jueves, 23 de julio de 2015

Las verdades que se esconden detrás de la tragedia griega

Roberto Savio - http://www.surysur.net/2015/07/las-verdades-que-se-esconden-detras-de-la-tragedia-griega/#more-51040

Grecia fue la civilización donde se crearon el drama y la farsa como formas de teatro. Las negociaciones con la zona euro fueron un drama para el pueblo griego y una farsa protagonizada por los líderes europeos. De hecho, es dramático para todos, ya que esto pone un punto final al sueño más radical después de la Segunda Guerra Mundial. Veamos por qué. Será un poco largo, pero sin examinar algo de historia, es imposible entender cómo hemos llegado a esta situación.

Los medios de comunicación han estado presentando el diktat alemán impuesto a Grecia como una diferencia cultural entre el trabajador hormiga y el saltamontes irresponsable de los cuentos de Esopo, a lo que se une la ética de trabajo de los protestantes del norte contra el sur católico (los griegos son ortodoxos católicos). Estas son realidades, pero que dejan fuera importantes verdades.

En primer lugar, recordemos que el euro era un diseño político, no un proyecto económico. Salió de un acuerdo desmenuzado entre el presidente francés François Mitterrand y y el canciller alemán Helmut  Kohl.

Fueron aquellos temores del poder de una Alemania reunificada. “Me gusta tanto Alemania que prefiero tener dos”, bromeaba el presidente francés, que pidió al canciller alemán abandonar el muy fuerte Marco y aceptar una moneda común europea, por lo que el destino de Alemania sería integrarse para siempre con otras economías europeas.

Kohl, al igual que todos los líderes de la época –excepto la premier británica Margaret Thatcher–,  estaba genuinamente comprometido con la integración europea, aceptó la idea, e incluso concordó con que el primer Gobernador del Banco Central Europeo no sería un alemán, como hubiera preferido su electorado.

Para los alemanes, abandonar el Marco  era un fuerte sacrificio psicológico, después de sus experiencias dolorosas de la inestabilidad financiera. Kohl actuó como un estadista europeo, con un gran costo personal ante su electorado,  algo que hoy es simplemente inimaginable.

El diseño del euro era claramente incompleto sin una armonización fiscal y una mayor integración financiera. Pero en ese momento, todo el mundo pensaba que la moneda común aceleraría automáticamente la integración europea. Apenas un año antes, en 1989, el Muro de Berlín cayó, y nadie podía prever de que manera el fin de la amenaza comunista cambiaría la política dentro del mundo capitalista.

En los años posteriores a la introducción del euro (2002), una Alemania más grande y más fuerte aumentó su potencia, también gracias a las reformas de mercado realizadas bajo Gerhard Schröder, traduciéndose en algunas dificultades para los alemanes más pobres. Esto convenció a la gente de que ellos habían hecho su parte de sacrificios, que la austeridad hizo su trabajo y que era la receta para la crisis.

Alemania se convirtió en una exportadora neta dentro de la Unión Europea,  utilizado su superávit para crecer aún más internamente. Los alemanes ven este excedente como resultado de sus sacrificios y fruto de su trabajo, por lo que no miran con buenos ojos a los países con déficit. El comentario común de la calle es: ¿por qué mi dinero va a personas que no fueron capaces de dirigir su propio país?

Aquí es donde se puede ver la diferencia entre un estadista y un político. Angela Merkel, que por cierto surgió de la influencia política de Kohl, que pese a haber sido su mentor,  fue fundamental en su expulsión de la política,  nunca trató de educar a su electorado con una visión europea.

Pocos alemanes entienden que su riqueza proviene en gran parte de los consumidores europeos, que también son ciudadanos europeos. Su actitud con el rescate de minúscula Chipre fue de total intransigencia. Nunca existió ningún esfuerzo por parte de las autoridades alemanas para explicar a sus ciudadanos que ellos también estaban en el mismo barco.

Es justo destacar que Merkel no está cabalgando sola en la popularidad del sentimiento nacionalista. Lo mismo está ocurriendo en toda Europa. El período marcado por De Gasperi, Adenauer y Schuman ha terminado.

En la UE se ha pasado de Delors a Juncker. La visión y el idealismo han dado espacio a los intereses nacionales y a la UE ahora se le  ve más como una vaca para ordeñar. La unidad tácita para la ampliación de la Unión Europea a 28 países ha sido impulsada por una sola cosa: el dinero.

Por tanto, el euro se ha convertido en una camisa de fuerza para los países en déficit, y una herramienta de poder para aquellos con superávit,  como el Premio Nobel Paul Krugman escribió en el New York Times, que describe el euro como Motel Cucaracha, una trampa que una vez introducida, nunca se puede escapar.

Grecia significa tan solo 2% del PIB europeo. Pero funciona el mismo mecanismo, la falta de unión y solidaridad, el motivo por lo que hasta ahora ha sido imposible para una región de 450 millones de personas, llegar a un acuerdo sobre la forma de recibir 40.000 refugiados, muchos de ellos de países como Siria y Libia, en cuya destrucción Europa tiene responsabilidad directa. Este mecanismo ha estado jugando estragos con Grecia.

Los países acreedores insisten en que Grecia ya ha recibido dos rescates: uno en 2010 por € 110 mil millones, con la condición de que eliminaría el déficit, y otro en 2012, por 220 mil millones. Lo que en gran medida no ha sido informado, es que esos préstamos fueron desembolsados bajo un estricto control del BCE, el FMI y la UE, que se aseguraron de que  80% iría directamente a los bancos europeos que habían invertido previamente en los bonos griegos, porque eran los más rentables de la zona euro.

Los bancos alemanes y franceses eran los más expuestos. Sólo 20% se destinó a la economía griega. La austeridad que aparece con los préstamos, ha traído consigo devastación social y económica.

Los otros países que también recibieron un rescate con el programa de austeridad adjunto (España, Portugal e Irlanda) han perdido 7% de su PIB en la crisis. Grecia ha perdido 26% del PIB. Los salarios se han reducido en 14%. Grecia es el único país de la UE donde el salario mínimo ha disminuido. El desempleo se sitúa en 26%, con un desempleo juvenil de 50 por ciento. Más de 75% de los desempleados lo ha sido durante más de un año. De acuerdo con la OCDE, uno de cada cinco personas no se puede permitir una comida. La falta de vivienda se ha triplicado en los últimos dos años. 40,5% de los menores de edad se encuentran ahora en condición de pobreza.

No es necesario ser un premio Nobel como Krugman y Stiglitz para deducir que es necesario un ajuste progresivo y complejo en un país poco industrializado, con una burocracia exagerada y baja productividad, donde años de mala gestión y corrupción tienen que ser corregidos, donde la evasión fiscal es pan de cada día y el bienestar inflado. La receta de austeridad impuesta indicaba que entre 2010 a 2012, el presupuesto debe estar en paridad. En los últimos cinco años, Grecia redujo  costos y  aumentó los impuestos llegando al 30% del PNB.

Ningún otro país de Europa ha sido capaz de hacer esto. Pero ya en el primer año de estudios en  cualquier Facultad de Economía, se aprende que  el PNB es formado por cuatro elementos: las inversiones públicas, que han desaparecido; el excedente comercial, que nunca fue una condición griega; inversiones en los sectores de investigación, de educación y de salud, que han retrocedido varias décadas y, finalmente, por el gasto local, que  ha parado.

¿Cómo puede pretender que un presupuesto esté equilibrado por simplemente reducir los gastos y salarios? ¿Cómo se puede resolver la evasión fiscal en unos meses? No es una coincidencia que en cinco años seis partidos han estado en el gobierno y el país ha sido  dirigido por cuatro primeros ministros (cinco, si se incluye un provisional). ¿Cómo se suponía que Syriza debía resolver todo en un par de meses?

Cuando Grecia ingresó al euro, todo el mundo sabía que sus estadísticas eran dudosas. El gobernador del BCE, el holandés Wim Duisenberg, incluso hizo sonar  una alarma oficial. Pero eran los tiempos de las vacas gordas.

Grecia fue la cuna de Europa, una economía pequeña, por lo que a nadie le importaba. Luego, en 2004, el centro-derecha de Kostas Karamanlis llegó al poder, y descubrió que el déficit presupuestario no era de 1,5%, sino de 8,3%. Decidió mantener esto en secreto en ese agosto en que  los Juegos Olímpicos regresaban a Grecia, donde nacieron.

Por supuesto que en ese momento el presupuesto se había convertido en insostenible. En 2008, la recaudación tributaria del país, entraba en colapso. El cobro de impuestos ya era un desastre, porque dejaba fuera a los ricos, sólo tributando a aquellos con un salario fijo. El agujero en el presupuesto se volvió demasiado grande como para ocultarlo. En 2009 la calificación crediticia del país fue rebajada, primero por Fitch y luego por Moody. El costo de los préstamos disparó, y los bancos europeos descubrieron que los bonos griegos estaban perdiendo valor día a día.

Por lo tanto, en 2010 fue dado un primer préstamo, bajo la condición absurda de lograr un presupuesto equilibrado en dos años.Los recortes en todos los sectores del país provocaron grandes manifestaciones y tan solo en 2011, se sucedieron tres gobiernos. En 2012 el socialista Georgios Papandreou aceptó un segundo préstamo, con las mismas condiciones de austeridad, lo que por supuesto hizo que  la situación fuese aún más insostenible, agravándose el desastre social.

Es interesante leer ahora “Prueba de Estrés, Reflexiones sobre la crisis financiera”, las memorias de Tim Geithner, Secretario del Tesoro (ministro de finanzas) en el primer gobierno de Obama,  publicado en 2014. Geithner sostiene  que la recuperación de Estados Unidos de la crisis se debe al hecho de que en lugar de tomar el camino de la austeridad, pese a hacerlo parcialmente, adoptó la senda del crecimiento

El gobierno estadounidense ha estado siempre tratando de convencer a los europeos a abandonar su fijación con la austeridad.Por ello, Geithner, en el momento del segundo plan de rescate, fue a visitar el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble, el campeón de la teoría económica de austeridad.

Solo que, Schäuble no es un economista, sino  un abogado, que por cierto sabe más acerca de las reglas que sobre la economía.Geithner descubrió que Schäuble estaba convencido de que Grecia se tenía que ir, como un mensaje para el resto de los países deudores, especialmente dirigido a Francia e Italia.

