “asociarse” en temas como el etanol para construir una relación más sólida. Para Estados Unidos, “Brasil debería actuar como una potencia regional, es decir, como un poder subimperial” para estabilizar la región, lo que supone incorporarse como “socio menor” de la superpotencia (La Jornada, 1-II-10). En los últimos meses se hizo evidente que Brasil va a jugar un papel independiente en el escenario global y, sobre todo, en el regional, ya que Brasilia no quiere actuar como disciplinador de la región sino como portavoz de un área cada vez más integrada y autónoma respecto al Norte.



El fracaso de su política antidrogas (que le permitió establecer sólidos lazos con las derechas de la región), el atractivo económico de China en desmedro de Washington y el ascenso de Brasil como potencia, dejaron a Estados Unidos sin política. O sea, sin la capacidad de mantener su hegemonía. De ahí que haya un progresivo deslizamiento hacia la dominación, o sea, coerción sin consentimiento. En los hechos, la administración demócrata está “fortaleciendo su fuerza nuclear y reforzándose con una devastadora ‘disuasión convencional’” (Asia Times, 5-V-10), escribe Jack A Smith, ex editor del semanario estadounidense The Guardian al comentar las últimas decisiones en materia de defensa.



Según el analista, ya no le es suficiente al Pentágono con la vieja doctrina de combatir dos guerras simultáneas, sino que está empeñado en hacer frente a “una multiplicidad de amenazas, incluyendo dos agresiones de Estados-nación”. Estima que “el Pentágono tiene previsto participar en numerosas guerras futuras interrumpidas por breves períodos de paz mientras se prepara para la próxima guerra”. El secretario de Defensa, Robert Gates, tiene muy presente el declive de su país, como toda la clase dirigente. Por eso un año atrás escribió en la prestigiosa revista Foreign Affairs (enero-febrero de 2009), que Estados Unidos tiene que invertir en todo aquello “que le garantice la dominación”. En buen romance, superioridad militar aplastante, no sólo nuclear, sino ahora sobre todo convencional.



Un año después del golpe de Estado en Honduras, cabe preguntarse si fue un hecho aislado o si inaugura un nuevo período, caracterizado por intervenciones blandas de Washington, a través de respetables instituciones o de agencias internacionales. Lo sucedido este año debería servir de ayudamemoria: masiva invasión militar en Haití; once nuevas bases militares a disposición en Colombia y Panamá; creciente intervención subvencionando una amplia gama de organizaciones, desde movimientos sociales hasta fundaciones y medios de comunicación. Existe una potente tendencia a la polarización, con tres focos decisivos: la región andina, el Caribe y la Amazonia.



En cada una de ellas existen diversos intereses que pasan siempre por el control de los hidrocarburos, los minerales y la biodiversidad. Pero hay algo más en juego, algo más decisivo aún que las riquezas materiales, que es la llave para conquistarlas: el control, a secas. La estrategia imperial pasa, por sobre todo, por impedir que surjan competidores del tipo que sean, estatales o no estatales. La lección de México debería hacernos reflexionar: en su empeño por no perder el control, las clases dominantes están a punto de destruir el Estado. Mantener el control en todo el mundo, o sea el poder de decisión, cuando se atraviesan graves dificultades y se está perdiendo el carácter de potencia hegemónica, es tarea harto compleja y tal vez imposible en el largo plazo. El recurso al autoritarismo es, en la mentalidad hegemónica en Estados Unidos, la mejor forma de estirar la agonía. Es cierto que la presidencia guerrista de George W. Bush no hizo más que acelerar el declive, pero una característica otoñal de la vida es la incapacidad de aprender, incluso de lo vivido en carne propia.



- Raúl Zibechi, periodista uruguayo, es docente e investigador en la Multiversidad Franciscana de América Latina, y asesor de varios colectivos sociales.

viernes, 25 de junio de 2010

En Sudáfrica ¿sufre el negocio del fútbol?