En su óptica,  era necesario redefinir el diseño europeo, haciéndolo más homogéneo y bajo estrictas normas comunes. En otras palabras, en lugar de una Alemania europea, como era la visión de Adenauer, Kohl y Schmidt, Schäuble quería una Europa alemana. Se opuso tenazmente al segundo rescate, ya que no confiaba en los griegos como capaces de llevar su presupuesto a la paridad. Fue contrariando por Merkel con gran dificultad.

En septiembre de 2014, el entonces primer ministro conservador helénico, Antonis Samaras, viajó a Bonn para explicar a Merkel que las medidas económicas impopulares que Grecia estaba obligada a promulgar, estaban alimentando el surgimiento de Syriza, un partido de izquierda radical.

Merkel lo ignoró por completo, y le aconsejó que seguir adelante de inmediato con las reformas. En enero de Alexis Tsipras fue elegido por un electorado exasperado.

Mucho se ha escrito sobre cómo el entonces ministro de Finanzas de Syriza, Yanis Varoufakis, un economista marxista, debatiría con todos sus colegas europeos. Cómo el referéndum convocado por Tsipras sobre el euro fue considerado un error por Merkel y los demás acreedores. Cómo el referéndum se celebró en medio de una campaña del miedo llevada a cabo por conservadores y socialdemócratas, con un llamamiento a los votantes griegos desde el Presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker (conservador), el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem (laborista), el vice primer ministro de Alemania, Sigmar Gabriel (socialdemócrata) y así sucesivamente.

El BCE llegó a clausurar el flujo de dinero a Grecia, en contra de sus reglas agravando el clima de miedo. Lo que pasó desapercibido fue el análisis político del referéndum y la ascensión del propio Tsipras, que era más relevante que la propia Grecia.

Existe el consenso general de que el Wall Street Journal es el portavoz mundial en los círculos económicos. Mientras que el New York Times escribió un editorial para criticar la obsesión por la austeridad en Europa y el papel egoísta de Alemania, el Wall Street Journal del 6 de julio escribió un editorial comentando el referéndum, recomendando que sería mejor una salida del euro que el riesgo de contagio político con una anti-reforma. El editorial dice que a menos que se detenga el contagio político, los partidos de izquierda en Italia, Portugal y España tendrán un nuevo argumento para hacer frente a las reformas que han comenzado a mostrar algunos avances […]

“Esto podría condenar al centroderechista gobierno español de Mariano Rajoy, ya que va a las urnas finales de año”. Otro editorial indicó que la victoria de Tsipras fortalecía Podemos en España, y que el ala izquierda del partido irlandés Sinn Fein, también ha comenzado a utilizar Tsipras para su campaña interna.  El 8 de julio, Holman Jenkins J. dijo abiertamente: “Portugal, Italia y España, los Estados de bienestar europeos fundamentales, ya han hecho la misma transición de dinero externo a la dependencia de otras personas” para mantener sus sistemas de bienestar “.

Por lo tanto, la defensa de Grecia desde una Francia generalmente subyugada, es obvia: es Estado social defendiendo el sistema de bienestar europeo contra las reformas que el sistema neoliberal requiere.

Jochen Büttner, el editor de política del semanario conservador Die Zeit, repite los mismos argumentos de una opinión publicada por el New York Times: ¿Por qué Grecia tiene que irse?, señalando que “el desempleo en Italia, Portugal y España sigue siendo alto, y la unión de antieuropeos y populistas está en aumento en los tres países”. “La conclusión de que la gente   que piensa que no se puede obtener nada de un tercer rescate para Grecia,  es casi seguro que votarán por partidos radicales y la conducta obstructiva será finalmente recompensada “.

Por tanto, existe un abierto llamamiento para un cambio de gobierno en Grecia y un castigo para sus ciudadanos, que han ignorado todos los exhortos de los líderes europeos para evitar un contagio político. Esto está muy lejos de la idea de la solidaridad europea y  de “una unión cada vez más estrecha”, como señala la Carta de la UE.

Se trata de una definición precisa de que Europa es la que el sistema en el poder quiere. Y el sistema no tiene ningún problema con la doble moral.

Examinemos a Ucrania, que ha solicitado un rescate, que el FMI estima del orden de 60 mil millones de dólares. Si bien el déficit griego es el resultado de la mala administración, el de Ucrania, como es ampliamente reconocido, es el resultado de malversaciones y corrupción.

El gobierno, con el apoyo del FMI, está pidiendo un “corte de cabello” (o una cancelación parcial) de su deuda. Según Andrew Kramer, del New York Times, las negociaciones han sido abiertas en este punto. Merkel ha sido muy firme: no al corte de pelo a Grecia, aunque el FMI ha dicho claramente que no hay posibilidad de que Grecia pague su deuda, que se sitúa ahora en  200% de su PNB, lo que no es de extrañar, teniendo en cuenta que deben pagar 240.000 millones de dólares de los dos rescates precedentes.

El FMI incluso ha amenazado con no participar en la implementación del tercer rescate, si no se acepta una reducción del déficit.El tercer rescate se expresa en los términos más humillantes, incluso por lo que sugiere la liquidación de € 50.000 millones de activos nacionales griegos en un fondo administrado bajo el control del acreedor. Alemania quiere lavarse las manos de esa ejecución y prefiere que el FMI haga el trabajo sucio.

La saga griega no ha terminado, durará por muchos años, ya que el proyecto de austeridad está fuera de la realidad, y tal como están las cosas, la situación sólo podrá empeorar. Los egocentrismos nacionales claramente han salido a la luz.

Sin embargo algo ya está claro. El proyecto europeo ha cambiado radicalmente: ya no se basa en la solidaridad y la unión, sino en el dinero y los mercados. El euro, que se suponía iba a ser el punto de partida para una mayor integración, como dice Krugman, es ahora un mecanismo que va incrementar la brecha entre los países fuertes y los débiles.

Además, ahora Europa tiene que enfrentarse a la posibilidad de un Brexit, con el referéndum británico sobre su permanencia en Europa. Merkel ya ha emitido algunas señales positivas sobre las reivindicaciones de Cameron, incluyendo el cambio de la constitución de Europa.

La nueva Europa, liderada por Alemania, se basará sólo en la economía, con una reducción del Estado de bienestar, poca preocupación por las cuestiones sociales y una creciente desigualdad social.

Un año después del primer rescate griego, en 2011, en la convención anual de su partido en Leipzig,  Volker Kauder,  líder de la CDU en el parlamento alemán, provocó un gran aplauso cuando señaló que “de repente, Europa habla alemán. No en el idioma, sino en la aceptación de los instrumentos por los que Angela Merkel luchó tanto tiempo y con tanto éxito “.

Una Alemania enérgica ha seguido creciendo desde entonces. En marzo Herfried Münker, un prominente politólogo de Berlín, publicó un libro que fue un gran éxito “El poder en el medio”,  donde enfatiza que  Alemania tiene el deber de guiar  a Europa, porque ni Bruselas ni otro país de la UE son lo suficientemente fuertes como para hacerlo.

Las lecciones de la historia han sido relegadas. Alemania estaba profundamente humillada por el tratado de Versalles después del final de la Primera Guerra Mundial, lo que llevó a Hitler al poder.

Grecia, por supuesto, es un país pequeño, por lo que su humillación no es una amenaza. Sin embargo, al final de la Segunda Guerra Mundial, Grecia  votó a favor de reducir la deuda alemana en 40 por ciento.

Por lo tanto, surge la inevitable pregunta: ¿es una lectura correcta de la historia pensar que para liderar Europa se debe imponer a todos su propio modelo interno como la única realidad o esto conduce a tensiones y tensiones? Ya es hora de que los alemanes comiencen a reflexionar sobre esta cuestión.

*Periodista italo-argentino. Co-fundador y ex Director General de Inter Press Service (IPS). En los últimos años también fundó Other News, un servicio que proporciona “información que los mercados eliminan”

miércoles, 15 de julio de 2015

Grecia se salvó… ¿de qué?

Nieves y Miro Fuenzalida - http://www.surysur.net/2015/07/grecia-se-salvo-de-que/

IMG_3853 -

La victoria espectacular del referéndum en Grecia, la semana pasada, fue  algo que nadie esperaba. Entre ellos, el mismo  Syriza, cuyos dirigentes se han caracterizado por la falta de determinación  y resolución… ¿Querían ellos perder o ganar solo por un pequeño margen para pasarle el problema a otros? No sabemos pero, en todo caso, el pueblo griego rechazó esta táctica.

Sin embargo, como lo hemos visto ya tantas veces, los dirigentes políticos  de izquierda terminan sirviendo a los intereses de la oligarquía financiera… El pueblo votó por el fin de la austeridad  y lo que obtiene  es más austeridad…  ¿Será que por esto Varaoufakis, que ni siquiera es radical o socialista,  tuvo que renunciar?

Según Chris Bicherton , en un articulo aparecido en le Monde diplomatic, el grupo europeo no es una institución democrática. Está compuesto por los ministros de finanzas puestos por dirigentes de partidos que fueron democráticamente elegidos por sus países.  Pero, el asunto es que cuando  se reúnen lo hacen como individuos, con el fin de lograr consensos, hacer compromisos y lograr acuerdos entre ellos. La etiqueta del grupo europeo es que cada uno debe dejar los intereses nacionales  en la puerta.  Ideologías y declaraciones basadas en doctrinas políticas no tienen lugar en sus declaraciones.  Por lo menos, eso es  lo que pretenden hacernos creer.  Es un grupo privado y lo que ocurre dentro del grupo permanece dentro del grupo. Los ministros han pasado de políticos representantes de intereses a “expertos” en busca de soluciones comunes. La voluntad del soberano es reemplazada por la voluntad el tecnócrata.

Varoufakis rompió todas estas reglas. Mas importante que la motocicleta,  las poleras,   la camisa fuera del pantalón o  la popularidad y carisma que posee, es el hecho que  rehusó  jugar este juego. Y por eso tenía que ser eliminado.  Y eliminado fue, con la aprobación de Tzipras.  Él se consideró un representante del pueblo griego y por eso  cada una de sus propuestas fueron dadas a conocer abiertamente,  incluyendo las del grupo europeo. No a acuerdos cocinados en la pieza trasera. Cualquier cambio en la propuesta era llevado a Atenas  y discutido en el gabinete y en el partido.

gr Tzipras y varoufakisCuando alguien quiebra las reglas del juego no se puede seguir jugando. Varoufakis expuso al grupo europeo por lo que es… un club en donde las relaciones entre individuos son más importantes que las relaciones con  la población que dicen representar…  Éste fue su pecado y por este pecado tenía que pagar.  Los heréticos no tienen cabida en el orden financiero.