Aram Aharonian -  http://alainet.org/active/39112


Quienes disfrutamos y los que sufren con el fútbol, por igual, coinciden que este deporte-espectáculo es un fenómeno político y social que entre otras funciones opera como un mecanismo de identidad nacional. Tampoco hay dudas sobre el hecho de que el fútbol-espectáculo posibilita la manipulación de la sociedad en pos de afianzar el modelo político-económico y el status quo, disuadiendo el cambio social y, a la vez, abriendo las puertas a las enormes ganancias de pocas empresas trasnacionales.


Al fútbol se le considera el deporte más popular del mundo, ya que unos 300 millones de personas lo practican a lo largo y ancho del orbe, desde Corea del Norte hasta Estados Unidos, desde Palestina a la caribeña Turcos y Caicos.

Es entretenimiento, diversión y pasión, pero también es una actividad muy lucrativa tanto para las federaciones nacionales, para la Federación Internacional de fútbol Asociación (FIFA) y para las empresas trasnacionales, socias de esta institución en la organización de los torneos locales, regionales, intrarregionales, interregionales e, incluso, las copas mundiales.

Hace ya 24 años, cuando el Mundial e México, escribíamos una nota-ficción junto a Víctor Ego en la que especulábamos que quizá en el futuro los mundiales se jugarían entre los contratados por Nike contra los de Adidas, los de Coca Cola contra Gatorade… Ni tan lejos estábamos: Internacionales de Milán, campeón de Italia y de Europa, es supuestamente un equipo italiano donde generalmente no se alinea a ningún italiano.

Sin dudas, el fútbol tiene implicaciones políticas, sociales y culturales muy amplias, y dentro de esta teoría neoliberal de dejar todo librado al mercado, el Mundial sirve para que, a través de los medios cartelizados de comunicación, estas grandes empresas trasnacionales garanticen nuevos mercados para sus productos.

Hay jugadores que ganan más por ser “modelos” de estas empresas trasnacionales, que por su labor profesional. Las empresas pelean el mercado para que los mejores jugadores usen tal o cual calzado o ropa deportiva, se afeiten o no, tomen este refresco o la otra bebida energizante, usen este reloj, aquel automóvil.

Son los mejores referentes para el consumismo: Fulanito triunfó porque usó esta marca y tú también puedes (si usas la misma marca, claro).

Hay más selecciones nacionales (199) en la Federación Internacional que países reconocidos en las Naciones Unidas (186). La FIFA reconoce a Escocia, Gales, Irlanda del Norte y hasta ha admitido a Palestina.

Parafraseando al estratega prusiano Karl von Clausewitz, se podría concluir que “el fútbol es la continuación de la guerra con otros métodos”.

Y no sería la primera vez que este mecanismo de identidad nacional tenga derivaciones bélicas (o sirva de excusa para ello), como ocurriera en 1969 en la tragedia armada vivida por Honduras y El Salvador.

La crisis del capitalismo europeo
Por eso, ¿permitirá la FIFA y sus socios que un pequeño país –y, a la vez pequeño mercado- se apodere de la Copa del Mundo? ¿A quién le venderán, entonces, los cientos de millones de camisetas, de zapatillas, cervezas, refrescos, electrodométicos, automóviles, televisores, etcéteras, etcéteras… y hasta vuvuzelas? ¿Lo permitirán árbitros que muchas veces han inclinado la balanza en favor de los más poderosos? (Basta recordar la clasificación de Francia con el manotón de Thierry Henry)

La crisis capitalista en Europa trajo aparejada la debacle de los dos últimos finalistas del Mundial: Francia e Italia. También se fueron Grecia, Serbia y Dinamarca. De Inglaterra y Alemania sobrevivirá apenas uno hasta cuartos de final. Desaparecieron grandes mercados para colocar los productos y entre los africanos (presuntos mercados emergentes) apenas clasificó Ghana. Hay preocupación en la FIFA.