Una vez que el obstáculo quedó fuera del camino, el gobierno griego propuso reformas más penosas que las que el referéndum había rechazado. A la larga cadena de capitulaciones de los gobiernos de centro izquierda ahora hay que agregar al primer ministro Alexis Tsipras, que esta semana  le ofreció más austeridad a la troika. Alemania insiste en la sumisión ciega del gobierno de Grecia a pesar del fracaso económico que sus políticas han causado al país.  Frente a esta historia el dilema  con el que Syriza se enfrentó fue una rápida y desordenada salida del euro o la capitulación que, en última instancia, también llevará a la salida del euro.  Sin un plan previo la primera alternativa no era posible.

El mandato  para renegociar las políticas de austeridad y permanecer al mismo tiempo en la unión monetaria solo tiene sentido si la troika tiene realmente interés en una salida constructiva, lo que es  altamente improbable. Lo penoso en todo esto es que, si consideramos la decisión del referéndum, la capitulación  del gobierno echa  por la borda toda responsabilidad democrática  a cambio de una dudosa resolución política  de corto plazo. La Unión Monetaria Europea en su forma actual no funciona y no hay la voluntad política para que funcione con una mayor integración fiscal y política. La salida de Grecia  transformaría al país en el primero  en irse antes de  la disolución eventual de la unión.

La aceptación de más austeridad significa que la deuda se hará mas impagable. La única forma de pagarla es crecer la capacidad para hacerlo, que es lo opuesto de lo que los alemanes están exigiendo y de lo que Tsipra ofrece. Es una simple cuestión de números. Si no hay dinero no se puede pagar.  Cinco años de políticas de austeridad han resultado en depresión económica,  aumento de la deuda y  la imposibilidad de pagarla.

Tsipras no fue  capaz de crear una alternativa y  por esa razón no ha tenido más remedio que seguir el mismo camino que los gobiernos anteriores. El sometimiento a los dictados de la dictadura financiera europea y un futuro de austeridad a cambio de mantener los bancos y la economía a flote… por ahora.

Syriza no se atrevió a arriesgar  la incertidumbre de tener que dejar  la zona europea. Seguramente creyeron  que no tenían  una mayor opción. La firma de este acuerdo llevará al partido a perder su legitimidad en la misma forma en que la perdió el partido socialdemócrata Pasok en el 2010.

gr alexis tsiprasAlgunos sectores del partido creen que la aceptación de estas políticas inhumanas llevarán al partido a prepararse para una posible salida del la zona europea. Esto significa preparar la logística para la transición a  una nueva moneda  y empezar la discusión con el pueblo griego acerca de qué significaría esto para Grecia.  La alternativa posible y liberadora  para la izquierda de Syriza, los movimientos sociales y los activistas de base es desafiar y confrontar las políticas de austeridad y crear alternativas económicas. El desarrollo de un plan frente a la posible salida o expulsión de Grecia  de la zona europea es imperativo. Su salida  transformaría al país en el primero  en irse antes de  la disolución eventual de la unión.

Si nada de esto ocurre  el partido fascista Golden Dawn puede llenar el vacío.

miércoles, 8 de julio de 2015

Grecia: El triste papel de la socialdemocracia

Núria Parlón, Beatriz Talegón y Enrique del Olmo* - http://blogs.publico.es/dominiopublico/13937/grecia-el-triste-papel-de-la-socialdemocracia/

imagen-grecia_35

“En los momentos de crisis se descubre el verdadero eje del poder”, decía uno de los fundadores del socialismo, Federico Engels; pues bien, en este largo proceso de crisis en Europa y en su último epifenómeno —Grecia—, se ha desvelado por si hubiese alguna duda no sólo el verdadero eje del poder —los mercados financieros—, sino también todos aquellos que les hacen la ola una y otra vez.

Ríos de tinta corren sobre Grecia. Los apóstoles del pensamiento único del libre mercado se dirigen a los fieles desde los púlpitos que la prensa “libre” ha preparado para ellos. Las pizarras, tan de moda en el prime-time político actual, echan fuego. Sobre ellas, los expertos economistas escupen un dato tras otro, incansables en su labor evangelizadora, con el noble fin de que al ciudadano medio le quede marcada a fuego la ortodoxia del libre mercado. Una ortodoxia que señala a la propia Grecia como principal culpable de la crisis de deuda helena, y a sus responsables gubernamentales como radicales irreflexivos que se valen de la demagogia y el populismo para conducir al pueblo griego al abismo del desabastecimiento.

Y en esta campaña para culpabilizar a Grecia y a su Gobierno, no han estado sólo los gobernantes conservadores y los medios de comunicación, sino que han contado con la inestimable ayuda de la socialdemocracia tanto la gobernante como la opositora.

Desde el mismo día de la llegada de Tsipras al Gobierno, la socialdemocracia no le ha concedido respiro. Se podrá estar de acuerdo o no con la forma de encarar las negociaciones con tal o cual propuesta, ese no es el problema, lo extremadamente grave es que ante el tremendo dolor al que se somete al pueblo griego, los “progresistas” europeos no se hayan situado inequívocamente al lado de él y enfrentándose a la política de la troika; ese es el problema de fondo ante el que no sólo cualquier progresista sino cualquier persona con sensibilidad social tiene que definirse.

A nadie se le escapa que el problema griego no es ni un problema contable, ni un problema estrictamente económico. Es un problema de carácter político, es un problema de castigar a aquel que no comparte la política de austeridad que ha sido sistemáticamente denunciada por todo tipo de analistas e informes, incluida la Administración Obama y la Reserva Federal. Trasciende al caso griego aunque este le represente. Y en ese pulso, y en esa pugna la socialdemocracia europea ha estado de forma clara en el lado de Merkel. Las demandas de otra Europa que sacan a pasear en las campañas electorales no aparecen en el debate y la pugna actual; todavía muchos podemos recordar cómo miles de socialistas aplaudían entusiasmados a Schultz en la campaña de las europeas de mayo del 2014 cuando denunciaba la austeridad y el hambre en el Sur y hablaba del proyecto europeo del S&D.

Papeles, textos, discursos, conferencias quedan convertidos en palabras que bajo nuestro punto de vista no se debería llevar el viento en cuanto hay un conflicto real con los poderes establecidos. Es triste que cuando esto sucede, sólo aparece la supeditación, la justificación y como mucho el matiz irrelevante. Grecia es un ejemplo pero el TTIP es otro donde los S&D europeos avalan el oscurantismo y el contenido profundo del mismo y se limitan a matizar los aspectos más difícilmente vendibles para la ciudadanía.

Un ejemplo claro ha sido el rechazo de todos los partidos socialistas al referéndum, la delegación española en el Parlamento Europeo firmaba un comunicado alineado claramente con las tesis germanas: “La convocatoria de un referéndum para el próximo domingo en Grecia ha situado la negociación al borde del precipicio. Es un recurso legítimo del gobierno griego, pero enormemente arriesgado para Grecia porque podría acabar dividiendo peligrosamente a su pueblo y quizás dejándolo fuera de la Unión”. Si esto no es un chantaje que venga Zeus y lo vea. En este texto, está el compendio de la deriva socialdemócrata; convocar al pueblo es lo que rompe la negociación, una consulta divide y ella abre la puerta de salida de Grecia de la Unión. La agresividad contra el referéndum y gobierno griego de relevantes dirigentes socialistas llama poderosamente la atención en un tiempo donde una y otra vez se nos ha repetido que frente al poder de los mercados había que recuperar el poder de la política, que es el único instrumento de los débiles y que son las nuevas mayorías políticas las que pueden dar la vuelta a la política de la UE, efectivamente muchísimos socialistas pensamos que si Zapatero hubiese convocado al pueblo, en referéndum o en elecciones en aquel mayo del 2010 donde se iniciaron los recortes y la ruptura con la política redistributiva, posiblemente no hubiésemos tenido cuatro años negros de mayorías absolutas del PP y muy posiblemente el PSOE no hubiese perdido a chorros el apoyo popular.

Después del resultado del referéndum donde importantes dirigentes socialdemócratas habían hecho una apuesta inequívoca contra Tsipras y el No, como el alabado Schultz: “Si los griegos votan no tendrán que introducir otra moneda en su economía, porque no tendrán más euros a su disposición como medio de pago”. O el otrora izquierdista Sigmar Gabriel y ahora chambelán de la señora Merkel: “Tsipras ha roto todos los puentes con Europa”, tampoco los partidos socialistas en el Gobierno, como Hollande o Renzi; o en la oposición, como el resto, han dado un golpe político en la mesa para cambiar el rumbo de los acontecimientos, han seguido entregados en manos de los tecnócratas que piden contrapartidas con las caídas de las pensiones, los salarios y reducción del enflaquecido Estado griego.

Los resultados de la política de la troika, de Bruselas y del Bundesbank son demoledores, no es cuestión de realizar una larga enumeración pero sí de señalar algunas cuestiones para ver la dimensión de la crisis. El PIB Griego ha caído alrededor de un 25 %, es una contracción parecida a la de los países que han sufrido una guerra. La contracción española sólo llegó al 3,7%. La deuda pública que siempre se sitúa como uno de los grandes objetivos de las medidas de austeridad, no ha disminuido sino pasado del 126% en 2009 al 180% en estos días. Paro incrementado en 17 puntos, pensiones reducidas hasta un 48%, 256.000 funcionarios menos y podríamos seguir. Pero la siguiente cuestión es a dónde ha ido el dinero del rescate, lo decía taxativamente uno de los directores ejecutivos del FMI, Paulo Nogueira: “El rescate griego sirvió para salvar a los bancos franceses y alemanes”. Efectivamente, más del 85% de los 230.000 millones prestados han vuelto a los bancos para los que parecen que trabajan los representantes políticos incluidos los dirigentes socialdemócratas. El Informe del FMI del pasado jueves y el informe del Comité de la verdad sobre la deuda inciden en lo mismo, a saber; en la imposibilidad de salida sin un giro en la política de la UE. Como señala muy acertadamente el analista financiero Juan Ignacio Crespo: “Es verdad que Grecia no podrá pagar su deuda. Pero ni Grecia, ni ningún otro país si tuviera que hacerlo. Ni siquiera EEUU”. Y eso es además una constante de la historia de la economía mundial, el default es un elemento regulador de la sobrevaloración del sistema.

Que las recetas no funcionan, es obvio para cualquiera, aunque no sea un experto en economía. Que es preciso cambiar de patrón de crecimiento también resulta, ya sea basándose en los factores puramente económicos, o en factores de tipo social, más que evidente. Que la obcecación por el mismo tipo de medidas de mal llamada austeridad, denota un claro fanatismo interesado resulta visible para cualquiera con un mínimo de criterio propio. La pregunta que queda pendiente se antoja obvia. ¿Por qué nadie levanta su voz contra este abuso? ¿Se ha vuelto loca toda Europa? ¿Dónde está la socialdemocracia europea? ¿Para cuándo una política sistemática e intensa para convertir el BCE en el Tesoro Único europeo? ¿Para cuándo la modificación del papel de prestamista a los bancos privados y no a los bancos centrales, para que aquellos hagan pingues beneficios con el diferencial de compra y venta del dinero? ¿Para cuándo políticas realmente activas para la generación de empleo y no la competencia vía la bajada salarial? ¿Para cuándo la emergencia social va a estar por delante de la emergencia bancaria? Desgraciadamente la socialdemocracia en Europa navega en el mismo barco que pilota Merkel, sus propuestas no pasan de ser declaraciones fútiles que cuando llega la hora de la verdad no se aplican. En ese barco muchos socialistas no queremos navegar.

Terminemos con un referente moral, intelectual y ético con el que si se puede construir Europa, un alemán al que su condición nacional no le condiciona su visión universal, Jurgen Habermas: “La Unión Monetaria seguirá siendo inestable mientras no se complete con una unión bancaria, una unión fiscal y una unión económica. Esto significa, si no queremos reducir la democracia a un decorado, convertir la unión monetaria en unión política”.

*Núria Parlón es viceprimera secretaria del PSC y alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), Beatriz Talegón es ex dirigente de las Juventudes Socialistas y Enrique del Olmo es militante socialista

domingo, 5 de julio de 2015

Tumbar a Correa: objetivo de la ‘contra’

http://www.telegrafo.com.ec/opinion/columnistas/item/tumbar-a-correa-objetivo-de-la-contra.html - Jaime Galarza Zavala

 

Lo proclaman a gritos, con los ojos inyectados de odio, la boca echando espuma: “¡Hay que tumbarle a este…!”. Nada de esperar el 2017 para enfrentarlo en las urnas. Hay que tumbarlo ya, sin pérdida de tiempo, ahora que está golpeado por los plantones y las marchas, por los errores del Gobierno y de la Asamblea, por la inoperancia de Alianza PAIS y de sus líderes. Ahora que la ‘prensa corrupta’ ha recuperado un poquito de credibilidad poniéndose al lado de toda clase de reclamantes.

Así piensa y en esa dirección actúa la ‘contra’ nacional, que nos recuerda aquella ‘contra’ que bañó de sangre a Nicaragua para acabar con la Revolución Sandinista. ‘Contra’ nacional que es parte de la continental manejada por la CIA y el Pentágono, los dos brazos asesinos de Norteamérica, golpeados aquí severamente por Rafael Correa cuando recuperó la base de Manta para la soberanía ecuatoriana, expulsó del país a esos dos gringos con cobertura diplomática y a la mismísima Heather Hodges, la embajadora metiche, y luego al grupo militar estadounidense que operaba desde la embajada con 50 asesores gringos metidos hasta en la sopa de nuestras Fuerzas Armadas. Esto además de la campaña de dignidad nacional bajo el lema ‘La mano sucia de Chevron’. Acciones todas ellas consideradas de lesa majestad por el imperio, y que le hacen acreedor de la horca al Presidente de los ecuatorianos.

Correa debe, pues, pagar por todo aquello. Y no solo Correa: todos cuantos le apoyan, especialmente los componentes de la lista LINX, lista que en nuestro país y en cualquier otro de América Latina mantiene la CIA y que la integran los “cien elementos más peligrosos para la seguridad nacional de Estados Unidos”.

Todo lo cual se agravó en 2008, cuando el presidente Correa desarmó la Dirección de Inteligencia Militar y la UIES policial, nidos de espías y agentes a sueldo de la embajada, que luego hicieron causa común con el 30-S y que hoy empujan descaradamente la corriente ‘Fuera Correa, fuera’.

En cuanto a los integrantes de la ‘contra’ criolla, hay que diferenciar a sus componentes: hay los fascistas de convicción, amantes de la violencia; los mercenarios locales y venezolanos, amantes de la plata; los ambiciosos de figuración, los resentidos, los honestamente decepcionados, y la gente del montón, esas ingenuas e ingenuos ecuatorianos a quienes los vivos les aplican sabiamente el ‘pendejómetro’ para que salgan a defender en las calles las herencias, las plusvalías y la evasión de impuestos de los millonarios que les explotan y despellejan.

Y claro, agazapados dondequiera están los ‘quintacolumnistas’ encargados de espiar casa adentro, sabotear obras, incrementar la corrupción y procurar medidas que aumenten el descontento popular, echando leña al fuego.

Este es el panorama que vive el Ecuador de hoy y que se agravará (plantones, desinformación, francotiradores) cuando el papa Francisco se haya despedido de nuestra tierra, alumbrada por una titilante y débil luz de esperanza.

domingo, 28 de junio de 2015

EL GOLPE MILITAR DE 1966 - En vez de votos, botas

Por Mario Rapoport * - http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-148485-2010-06-29.html

El 28 junio de 1966, un golpe militar, con la anuencia de sectores civiles, políticos y sindicales y una fuerte campaña previa de los medios de información –como la que soportaron Yrigoyen en 1930 y Perón en 1945 con resultados distintos–, depuso al presidente radical Arturo Illia. Las Fuerzas Armadas abandonaban así el rol tutelar que venían ejerciendo desde la caída de Perón, en 1955, sobre gobiernos emergentes de un régimen deslegitimado por la proscripción del peronismo. Al igual que en golpes anteriores, la desestabilización empezó mucho antes y los medios de la época tuvieron mucho que ver en ello, en especial los periodistas Mariano Grondona, Bernardo Neustadt y Mariano Montemayor, como señala Miguel Angel Taroncher en su libro sobre la caída de Illia. Esos periodistas contribuyeron “como parte integrante del poder mediático, a la campaña de prensa sobre la base de coincidentes mensajes críticos contra el gobierno” radical. A través de ellos jugaban sofisticadas revistas de opinión un rol que en golpes anteriores habían desempeñado periódicos de lectura masiva.

Las principales instituciones empresarias, por su parte, estaban también disconformes con lo que consideraban una excesiva intervención del Estado en la economía. Un documento inédito de la UIA hablaba de “la burocratización total de la vida económica [...] que conduce gradual pero persistentemente a la absorción de la empresa privada por el Estado [...]”. La misma “toma varias formas pero, para las actividades más importantes, casi siempre se resuelve en la obligada transferencia de la propiedad del empresario privado al Estado”. Estos conceptos parecían dejar traslucir que el gobierno de Illia era una antesala del de Fidel Castro. (Ponencia de la UIA para la XXII Asamblea de Aciel a realizarse del 4 al 6 de junio de 1966.)

Mariano Grondona, gestor del golpe en numerosos artículos, señalaba dos días después de haberse producido, las razones del mismo: “Arturo Illia no [había comprendido] el hondo fenómeno que acompañaba a su encumbramiento: que las Fuerzas Armadas, dándole el Gobierno, retenían el poder. El poder seguía allí, en torno de un hombre solitario y silencioso [el general Onganía]. [...]. Siempre ha ocurrido así: con el poder de Urquiza o de Roca, de Justo o de Perón. Alguien, por alguna razón que escapa a los observadores, queda a cargo del destino nacional. Y hasta que el sistema político no se reconcilia con esa primacía, no encuentra sosiego”. El gobierno había cometido el error de creer que gobernaba cuando en realidad los votos de la elección de Illia seguían siendo botas.

Pero la incógnita principal fue el rol que Estados Unidos jugó en el golpe. Dos años antes, en 1964, el gobierno de Washington había tenido una influencia decisiva en la caída del presidente brasileño Joao Goulart, a quien consideraban un “extremista”. Existe la transcripción de un diálogo entre el presidente Johnson y el secretario de Estado adjunto para Asuntos Interamericanos Thomas Mann, el viernes 3 de abril de 1964, tres días después de ese golpe. “Mann: Espero que Ud. esté tan feliz respecto al Brasil como lo estoy yo. LBJ: Lo estoy. Mann: Pienso que es lo más importante que ocurrió en el hemisferio en tres años” (tapes de la Casa Blanca, 1963-1964). En cambio, no surge de los documentos secretos que el Departamento de Estado hubiera intervenido directamente en la caída del primer mandatario argentino –en verdad no lo necesitaba–, pero estaba perfectamente informado de la existencia de sectores militares y civiles opuestos a los lineamientos programáticos de Illia y en procura de una oportunidad para provocar una “intervención” militar desde muy temprano, incluso desde antes de su asunción, en octubre de 1963. La carrera de Illia hacia los comicios de julio de 1963 se había desarrollado en un clima político interno signado por la proscripción del peronismo y de su líder, por lo que la UCR del Pueblo obtuvo la primera minoría y la nominación de su candidato en el Colegio Electoral con apenas el 25 por ciento de los votos. Este hecho cuestionaba la legitimidad de la victoria electoral; una “marca de origen” que constituiría el “caballito de batalla” permanente de la oposición política y, especialmente, de los sectores internos y externos que ya desde el inicio de la nueva administración comenzaron a tejer la trama conspirativa. El nuevo presidente accedería a la Casa Rosada con una minoría parlamentaria, hostilizado por la sistemática oposición de la dirigencia sindical y patronal y conviviendo con contradictorias tendencias conservadoras y populistas dentro del propio radicalismo.