Quedan varios mercados emergentes de países subdesarrollados, como los latinoamericanos, que metieron a Brasil, Argentina, Uruguay, Chile, Paraguay y México entre los 16 mejores. Si es por mercados potenciales, Brasil, Argentina y México son los más rescatables, y, además, en los dos primeros la crisis del capitalismo ha sido contenida con medidas oportunas. Y, junto a ellos, aparecen los “outsiders” asiáticos, Japón y Corea del Sur.

En su desesperación por sobrevivir deportivamente, aquellos orgullosos equipos blancos europeos debieron abrir sus puertas a los inmigrantes e hijos de inmigrantes: Francia salió campeona del mundo con muchos jugadores nacidos o hijos de nativos de sus ex colonias. En la selección holandesa de los años 1980-90 había varios nacidos en Surinam, por ejemplo. Después de muchos años, hay negros, polacos y turcos jugando en la selección alemana (y hasta un brasileño), olvidando aquello de la raza aria… Aparecen brasileños incorporados a la selección portuguesa, un argentino en la italiana

En 1924, Uruguay, un país –entonces- de casi dos millones de habitantes, entró a puntapiés en la geografía mundial, al clasificarse Campeón Olímpico, hazaña que repitió cuatro años más tarde. Y en 1930, esos blancos, mulatos, zambos y negros de un “paisito” que casi se cae del mapa, que se divertían jugando al fútbol, fueron los primeros Campeones mundiales, proeza que repetirían en Brasil 20 años después.

Pero Uruguay no es el único ejemplo, aunque sí, quizá, el primero. Ahí estuvo Costa Rica con sus tres millones de habitantes llegando a cuartos de final en 1990, y la Bolivia aymara en la Copa estadounidense de 1994. O la presencia de Eslovenia, con apenas dos millones de habitantes, y Eslovaquia, con 5,4 millones, en el mundial de Sudáfrica. Eslovenia casi clasifica a octavos de final y Eslovaquia, parte de la antigua Checoslovaquia, lo logró y nada menos que ante Italia, el último campeón.

El fútbol debiera servir para integrar símbolos nacionales, como estilos, ritmo, movimientos, dinámica, que tengan que ver con la propia historia e idiosincrasia de los pueblos y las naciones. Decía el argentino Dante Panzeri que el fútbol es la dinámica de lo impensado. Claro, Panzeri se refería al deporte y a sus cultores, y no al espectáculo profesional –y el circo asociados- auspiciado por las grandes trasnacionales.

Pero cuando vemos hoy, en Sudáfrica, que las selecciones africanas, en su mayoría, son dirigidas por “mercenarios” entrenadores europeos, observamos cómo se les quiere amputar esa identidad en pos de un supuesto “juego moderno y competitivo”. Cuando se salen de los rígidos esquemas de entrenadores que vienen del frío, es cuando renace la alegría del juego africano, cuando se oyen de fondo los tambores de la selva, y no solo las vuvuzelas.

¿Se juega como se piensa? Esa es una buena pregunta. Porque lo que quedó demostrado en Sudáfrica es el aburguesamiento del profesional europeo, que parece haber perdido (salvo honrosísimas excepciones) la alegría de jugar, para calcular cada paso que da en la cancha y sus alrededores. Los han vuelto metrosexuales, modelos de otras mercancías (y no de su arte, que es el jugar al fútbol) y de consumismo, alejados de sus gentes, de su idiosincrasia,  su historia. Hoy se juega más de acuerdo a los cálculos que haga la federación de cada país y las ideas o esquemas que tenga el entrenador (y si es foráneo, peor).

El negocio
¿Quiénes manejan la FIFA? Hasta el 1974, fueron los europeos, pero era otra época más romántica del fútbol (obviamente dejando de lado los campeonatos mundiales ganados por Italia en plena dictadura de Mussolini). El brasileño Joao Havelange rompió esa hegemonía europea hasta que nuevamente la tomó el suizo Joseph Blatter, quien está a hora al frente de las decisiones del organismo.