Las políticas desplegadas, sin agitar demasiado las aguas, rescataban lineamientos básicos heredados de la intransigencia radical y del primer peronismo, con un trasfondo internacional marcado por propuestas económicas nacionalistas en boga en muchos países del Tercer Mundo. Esas orientaciones se manifestaron a través de cierta resistencia a las imposiciones del FMI, la concepción de un Estado inclinado al control y la planificación de la economía –como en caso de los productos farmacéuticos–, así como a la atención prioritaria al mercado interno. Se tomó también la decisión de denunciar y anular los contratos petroleros firmados por el presidente Frondizi.

Por supuesto, los servicios de inteligencia norteamericanos estaban bien informados sobre los planteos golpistas y sus principales protagonistas. Así lo testimonia un cable de la CIA al presidente norteamericano Lyndon Johnson, que se encuentra en los archivos de su presidencia, localizados en Austin, Texas. Allí se daba cuenta de la decisión de los altos mandos militares argentinos de promover el golpe para el mes de julio, aunque la acción podía adelantarse si la “crisis económica” se acentuaba. El informe reseñaba la “responsabilidad” y “seriedad” de los objetivos del futuro gobierno militar y enumeraba entre los involucrados a los generales Juan Carlos Onganía, Julio Alsogaray, Alejandro Lanusse y Osiris Villegas (CIA, 2/6/66, Country Files, Argentine Memos, Vol. II, Box 6).

Finalmente, el levantamiento militar tuvo lugar el 28 de junio y el gobierno surgido de la decisión golpista se autodenominó “Revolución Argentina”. El “caudillo” soñado por Grondona fue nombrado presidente con el objetivo primordial de mantenerse mucho tiempo en el poder: “un dictador es un funcionario para tiempos difíciles”, afirmaba el inefable periodista. El nuevo régimen pretendía imponer un proyecto de largo alcance, dotando al Estado de una organización tecno-burocrática, que Guillermo O’Donnell denominó “Estado Burocrático Autoritario”, capaz de poner fin a las pujas intersectoriales y políticas locales en el marco de la Doctrina de la Seguridad Nacional, que privilegiaba el accionar en el orden interno por parte de las Fuerzas Armadas contra los peligros del “extremismo” y la “disociación social”. Pero los tiempos económicos, sociales y políticos que proponía no pudieron llevarse a cabo. A través del Cordobazo la sociedad puso fin a esa forma criolla de “pseudomonarquía”. Grondona debió postergar por un tiempo sus sueños “caudillescos”, las Fuerzas Armadas se retiraron después de dos intentos frustrados de continuar en el mando y Perón volvió finalmente a la Argentina. Se abría una etapa vertiginosa cuyo desenlace dio paso al período más doloroso de nuestra historia, que comienza en 1976. El golpe militar que lo precedió diez años antes fue, sin duda, un primer ensayo.

Economista e historiador. Investigador superior del Conicet.

miércoles, 24 de junio de 2015

China, Latinoamérica y la geopolítica común

Alejandro Piscitelli - http://rinacional.com.ar/china-latinoamerica-y-la-geopolitica-comun.html

La supremacía mundial en términos comerciales de China sobre EE.UU comienza a agudizar sus conflictos para presentarlos al mundo.  Sus socios europeos tradicionales han empezado a coquetear con inversiones del nuevo banco mundial de iniciativa China.

En el viejo continente

El proyecto pretende integrar 50 mil millones de dólares en el Asian Infrastructure Investment Bank (AIIB) y 100 mil millones si India participa en el proyecto. La institución está diseñada para proporcionar fondos para infraestructura a la región Asia-Pacífico. China pretende capitalizar en una década al banco con un billón de dólares. Recordemos que el capital chino se reparte entre  China y Hong Kong.  Hong Kong sola tiene más del doble de reservas monetarias que Estados Unidos. Uno de los países interesados en participar es Inglaterra. George Osborne -ministro de finanzas inglés- pretende convertirse en un miembro fundador del banco chino además del auspiciante político de la construcción de centrales nucleares.

Del otro lado del Atlántico los cólicos no se hicieron esperar. EE.UU expresó su malestar con la decisión que rompía la tradición financiera de su principal aliado europeo aliándose con el enemigo. El antecedente fue un Tratado de Trans-Pacifico de libre comercio que dejó de lado a China. Así el gigante asiático le respondió quitándoles a aliados que ya no miran tanto hacia occidente.

Geopolítica China-Suramérica

Mientras tanto, por casa,  durante el mes de Mayo, se llevó a cabo una gira que tuvo por protagonista  a Xi Jinping quien en su paso por Latinoamérica cosechó proyectos que fortalecerán la relación comercial estratégica con el país asiático. La inversión total asciende a 261.000 millones de dólares desde el 2009, año en que este país se consolidó como primera potencia comercial a nivel mundial.

Venezuela es el principal receptor de fondos chinos en Sudamérica, con 56.000 millones de dólares en los últimos ocho años. Actualmente mantiene una deuda de 17.000 millones de dólares, que cancela en parte en petróleo y productos minerales del hierro. 

En Brasil el crecimiento bajo el “lulismo” del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) había anulado la influencia del Banco Mundial en la última década. Con igual resultado también en otros países latinoamericanos que tiene fluidas relaciones con Brasil. Pero USA aún tiene esperanzas de lograr boicotear y restringir al BNDES teniendo como instrumento en el gobierno Dilma Rousseff al ministro de hacienda Levy.

En Chile, el Banco Central de Chile y el PBC (Banco Central de la Republica Popular China) firmaron previamente un acuerdo bilateral sobre swap de monedas, vigente a contar también del 25 de mayo de 2015 el cual considera la apertura de una facilidad o línea por un monto máximo de hasta 2.200 mil millones de yuanes. Este acuerdo es válido por tres años, y será renovable por consentimiento mutuo de ambos bancos centrales. 

Además las autoridades de la República Popular China acordaron otorgar a Chile una cuota de  50 mil millones de yuanes en su programa denominado "Renminbi Qualified Foreign Institutional Investor" (RQFII), que permite a inversionistas institucionales extranjeros calificados invertir directamente en el mercado de valores de ese país.

Acortando distancias por tierra y por mar

El ferrocarril bioceánico, cuyo financiamiento estaría a cargo de China, es una de las obras de infraestructura más grandes de los últimos años, y podría iniciar su construcción en el 2018, aunque aún se deben realizar diversos estudios de factibilidad, informó la Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN). Este megaproyecto, que demandaría una inversión de US$ 10 mil millones, unirá por vía marítima el puerto de Tianjin en China con el puerto de Bayóvar en Perú, y desde allí un tren recorrerá más de 8 mil kilómetros, atravesando los Andes y la Amazonía, hasta el océano Atlántico, culminando en el puerto de Santos, en Brasil.

Chi explica que, a mediano plazo, básicamente las dos modalidades de inversión de China en la región serán la compra de materia prima y el establecimiento de empresas de capital mixto para la producción de esa materia prima.

En Nicaragua, China está financiando la construcción de un canal interoceánico que vendría a competir directamente con el de Panamá. En junio de 2013, el gobierno del presidente Daniel Ortega anunció la firma de un contrato por US$ 40.000 millones con HKND Group, la empresa que dirige el multimillonario de Hong Kong, Wang Jing: el monto le garantiza a China una concesión de 50 años por los derechos de construir el canal y otros 50 años para manejarlo.

Juego de Bases

El cuadro finaliza con la creación de bases militares que aseguren el final previsto de la historia: La Guerra. China ha comenzado a desarrollar bases militares navales en el mar que lo rodea de aliados de EE.UU. La militarización de dichas zonas son consecuencias del hostigamiento que ha provocado las fricciones geopolíticas en cuanto a su injerencia en América Latina y Europa.

China se abre paso ocupando el lugar que EE.UU ha dejado en América Latina al ver sus intereses en retroceso respecto del proceso de integración Suramericana en marcha. Europa da los primeros guiños al gigante asiático dada la caída comercial lenta y permanente gracias a la timba financiera que maneja los destinos de la especulación y la guerra.

Sin embargo, nuestros gobiernos no deben dejar de observar que China protege sus intereses al competir con EE.UU por tanto la estrategia económica y política es servirse de este mundo multipolar anteponiendo el interés de las grandes mayorías. Y, por sobre todas las cosas, debemos desarrollar una industria latinoamericana que le ponga valor agregado a nuestras materias primas. Sino haríamos un simple cambio de dueño sin romper la correa que nos ata.

Mientras tanto, los candidatos de la injerencia yankee desean pagar a los fondos buitre como Macri y su Vice o el gobernador mendocino manos de tijera Cornejo. En nuestros países hermanos la contraofensiva imperialista ha hecho pie en Ecuador y continúa en Venezuela. Nada fácil será la pelea sin unión verdadera.

Fuentes:

http://www.iprofesional.com/notas/192198-Qu-busca-China-a-cambio-de-sus-inversiones-en-Argentina-y-Venezuela

http://www.bbc.com/mundo/noticias/2014/07/140714_economia_china_america_latina_msd

http://www.theguardian.com/us-news/2015/mar/13/white-house-pointedly-asks-uk-to-use-its-voice-as-part-of-chinese-led-bank

http://www.latercera.com/noticia/negocios/2015/05/655-631202-9-banco-centrales-de-chile-y-china-firman-convenio-para-facilitar-uso-del-yuan-en.shtml

martes, 16 de junio de 2015

LAS BOMBAS SIGUIERON CAYENDO

Hugo Presman (Artículo publicado en 2005) - http://www.diariojunio.com.ar/noticia.php?noticia=69225

La niebla cubría Buenos Aires ese jueves frío que anticipaba el invierno cercano. El pronóstico meteorológico publicado en Clarín vaticinaba: “Nublado, probables lluvias ligeras y vientos leves del este”. En Punta Indio los aviones se aprontaban a despegar. El ataque estaba concertado para las 10 de la mañana. Se iba aprovechar una exhibición aérea, un  acto de desagravio a la memoria del Libertador antes los hechos ocurridos el sábado anterior, en la peregrinación de Corpus Christi, para atacar la Casa Rosada y asesinar a Perón. El acto estaba convocado para las 12 horas.

La Argentina estaba visceralmente dividida.

Los conspiradores habían fijado la fecha del magnicidio para el 22 de junio. La certeza de que habían sido descubiertos los llevó  a adelantar el ataque para el 16 de junio. Ello originó confusión en sus filas y que no contaran con el único apoyo firme en el ejército,  el General León Bengoa, jefe  de la tercera división de infantería con asiento en Paraná, Entre Ríos.