Dicen que fue Havelange y su visión empresarial la que globalizó y el fútbol y lo convirtió en mercancía, generando ingresos millonarios para ciertos consorcios trasnacionales. En 1994 llevó al Mundial a un país donde el fútbol muy poco popular. Ahí hizo caso de las influencias de las empresas trasnacionales, asociadas ya a la FIFA en el negocio. Lo mismo pasó con las Olimpíadas, cuando Delta Airlines y Coca Cola lograron imponer la sede de Atlanta.

Y hoy llegaron a Sudáfrica, a África por primera vez., buscando nuevos mercados para los mismos productos, cuyas ventas bajaron sensiblemente en el último año en Europa y Estados Unidos, gracias a la crisis de modelo económico y político. En Sudáfrica, la mayoría negra se contagió de la fiebre mundialista, mientras los blancos estaban más interesados en el partido de rugby que jugaron los Sprinboks con Francia.

Obviamente, la FIFA olvidó a quienes generan al negocio, a las futbolistas, la mayoría de los cuales (exceptuando los pocos cientos de privilegiados) sufren situación de servilismo por parte de los clubes (e intermediarios) que trafican sus fichas y sus futuros.

La página web de la FIFA señala que las Copas del Mundo “generan ingresos sustanciales (…) a través de la venta de boletos, los derechos de transmisión, los patrocinadores y la mercancía alusiva.” También señalan que “los beneficios fluyen a los equipos finalistas, mientras que la FIFA retiene únicamente los fondos que necesita para financiar sus costos administrativos y las actividades centrales para el siguiente período de cuatro años.”

Suena demasiado altruista, ¿no?, sobre todo cuando se sabe que las ganancias de la institución superaron los 400 millones de dólares en el mundial anterior, cifra exponencialmente superior a los gastos administrativos que pueda tener.

¿Habrá posibilidad para que un país “chico” se alce con la Copa? Claro, sería un muy mal negocio para los mercaderes, pero ¡que bueno sería para el fútbol!


jueves, 24 de junio de 2010

La deuda y los que la contrajeron

Por Raúl Dellatorre - http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/subnotas/148184-47577-2010-06-24.html

La financiación a gobiernos de países en desarrollo funcionó, durante más de dos décadas, al revés de lo que sucede con los créditos en el sector privado: solía ser mejor negocio para el prestamista que el deudor no pagara en vez de que cumpliera prolijamente sus compromisos. Así sucedió sistemáticamente con los préstamos del FMI: buscaban condicionar con sus créditos al país deudor a que aceptara sus “recetas económicas”, cumpliendo así su papel de custodio del modelo y de su aplicación en países dependientes. También resultaba un gran negocio para los bancos acreedores seguir cobrando intereses altísimos en forma permanente mientras la deuda de capital seguía vigente: era como un reaseguro de renta permanente. Más negocio aún era para los bancos y entes colocadores de deuda, que cobraban millonarias comisiones por cada refinanciación de vencimientos. Y cuanto más frecuente fueran estas reestructuraciones de deuda, mejor para ellos.




Este “sistema” de saqueo funcionó casi sin fisuras durante dos décadas en Argentina, entre 1980 y el 2001, pero desembocó en el default de diciembre de este último año. Tan inevitable como previsible. Ayer, el ministro Boudou tuvo una frase referida a esa época que viene a cuento de lo que aquí se relata: “El blindaje, el megacanje, los créditos stand by involucraban compromisos incumplibles, acuerdos de mala fe, porque se sabía que no iban a pagarse”. El blindaje es una operación de noviembre/diciembre de 2000: fue una refinanciación de deuda por 38 mil millones con aportes del FMI, el BID, el Banco Mundial, bancos privados y el gobierno de España. Apenas seis meses después (mayo/junio de 2001) fue necesario recurrir al Megacanje para volver a bicicletear pagos. Vencimientos por 12.799 millones de dólares de corto plazo que se canjearon por compromisos a vencer entre 2006 y 2031 por 55.405 millones de dólares (más de cuatro veces la cifra original), aparte de las comisiones que cobraron David Mulford y otros amigos del entonces ministro Domingo Cavallo.