Son las cuatro de la mañana del 16 de junio en la base aeronaval  Punta Indio. El jefe del ataque aéreo, el Paul Tibbets vernáculo, es Néstor Noriega y arenga a los pilotos sin eufemismos: “Vamos a salir y vamos a bombardear la Casa Rosada. La Casa Rosada,  ¿entienden bien, no?

La ciudad duerme envuelta en una niebla espesa. Todo anticipa que no va a ser un día peronista.

AMANECE SOBRE LA CASA ROSADA

Perón llega a Balcarce 50 a las 6,15 de la mañana. En la nutrida agenda de ese día, está  primero un encuentro con el embajador de Canadá y luego el de EE.UU. Cuando está conversando con éste último, llegan las primeras noticias que movimientos sospechosos se registran en Ezeiza. Cuando la audiencia termina a las 8, recibe al Ministro de Ejército Franklin Lucero. Por razones de seguridad, el presidente se traslada al Ministerio de Ejército.

El frío, la oscuridad y la niebla enmarcan un escenario tenso saturado de incertidumbre.

LOS CONSPIRADORES

El magnicidio golpista tiene como sustento a la Marina y un amplio espectro civil. Radicales, conservadores, socialistas, comunistas nacionalistas.

La proclama del golpe fue redactada por el radical Miguel Ángel Zabala Ortiz, luego canciller del presidente Illia y por el conservador Adolfo Vicchi. El triunvirato que asumiría el gobierno se completaba con el socialista exiliado en Uruguay, Américo Ghioldi. 

Los cinco decretos que confeccionaron con fecha 16 de junio, según Daniel Cichero, autor del libro  “Bombas sobre Buenos Aires” fueron: a) Asunción del poder por parte de una “Junta de la Revolución Democrática” b) La intervención  a las provincias. Se designaría a los jefes militares de mayor rango como interventores en cada una de ellas c) La intervención de la CGT. d) La liberación de los prisioneros políticos, tanto civiles como militares. e) La imposición de la pena de muerte por fusilamiento a quién resistiera la autoridad de la nueva Junta.

El jefe de la conspiración es el vicealmirante Samuel Toranzo Calderón y su superior inmediato Benjamín Gargiulo, que da vía libre pero no quiere participar activamente.

Cuentan con la complicidad del Ministro de Marina del gobierno, el contralmirante Aníbal Olivieri,  que para disimular en un principio su participación se internó en el Hospital Naval el 15 de junio alegando una afección cardiaca. Como premio a sus servicios, después del golpe del 55 fue designado Embajador ante la ONU.

El plan es sencillo: bombardeo de la casa de gobierno y asesinato de Perón. Si sobrevivía a los bombarderos, el grupo de comandos civiles entre los que se encontraban Luis María de Pablo Pardo y Mario Amadeo, luego ministros de Eduardo Lonardi  y el eterno divagador en griego y sofista en castellano Mariano Grondona,  junto con la Infantería de Marina debían tomar la Casa Rosada y perpetrar el asesinato.

Samuel Toranzo Calderón instaló su comando en el propio Ministerio de Marina, la actual Prefectura Naval a cuatro cuadras de la sede del poder ejecutivo.

CUADRO DE SITUACIÓN  

El gobierno mostraba algunos síntomas de agotamiento. La crisis del 52/53 parecía superada y se había recurrido a algunas concesiones petroleras a la Standard  Oíl de California que la oposición aprovechaba levantando las banderas nacionalistas en forma poco creíble. Eran los mismos que habían caminado juntos, una década atrás, con el embajador norteamericano Spruille Braden  El conflicto con la Iglesia  permitió reconstruir la Unión Democrática de 1945, a lo que se sumaba el clero que había apoyado a Perón en 1946. Como respuesta al divorcio instrumentado por el gobierno  mediante el artículo 31 de la ley 14394 , seguido del intento de separar la Iglesia del Estado, se funda la Democracia Cristiana.

En ese contexto, la procesión de Corpus Christi el sábado 11 de junio  congregó una multitud que agrupaba en un llamativo contubernio a verdaderos creyentes, fanáticos chupacirios, agnósticos y ateos.

Al finalizar la concentración se quemó una bandera argentina que fue instigada desde el gobierno.

El enorme apoyo popular con que contaba Perón, fruto de la más importante distribución de ingresos de la historia argentina, de la protección del trabajador y la niñez, del fomento de la industria y de la nacionalización de los servicios y de las riquezas del suelo, contrastaba con errores evidentes en su política hacia la clase media, en su autoritarismo notorio, en su exacerbado culto de la personalidad. Eso permitía que los sectores económicos heridos por el peronismo, contaran con el apoyo de franjas significativas de la clase media, que le daba sustento popular a sus intentos de retrotraer el país a la situación anterior a 1943.

CONFUSIONES

Obviamente el desfile aéreo programado no se realizó pero una cantidad de pilotos que venían de Mendoza para participar del evento se sumaron al ataque.

Otro hecho fundamental para el éxito del golpe  era el apoyo de la VII Brigada de la Fuerza Aérea de Morón. Desde ahí debían partir los aviones para el homenaje y desagravio en la Plaza de Mayo convocado para las 12 horas. Dicha base tenía los modernos cazas a reacción Gloster Meteor que podía desbalancear el conflicto. Durante la mañana, en medio de la confusión reinante, la base fue leal y luego rebelde.

BOMBAS SOBRE BUENOS AIRES

La niebla parecía ser aliada  del gobierno. Recién a las 10,30 despegaron los aviones de Puerto Indio. A las 12,45, Néstor Noriega arrojó las primeras dos bombas sobre la Casa Rosada.En tres oleadas separadas por intervalos de horas se arrojaron sobre la Ciudad de Buenos Aires 14 toneladas de bombas, la mitad  de las que se utilizaron para destruir Guernica en la Guerrra Civil Española.

Los aviones utilizados por la armada fueron los North American AT6, los Beechraft AT 11 y los patrulleros – bombarderos Catalina. La fuerza aérea empleó los Gloster Meteor y DC3. La Casa Rosada quedó semidestruida, como 18 años más tarde pasó con La Moneda chilena.

Fue el bautismo de la aviación militar argentina. En septiembre, cuando derrocaron a Perón,  llevaban pintado en sus fuselajes la leyenda “ Cristo vence”. Un adelanto de la complicidad, 21 años más tarde, de la Iglesia con los terroristas de estado bendiciendo las armas y confortando a los que arrojaban prisioneros vivos al Río de la  Plata.

Se atacó además el Ministerio de Obras Públicas, la residencia presidencial conocido como Palacio Unzúe y donde hoy se levanta la biblioteca nacional, el Ministerio de Hacienda,  la Plaza de Mayo, el  Ministerio de Guerra, la CGT, el edificio de la Policía Federal, Ezeiza.

Bombas que caían sobre trolebuses colmados de civiles. Bombas que estallaban sobre la Casa de Gobierno donde había más de cuatrocientos civiles que por razones ignoradas no fueron evacuados.

Perón se había refugiado en los sótanos del Ministerio de Guerra. Los marinos y comandos civiles que debían tomar la casa de gobierno encontraron enconada resistencia en civiles peronistas armados. En el Bajo, se libró una larga y feroz batalla. Transitoriamente los sublevados tomaron Radio Mitre. Su proclama, entre otras cosas decía: “El tirano ha muerto. Nuestra Patria desde hoy es libre. Dios sea loado. Compatriotas: en estos momentos, las fuerzas de la liberación económica, democrática y republicana ya han terminado con el tirano. La aviación de la Patria al servicio de la libertad ha destruido su refugio y el tirano ha muerto” Hacia las 15 horas el Ministerio de la Marina estaba rodeada de civiles leales armados. El Ministro Olivieri y sus dos ayudantes, Emilio Eduardo Massera y Horacio Mayorga querían rendirse al Ejército y le temían a los civiles que rodeaban el edificio. En las negociaciones participó el General Juan José Valle y el mayor Pablo Vicente. Cuando la tarde moría, treinta y dos aviones y 122 aviadores de la Marina y la Fuerza Aérea descendían en Montevideo en una patética fuga. Gargiulo se suicidaba. Las primeras cifras provisorias arrojaban 229 muertos y 797 heridos. Las cifras definitivas nunca se conocieron. La magnitud de los hechos permite deducir que la cifra de muertos debe ser considerablemente mayor.

A las 17 horas habló Perón donde acusó a la Marina de Guerra como la culpable de la cantidad de muertos y heridos. Dijo textualmente: “Pero lo más indignante es que hayan tirado a mansalva contra el pueblo como si su rabia no se descargase sobre nosotros, los soldados que tenemos la obligación de pelear, sino sobre los humildes ciudadanos que poblaban las calles de nuestra  ciudad. Es indudable que pasarán los tiempos, pero la Historia no perdonará jamás semejante sacrilegio” 

La noche oscura se iluminó con las iglesias incendiadas.  La Curia Metropolitana y a los templos vecinos de San Ignacio, San Francisco, Santo Domingo, San Juan y La Piedad.

Tulio Halperín Donghi, un historiador académico muy considerado  y emblema actual de una historia escrita desde los vencedores, le dedica mucho más espacio a la quema de las iglesias que al bombardeo.

Perón dirigió un  nuevo discurso a la medianoche que entre otras cosas decía: “Es indiscutible qué toda acción se ha dirigido sobre mi persona, lo que me llena de satisfacción. Porque lamento mucho más lo que ha ocurrido al pueblo que lo que podría ocurrirme a mí.” Y luego trató de despegarse del incendio de las Iglesias: “El gobierno nacional deplora y condena enérgicamente los desmanes que en la víspera cometieron elementos comunistas en diversos sitios de la ciudad......Y repudia estos desmanes en los cuales no se ha respetado siquiera el recinto de los templos religiosos.”

CONSECUENCIAS POLÍTICAS     

El 16 de junio significó un triunfo militar y una derrota política. El crimen de lesa humanidad que significó los bombardeos sobre Buenos Aires fue contrarrestado exitosamente por la oposición con la propagandización  de la quema de los templos.

Perón primero llamó a la conciliación y abrió parcialmente las radios a la oposición. Efectuó una profunda reorganización ministerial que incluía entre otros a Raúl Apold y Ángel  Borlenghi. Este último sindicado como promotor del conflicto con la Iglesia. El primero una prenda de paz hacia la oposición.

Se suspendió por 180 días la convocatoria para la reforma constitucional en la que se trataría la separación del Estado y la Iglesia.

El 15 de julio anuncia la finalización de la revolución peronista y la apertura de la etapa constitucional del gobierno. Textualmente afirmó: “ Yo dejo de ser el jefe de una revolución para pasar a ser el presidente de todos los argentinos, amigos o adversarios”

Ofrece a las autoridades religiosas financiar la reconstrucción de los templos, propuesta que es rechazada.

Estos gestos aumentaron la soberbia de la oposición por lo cual Perón da un brusco giro que incluye su renuncia, el retiro de la misma y el famoso discurso del 5 por 1, pronunciado dieciséis días ante del golpe del 16 de septiembre.

Los civiles armados habían impresionado desfavorablemente al ejército que parcialmente, en un principio, se sumaría al golpe de septiembre.

La violencia irracional de los complotados de junio jugaría a su favor tres meses después. Para el ensayista Alejandro Horowicz: “ Lo de junio fue un ataque pensado como una explícita advertencia de hasta dónde estaban dispuestos a llegar si Perón no renunciaba”

En una carta que el Che le dirige a su madre a pocos días de ocurridos estos hechos criminales, reproducido en el libro de Cichero mencionado le dice: “... es impresionante que la gente llore porque le quemaron su iglesia dominguera, pero le parece la cosa más natural del mundo que revienten la cantidad de “negros” que reventaron. No te olvides que muchos de ellos fueron a morir por un ideal......y que cada “ negro” tenía su familia que mantener, y que los tipos que dejan en la calle a la familia del negro son los mismos que se van al Uruguay a darse golpes en el pecho por la hazaña de machos”

LAS BOMBAS SIGUIERON CAYENDO

Durante muchos de los años de los sesenta junios siguientes, las bombas que cayeron sobre Buenos Aires siguieron precipitándose sobre todo el país. Son las mismas bombas de junio las que perpetraron los abominables fusilamientos de José León Suárez, el cadáver errante de Evita,  la  noche de los bastones largos, los fusilamientos de Trelew, el terrorismo de Estado.  En el Plan Prebisch de la Revolución Fusiladora está el embrión de los planes de Álvaro Alsogaray, Federico Pinedo, Adalbert Krieger Vasena, Celestino Rodrigo, Alfredo Martínez de Hoz, Roberto Alemann, Juan Vital Sorouille, Domingo Cavallo, José Luis Machinea, de Ricardo López Murphy, de Domingo Cavallo nuevamente.

En los aviones de la Marina y la Aeronáutica de junio de 1955 con toda la cobertura civil de la Unión Democrática, están los antecesores de otros aviones clonados que arrojaron personas vivas al mar y al Río de la Plata.

En los aviones de la Marina Naval que bombardearon Plaza de Mayo despreciando la vida de sus compatriotas se podían visualizar los campos de concentración  de dos décadas más tarde de la cual la ESMA, el Auschwitz argentino, es el emblema del horror de los años de plomo.

Están las bombas presentes en el desmantelamiento  del Estado, en la distribución regresiva del ingreso que con el peronismo  llegó a que los asalariados pasaran de participar del 50% del Ingreso Nacional al 16% del 2001l.  Aquellas bombas llevaban en su interior, los cincuenta y cinco chicos diarios que  se morían  por causas evitables cuando amanecía el siglo XXI. Estaban implícitos en los veinte millones de argentinos que sobraban en el plan de la dictadura establishment militar que instrumentó Martínez de Hoz. Los sectores concentrados de la economía, los dueños del mercado siempre tienen a mano las bombas concretas que caen de los aviones, los seres humanos arrojados como bombas, o los planes económicos de ajuste, las políticas neoliberales perpetradas y arrojadas desde prolijas oficinas por pulcros funcionarios  recibidos en Chicago o Harvard. Las bombas de aquella oscura y neblinosa mañana de junio, aquellos muertos de la histórica Plaza, eran un anticipo de lo que se venía. Los transeúntes, los estudiantes, el oficinista que salía a comer un sándwich, la novia que iba en busca a su compañero, la familia que venía a presenciar el desfile, el taxista, cayeron bajo las bombas criminales. La niebla de junio engendraba la noche y niebla de la dictadura criminal de 1976.

Preanunciaba desde la heroica resistencia Peronista del “ Luche y Vuelve” escrito con carbón en las paredes a  la gesta civil de las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo en los años de plomo.

Son numerosos los actores criminales de aquella jornada y la de septiembre qué participaron posteriormente desde distintos lugares en los hechos criminales de las cinco décadas siguientes. Todo eso lo sintetizó con notable precisión un cómplice de aquellos acontecimientos: “Se acabó la leche de la clemencia”. Cuando se proscribió la clemencia y se entronizaron  las políticas liberales  empezó a desaparecer la leche para la infancia, las industrias, el trabajo, el Estado de Bienestar.

En junio de 1955, comenzó el largo invierno argentino que tuvo pocas y reconfortantes primaveras. Esas primaveras a las que hay que consolidar para que sean permanentes y que no nos bombardeen con las bombas de la injusticia.

viernes, 12 de junio de 2015

La nueva geopolítica del petróleo

Ignacio Ramonet - http://www.lr21.com.uy/mundo/1237223-nueva-geopolitica-del-petroleo-ignacio-ramonet

¿En qué contexto general se está dibujando la nueva geopolítica del petróleo? El país hegemónico, Estados Unidos, considera a China como la única potencia contemporánea capaz, a medio plazo (en la segunda mitad del siglo XXI), de rivalizar con él y de amenazar su hegemonía solitaria a nivel mundial. Por ello, Washington instauró secretamente, desde principio de los años 2000, una “desconfianza estratégica” con respecto a Pekín.

El presidente Barack Obama decidió reorientar la política exterior norteamericana considerando como criterio principal este parámetro. Estados Unidos no quiere encontrarse de nuevo en la humillante situación de la Guerra Fría (1948-1989), cuando tuvo que compartir su hegemonía mundial con otra “superpotencia”, la Unión Soviética. Los consejeros de Obama formulan esta teoría de la siguiente manera: “Un sólo planeta, una sola superpotencia”.

En consecuencia, Washington no deja de incrementar sus fuerzas y sus bases militares en Asia Oriental para intentar “contener” a China. Pekín constata ya el bloqueo de su capacidad de expansión marítima por los múltiples “conflictos de los islotes” con Corea del Sur, Taiwán, Japón, Vietnam, Filipinas… Y por la poderosa presencia de la VIIª flota de Estados Unidos. Paralelamente, la diplomacia norteamericana refuerza sus relaciones con todos los Estados que poseen fronteras terrestres con China (exceptuando a Rusia). Lo que explica el reciente y espectacular acercamiento de Washington con Vietnam y con Birmania.

Esta política prioritaria de atención hacia el Extremo Oriente y de contención de China sólo es posible si Estados Unidos logra poder alejarse de Oriente Próximo. En este escenario estratégico, Washington interviene tradicionalmente en tres ámbitos. En primer lugar, en el ámbito militar: Washington se encuentra inmerso en varios conflictos, especialmente en Afganistán contra los talibanes y en Irak-Siria contra la Organización del Estado Islámico. En segundo lugar, en el ámbito de la diplomacia, en particular con la República Islámica de Irán, con el objetivo de limitar su expansión ideológica e impedir el acceso de Teherán a la fuerza nuclear. Y, en tercer lugar, en el ámbito de la solidaridad, especialmente con respecto a Israel, para quien Estados Unidos sigue siendo una especie de “protector en última instancia”.

Esta “sobreimplicación” directa de Washington en la región (particularmente después de la Guerra del Golfo en 1991) ha mostrado los “límites de la potencia norteamericana”, que no ha podido ganar realmente ninguno de los conflictos en los cuales se ha implicado fuertemente (Irak, Afganistán). Conflictos que han tenido, para las arcas de Washington, un coste astronómico con consecuencias desastrosas incluso para el sistema financiero internacional.

Actualmente, Washington tiene claro que Estados Unidos no puede realizar simultáneamente dos grandes guerras de alcance mundial. Por lo tanto, la alternativa es la siguiente: o Estados Unidos continúa implicándose en el “pantanal” de Oriente Próximo en conflictos típicos del siglo XIX; o se concentra en la urgente contención de China, cuyo fulgurante impulso podría anunciar a medio plazo la decadencia de Estados Unidos.

La decisión de Barack Obama es obvia: debe hacer frente al segundo reto, pues éste será decisivo para el futuro de Estados Unidos en el siglo XXI. En consecuencia, este país debe retirarse progresivamente –pero imperativamente– de Oriente Próximo.

Aquí se plantea una pregunta: ¿por qué Estados Unidos se ha implicado tanto en Oriente Próximo, hasta el punto de descuidar al resto del mundo, desde el fin de la Guerra Fría? Para esta pregunta, la repuesta puede limitarse a una palabra: petróleo.

Desde que Estados Unidos dejó de ser autosuficiente en lo que al petróleo se refiere, a finales de los años 1940, el control de las principales zonas de producción de hidrocarburos se convirtió en una “obsesión estratégica” norteamericana. Lo cual explica parcialmente la “diplomacia de los golpes de Estado” de Washington, especialmente en Oriente Medio y en América Latina.

En Oriente Próximo, en los años 1950, a medida que el viejo Imperio Británico se retiraba y quedaba reducido a su archipiélago inicial, el Imperio estadounidense lo reemplazaba mientras colocaba a la cabeza de los países de esas regiones a sus “hombres”, sobre todo en Arabia Saudí y en Irán, principales productores de petróleo del mundo, junto con Venezuela, ya bajo control estadounidense en la época.

Hasta hace poco, la dependencia de Washington respecto al petróleo y al gas de Oriente Próximo le impidió considerar la posibilidad de retirarse de la región. ¿Qué ha cambiado entonces para que Estados Unidos piense ahora en retirarse de Oriente Próximo? El petróleo y el gas de esquisto, cuya producción por el método llamado “fracking” aumentó significativamente a comienzos de los años 2000. Eso modificó todos los parámetros. La explotación de ese tipo de hidrocarburos (cuyo coste es más elevado que el del petróleo “tradicional”) fue favorecida por el importante aumento del precio de los hidrocarburos que, en promedio, superaron los 100 dólares por barril entre 2010 y 2013.