En estas últimas operaciones el presidente era Fernando de la Rúa. Los acuerdos stand by de la década del ’90, que comprometían revisiones trimestrales del FMI sobre las cuentas y políticas públicas, con poder de veto, se firmaron bajo el gobierno de Menem, que además carga con la responsabilidad por el Plan Brady, que le agregó otra montaña de deuda al país a cambio de nada.



Gobiernos, ambos, tan legítimos como los que tienen hoy Alemania o Estados Unidos, cuyas autoridades defienden a los ejecutores de esta política depredadora a través del mercado financiero internacional hasta nuestros días (aunque ahora sobre países periféricos europeos, no sobre los nuestros). Timothy Geithner, actual secretario del Tesoro de Barack Obama, era en octubre de 2000 el subsecretario de Asuntos Internacionales del gobierno de Bush que monitoreó y dio el visto bueno al Blindaje en beneficio (¿?) de la Argentina. Era su especialidad: los “paquetes de salvataje” para países emergentes, artesanías para las que contaba con la colaboración de Robert Rubin y Larry Summers, dos ex secretarios del Tesoro de Bill Clinton.



Políticos que acompañaron o alentaron aquellos gobiernos de la Argentina hoy condenan el pago de una deuda que califican de “ilegítima”. Una calificación con la que se pretende deslegitimar al actual gobierno, pero sin deslegitimar a los que aplicaron aquellas refinanciaciones nefastas.



Afuera del canje quedaron los “fondos buitre”, con bonos por 4500 millones de dólares de la “vieja” o “defaulteada” deuda, más 1730 millones de “inversores minoristas” dispersos. Los fondos buitre habían apostado a llegar a una negociación con un país de rodillas, sometido al riesgo de embargo de cualquier bien que asomara fuera de sus fronteras. No resultó así, y ahora seguirán su pelea en tribunales neoyorquinos. En su caso, sí se comprende el disgusto con la amplia aceptación del canje.

miércoles, 23 de junio de 2010

¿Por qué nadie quiere ser de derecha?

Por Ricardo Forster - http://www.elargentino.com/nota-95805-Por-que-nadie-quiere-ser-de-derecha.html


Ricardo Forster ¿Resulta acaso sorprendente que la derecha argentina sienta una cierta inquietud existencial al ser identificada precisamente como de derecha? ¿Está sucediendo un reacomodamiento de piezas en el mapa político de la oposición que parece haber descubierto que la defensa cerrada de las corporaciones económico-mediáticas ya no rinde el rédito esperado? ¿Resulta, tal vez, impresentable quedar pegado a las vicisitudes del inefable Mauricio Macri, que su antiguo socio y colega de herencias busca separarse ostentosamente acusándolo de “derechoso”? Extrañas parábolas que fueron iniciadas, no por De Narváez o algún otro de los peronistas disidentes, sino por Ricardo Alfonsín que, lanzado a la carrera presidencial, percibió que el pequeño Cobos se estaba volviendo cada vez más pequeño y que hacía falta regresar al ilusionismo socialdemócrata para volver a la mística extraviada de los orígenes.



El hijo del padre, hábil a la hora de captar el cambio de atmósfera, hace borrón y cuenta nueva respecto de sus votos nada progresistas en los últimos dos años (votó en contra de todas las leyes de avanzada que se presentaron en el Congreso de la Nación, desde la reestatización jubilatoria, la recuperación de Aerolíneas Argentinas hasta llegar, por supuesto y como gran coronación, al rechazo de la ley de servicios audiovisuales); su objetivo, ahora, es construir su candidatura desde la perspectiva de alguien que se presenta como un genuino exponente del progresismo argentino (de ese que lleva dentro suyo un antiguo gorilismo y que suele desconfiar de la falta de prolijidad del plebeyismo populista, de un progresismo aferrado a lo políticamente correcto, al life style y al sacrosanto temor que desde siempre le han causado las multitudes). Incluso el Grupo Clarín, casi al borde del precipicio y sin saber de qué modo salir de su propio atolladero causado por sus oscuridades impresentables, últimamente se le ha dado por describir las atrocidades cometidas durante la dictadura videlista, focalizando en torturas y desapariciones y como adelanto de un improbable mea culpa.



Nadie quiere, en estos días que corren, salvando los editoriales del siempre liberal-conservador diario de los Mitre, definir su identidad política acercándose peligrosamente a la derecha de la pantalla. Nadie quiere, en estos días de festejos y alegrías heredadas del Bicentenario y que se continúan en estas semanas mundialistas en las que la selección argentina amenaza con transformar en mito a Maradona de la mano de Messi y de un equipo que venía de punto y en un par de partidos ha pasado a ser banca incluso contra gran parte de la prensa nacional, ser presentado como un animal de derecha.



Nadie, en especial aquellos que pelean por una suerte de candidatura peronista neoliberal, desea que les recuerden su ostensible inclinación hacia el poder concentrado y hacia las recetas conservadoras (Macri, de todos ellos, es el que lleva la delantera en una carrera de la que nadie quiere ser el ganador, porque la meta es ser identificado como el heredero de Menem).



Con diversos grados de astucia, y en eso De Narváez demuestra que aprende rápido y que tiene alrededor suyo a un ejército de asesores que permanentemente le susurran cosas al oído, los impresentables de un peronismo prostibulario se afanan por demostrar que ellos nada tienen que ver con ese fantasma horrible que viste los ropajes de la derecha. El problema es que nadie parece creerles porque la foto, por sí sola, es más que elocuente allí donde se presentan juntos Eduardo Duhalde, Rodríguez Saa, Ramón Puerta, De Narváez, Juan Carlos Romero, Felipe Solá y, como haciéndose el distraído, el enigmático y siempre escurridizo ex piloto de Fórmula 1 muy acostumbrado a bajarse del auto antes de llegar a la meta.



Lo cierto es que esta truope que se asemeja a una tienda de los milagros, a la que también hay que agregar al entrerriano Busti y al chubutense Das Neves, sabe que tiene que desmarcarse del espectro que la acosa, un espectro que los lleva directamente hacia lo peor de la última década y que los muestra ocupando sin mediatintas el costado derecho de la política argentina, en especial allí donde el kirchnerismo se ofrece como el heredero de las tradiciones nacional populares del peronismo y desde el radicalismo, y tal vez en alianza con el socialismo santafesino y algo de lo que quede de la coalición cívica, amenaza con expropiar el imaginario progresista y republicano que tanto atrae a la clase media.



Los “federal-peroconservadores” intuyen que los tiempos actuales no llevan los aires de la restauración ni que resulta conveniente, al menos por ahora, mostrarse como lo que efectivamente son y representan.

No deja de ser interesante y algo extraño que al gobierno de Cristina Fernández se lo empiece a correr por izquierda cuando, como sucedió hasta ahora, se lo hizo por derecha y en consonancia con los intereses económicos más concentrados.



Los radicales, pese a las declaraciones inoportunamente reaccionarias y prejuiciosas de Sanz al afirmar que la asignación universal lo único que había logrado es aumentar el consumo de paco y el juego de azar entre los pobres y a la figura cada vez más conservadora de Cobos, parecen haber encontrado en Ricardo Alfonsín la figura que los puede colocar en el andarivel democrático y progresista, ese que parecieron haber olvidado y que, con olvidos de por medio, intentan recuperar en concordancia con socialistas y seguidores de Carrió (la gente de Proyecto Sur no parece estar dispuesta a jugar ese juego de engaños y de diluciones y preferirá, quizás, insistir con Pino Solanas en la soledad de su candidatura). Su jugada es astuta aunque dependerá de la memoria que tenga una parte significativa de la clase media a la hora de elegir repetir más de lo mismo y sabiendo que los radicales han llevado al país hacia el precipicio cada vez que fueron gobierno desde la recuperación de la democracia.



Lo positivo de la emergencia de Alfonsín en detrimento de la de Cobos es que ofrece la oportunidad de que la batalla electoral tienda a girar hacia carriles en los que los adversarios buscarán mostrarse, cada uno, como el mejor exponente de un proyecto de transformación y redistribución en el país. Eso incluso acelera lo que ha caracterizado al kirchnerismo que ha optado, en casi todas las oportunidades, por la profundización y no por el repliegue ante los avances de las corporaciones y de la oposición en esos momentos difíciles que se abrieron desde el voto no positivo del pequeño señor Cobos.



De todos modos, el camino hacia octubre de 2011 es demasiado largo y siendo Argentina un país tan complejo y laberíntico, tan zigzagueante y caprichoso, es aventurado imaginar que el actual escenario se mantenga intocado. Lo que sí parece ser evidente, si se sostiene el crecimiento de Ricardo Alfonsín, es que el mayor desafío al que se enfrentará el kirchnerismo no vendrá desde el seno del peronismo, no será un desafío marcado por la impronta de un neomenemismo o de un conservadurismo duhaldista, sino que adquirirá los rasgos de una alianza neoprogresista heredera, aunque bajo otras circunstancias históricas, de aquella otra alianza que llevó al gobierno a De la Rúa y al Chacho Alvarez con los resultados conocidos y sufridos.



Un progresismo vacío, retóricamente republicano y muy débil ante los poderes económicos se enfrentará al único gobierno democrático que después del 55 logró mantener su modelo pese a los claros avances destituyentes a los que tuvo que enfrentarse a partir de la rebelión gauchócrata. Será cuestión de seguir de cerca este duelo que, por esas extrañas parábolas de la realidad nacional, encuentra a los adversarios tratando de mostrarse como los más consecuentes en la búsqueda de un proyecto progresista.



Lo que al menos sí se sabe es que uno está en el gobierno afanándose por profundizar políticas que mejoren la distribución y el trabajo, a la vez que continúen en la senda de políticas de memoria y justicia, en medio de una brutal crisis económica mundial, y los otros han tratado de bombardear sistemáticamente ese camino aunque ahora se envuelvan en ropajes progresistas.

domingo, 20 de junio de 2010

Para todos los habitantes del mundo que quieran habitar el suelo argentino

Por Clara Vernet - http://www.prensamercosur.com.ar/apm/nota_completa.php?idnota=4676

La nueva legislación es de lo más progresista del mundo. Consagara la igualdad de trato a los inmigrantes; acceso a servicios sociales, a los bienes públicos, la salud, la educación, la justicia, el trabajo, la seguridad social y el derecho a la información.

En 1992 Juan Carlos De la Torre, ciudadano uruguayo residente en Argentina, fue detenido y deportado sin orden judicial e intimado a abandonar el país después de 24 años de residencia. Esa arbitrariedad fue posible al amparo de la Ley Nacional de Migración, conocida también como “Ley Videla”, sancionada durante la última dictadura militar bajo la lógica de la "Doctrina de la Seguridad Nacional".


En 1999 el caso De la Torre fue llevado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y se convirtió en bandera de la lucha por la obtención de una ley de la democracia.

El pasado 3 de Mayo, la presidenta Cristina Fernández firmó el decreto reglamentario de la nueva Ley Nacional de Migracionescerrando un ciclo que comenzó con la presentación del proyecto de ley ante el Congreso Nacional en 2002, a cargo del entonces diputado socialista Rubén Giustiniani, y sancionada a principios de 2004. Tan largo camino como el peregrinaje de miles de mujeres y hombres que llegan a la Argentina en busca de una nueva oportunidad.

Aún antes de constituirnos como nación independiente las políticas migratorias fueron una preocupación para los representantes de la dirigencia nacional. El 4 de septiembre de 1812, Chiclana, Pueyrredón y Rivadavia, integrantes del Triunvirato, firman el primer decreto de fomento de la inmigración: "Siendo la población el principio de la industria y el fundamento de la felicidad de los estados, y conviniendo promoverla en estos países, por todos los medios posibles, ha acordado el gobierno expedir y publicar…” En 1949, otro Decreto estableció esa fecha como el Día del inmigrante. Hoy, cada 4 de septiembre, millones de argentinos desempolvan arcones, fotos, vestidos de colores brillantes y vuelven a danzar las viejas danzas y a cantar en las viejas lenguas familiares.

Este primer acto de gobierno inaugura el mito de Argentina como tierra prometida, de la extensa pampa y la hospitalidad. Bien es sabido que la historia de los hombres late a otro ritmo que la de los decretos gubernamentales, y muchas veces marcha a contra mano. Desde finales del siglo XIX hasta mediados del XX europeos pobres del sur de Europa llegan de a miles al puerto de Buenos Aires. Encontrándose, muchas veces que la tierra prometida era ajena y la hospitalidad del pueblo argentino se replegaba ante la fobia finisecular de los Cané y la ley de residencia.

Avanzando el siglo, hombres y mujeres sudamericanos llegan en colectivo a la Estación de Retiro, en tren a Constitución, corridos por el hambre y atraídos por “la tierra prometida”. Durante los 90, la promesa se llamó “convertibilidad” y la tierra, alguna barriada del populoso conurbano bonaerense.

Lo cierto es que en la actualidad, el 70% de los inmigrantes residentes en Argentina provienen de países de la región, Bolivia, Perú y Paraguay son las colectividades con más presencia. Antes de la sanción de la nueva Ley de Migración, la “ilegalidad” de estas personas era moneda corriente. A partir de programas como Patria Grande, lanzado en abril de 2006 durante el gobierno de Néstor Kirchner, esta situación empezó a revertirse. Este programa permitió en los últimos años regularizar a más de 700 mil personas. Es por eso que la reglamentación de la ley de migraciones cierra un proceso de políticas públicas tendientes a reparar una ausencia imperdonable, un doble discurso donde reinaba por un lado la amplitud de nuestro mito fundante y una ley exclusiva. La presidenta Cristina Fernández en su discurso el 3 de mayo pasado dijo: “Está comprobado históricamente que las políticas restrictivas en materia de inmigración no terminan con la inmigración.”, aplicando leyes restrictivas “no hay menos inmigrantes, hay más ilegales”.

La gran novedad de la ley de migraciones es que pone el eje en el derecho de los inmigrantes. Derecho a la inmigración; a la igualdad de trato; al acceso, no discriminatorio, del inmigrante y su familia, a servicios sociales, bienes públicos, salud, educación, justicia, trabajo, empleo y seguridad social y derecho a la información. Estos principios establecidos en los articulados de la ley ponen a la Argentina en la vanguardia de medidas progresistas y de respeto a los derechos humanos en la materia. Martín Arias Duval, Director Nacional de Migraciones, se refirió al respecto: “El espíritu de la ley 25.871 radica en que ningún ser humano es ilegal y establece la migración dentro de las normas de derechos humanos.”


El decreto reglamentario 616 se presenta en un marco internacional donde las políticas migratorias adoptadas por los países hegemónicos en medio de las consecuencias de la crisis que azotó a las economías otrora modelos del neoliberalismo, cierran fronteras y expulsan con la misma receta de siempre. “Cuando uno mira los noticieros en el mundo, o lee la página internacional en los diarios advierte que en los lugares comúnmente denominados más desarrollados, se está produciendo una suerte de regresión a formas xenofóbicas.” dijo la Presidenta e hizo alusión a la ley de Arizona en Estados Unidos y políticas similares adoptadas en Europa.


Los dichos de la presidenta se encolumnaron con la enérgica protesta de los 12 países de la región reunidos ese mismo día en la localidad bonaerense de Campana. No es casual tampoco que el anuncio de la presidenta se produzca en el marco de la conformación definitiva de la UNASUR. Posiblemente, ningún otro momento de la historia desde el albor independentista de comienzos del siglo XIX haya encontrado semejante nivel de integración entre los países sudamericanos. Ojalá, esta vez, la tierra prometida ya no este tan lejos ni ajena.