Actualmente, Estados Unidos ha recuperado la autosuficiencia energética e incluso está convirtiéndose otra vez en un importante exportador de hidrocarburos. Por lo tanto, ya puede por fin considerar la posibilidad de retirarse de Oriente Próximo, con la condición de cauterizar rápidamente varias heridas que, en algunos casos, datan de más de un siglo.

Por esa razón, Obama retiró casi la totalidad de las tropas norteamericanas de Irak y de Afganistán. Estados Unidos participó muy discretamente en los bombardeos de Libia y se negó a intervenir contra las autoridades de Damasco, en Siria. Por otra parte, Washington busca a marchas forzadas un acuerdo con Teherán sobre el tema nuclear y presiona a Israel para que su gobierno progrese urgentemente hacia un acuerdo con los palestinos. En todos estos temas se percibe el deseo de Washington de cerrar los frentes en Oriente Próximo para pasar a otra cuestión (China) y olvidar así las pesadillas de Oriente Próximo.

Todo esto se desarrollaba perfectamente mientras los precios del petróleo seguían altos, cerca de 100 dólares el barril. El precio de explotación del barril de petróleo de esquisto es de aproximadamente 60 dólares, lo que deja a los productores un margen considerable (entre 30 y 40 dólares el barril).

Aquí es donde Arabia Saudí ha decidido intervenir. Riad se opone a que Estados Unidos se retire de Oriente Próximo. Sobre todo si Washington establece antes un acuerdo sobre el tema nuclear con Teherán, lo que los saudíes consideran demasiado favorable a Irán. Además, según la monarquía wahabita, expondría a los saudíes, y a los suníes en general, a convertirse en víctimas de lo que llaman “el expansionismo chií”. Hay que tener presente que los principales yacimientos de hidrocarburos saudíes se encuentran en zonas de población chií.

Considerando que dispone de las segundas reservas mundiales de petróleo, Arabia Saudí decidió usar el petróleo para sabotear la estrategia norteamericana. Oponiéndose a las consignas de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Riad decidió, contra toda lógica comercial aparente, aumentar considerablemente su producción y hacer de ese modo bajar los precios del petróleo, inundando el mercado de petróleo barato. La estrategia dio rápidamente resultados. En poco tiempo, los precios del petróleo bajaron un 50%. El precio del barril descendió a 40 dólares (antes de subir ligeramente hasta aproximadamente 55-60 dólares actualmente).

Esta política asestó un duro golpe al “fracking”. La mayoría de los grandes productores estadounidenses de gas de esquisto están actualmente en crisis, endeudados y corren el riesgo de quebrar (lo que implica una amenaza para el sistema bancario norteamericano que, generosamente, había ofrecido abundantes créditos a los neopetroleros). A 40 dólares el barril, el esquisto ya no resulta rentable. Ni las excavaciones profundas “off shore”. Numerosas compañías petroleras importantes ya han anunciado que cesan sus explotaciones en alta mar porque no son rentables, provocando la pérdida de decenas de miles de empleos.

Una vez más, el petróleo es menos abundante. Y los precios suben ligeramente. Pero las reservas de Arabia Saudí son suficientemente importantes para que Riad regule el flujo y ajuste su producción de manera que permita un ligero aumento del precio (hasta 60 dólares aproximadamente) pero sin que se lleguen a superar los límites que permitirían reanudar la producción mediante el “fracking” y en los yacimientos marítimos a gran profundidad. De este modo, Riad se ha convertido en el árbitro absoluto en materia de precio del petróleo (parámetro decisivo para las economías de decenas de países entre los cuales figuran Argelia, Venezuela, Nigeria, México, Indonesia, etc.).

Estas nuevas circunstancias obligan a Barack Obama a reconsiderar sus planes. La crisis del “fracking” podría representar el fin de la autosuficiencia de energía fósil en Estados Unidos. Y, por lo tanto, la vuelta a la dependencia de Oriente Próximo (y también de Venezuela, por ejemplo). Por ahora, Riad parece haber ganado su apuesta. ¿Hasta cuándo?

Ignacio Ramonet  - Periodista español. Presidente del Consejo de Administración y director de la redacción de “Le Monde Diplomatique” en español.

domingo, 7 de junio de 2015

Rodolfo Walsh

http://www.rodolfowalsh.org/spip.php?rubrique2

Rodolfo Walsh es el más cabal ejemplo de lo que debe ser un periodista y su deber.
Un periodista no puede ni debe esconderse detrás del disfraz de la imparcialidad «objetivista», el deber de cada periodista, como testigo escriba de la realidad no es reportarla solamente sino cargar con ella y admitir que se es parte de la misma. Jamás un periodista puede manejar la información como un biólogo analiza la materia desde un tubo de ensayo, y Walsh marcó ese camino, no sólo con sus escritos, sino con su ejemplo. Walsh era un periodista militante, y en ello dejó la vida.
Se puede afirmar que Walsh, con una enorme formación cultural, estuvo lejos del vedetismo, y Rodolfo Walsh, como decía Oesterheld, era un «héroe en grupo», jamás individual, aunque su obra le merece los lauros que le corresponden como ser humano.
Walsh no sólo hacía periodismo, aunque algunos busquen acotarlo a esa etiqueta ocultando su rol de militante popular. Era también un destacado escritor que supo mezclar la ficción aplicándola a la realidad. En el mundo de las academias de periodismo se enseñaba la obra de Truman Capote, «A sangre fría» (1966) como la primer novela periodística, inaugurando un género que sería explotado de ahí en más. Pero esto fue producto de entregarle el premio a un escritor de un país central. Sin quitarle méritos a Capote, en los últimos años y en el mundo entero, «Operación Masacre» es aceptada como la primer obra en su género y Walsh como fundador del mismo, y camino que seguiría transitando en trabajos como «¿Quién mató a Rosendo?» o «El caso Satanowsky».
Apasionado de la investigación, Walsh participó en Cuba de la fundación de la agencia Prensa Latina, donde volcó toda su inteligencia en la sección «Servicios Especiales». Fue él mismo quien desencriptaría un cable de una embajada del imperio estadounidense y descubriera cuándo y donde se daría lo que luego fue la invasión a Playa Girón: el resultado fue que la gusanera entrenada por la CIA y con apoyo aéreo estadounidense, se encontró con que al momento de querer desembarcar, todas las fuerzas revolucionarias repelieron la agresión del Imperio. Walsh, desde una pequeña oficina del barrio El Vedado, entre papeles y cables, había prestado un servicio que visto a la luz de la historia, fue crucial.
El resto de la historia es conocida, y en este sitio trataremos de suplir todos juntos, entre ustedes y nosotros, para rearmar la historia Walsh, e intentaremos ser dignos de su legado. Él buscó romper el cerco de la Dictadura y hoy el muro es levantado por las corporaciones multimediáticas, porque como Walsh encabezara los cables de ANCLA, «millones quieren ser informados y el terror se basa en la incomunicación», y en tal sentido, el esfuerzo está en romper el aislamiento «como satisfacción ética de un acto de libertad».


lunes, 1 de junio de 2015

Las Jornadas del 17 de Octubre de 1945 en la ciudad de La Plata

Abigail Rodriguez - http://rinacional.com.ar/las-jornadas-del-17-de-octubre-de-1945-en-la-ciudad-de-la-plata.html

La realidad surgida al calor de los acontecimientos mundiales y de factores internos, dio origen a una nueva clase trabajadora proveniente de las entrañas del mismo país, a través de la migración campo a la ciudad. Esta sociedad naciente no podía ser contenida en las viejas estructuras, y encontró la representación de sus tan postergadas reivindicaciones en la figura de un Coronel, Juan Domingo Perón.

El epicentro de aquella revolución fue el corazón del país, la histórica plaza de Mayo. El actor fundamental de la transformación social y política que encarnaría Perón, el pueblo trabajador que dio vida a aquel movimiento, se expresó en los más recónditos rincones del país, y desde cada punto de la Patria, se movilizaron hacia la plaza. 

En la Ciudad de La Plata, los acontecimientos se desenvolvieron rápidamente. Según testimonios de algunos presentes, el día 16 llegaron algunos afiches que convocaban a la marcha: “TELEFÓNICOS ARGENTINOS EXIGEN LA LIBERTAD DEL CNEL. PERÓN”. A lo que se le agregaría “EL 17 DE OCTUBRE A PLAZA DE MAYO A LAS 19HS.”

El 17, los trabajadores discutían en los sindicatos, fábricas y en la ciudad la información que llegaba de las ciudades vecinas sobre activistas que irían a rescatar al Coronel Perón, preso en Martín García.

Llegó a la ciudad una manifestación procedente de la vecina ciudad de Berisso, conducida por obreros y dirigentes de fábricas, que se encontró con la multitud proveniente de Ensenada y los miles que espontáneamente se encontraban en La Plata, todos mantenían una única consigna “rescatar a Perón”.

Se dirigieron a la Plaza de La Plata, frente a la Casa de gobierno, donde varios oradores arengaban al pueblo reunido, entre ellos una enérgica mujer, trabajadora de uno de los frigoríficos, pronunció un encendido discurso frente a los 20.000 presentes, ante quienes también habló René Orsi, miembro de FORJA.

Entre las 17 y las 18hs. se resolvió ir a Plaza de Mayo, en cualquier auto, camión o vehículo que se dispusiese.  Algunas intendencias, a pedido de los dirigentes, prestaron camiones del Ejército para movilizar a los trabajadores a la Plaza, recuerda Armando Urrea que pasaban por el puente sobre el Riachuelo sin inconveniente, incluso los policías apostados en el puente aplaudían su paso, al igual que la gente que se encontraba en distintas ciudades.

“Las caravanas estaban nutridas por obreros de los frigoríficos, de la Destilería de YPF de Ensenada, de la textil, etc. Nadie puede osar en arrogarse, personalmente, haber sido propulsor de este evento. Fue una reacción y expresión general y popular de todos los trabajadores del músculo y del pensamiento”. Relató Horacio Moreno, un ferviente activista de estas jornadas en la ciudad de La Plata.

A casi 70 años de las jornadas del 17 de Octubre de 1945, hecho que marcó un antes y un después en la historia de los argentinos, y latinoamericanos, recordamos sus profundos orígenes, que dieron sustento y fueron la causa de ese gran movimiento nacional, el cual supo encausar las viejas y olvidadas reivindicaciones del pueblo oprimido y explotado, que a partir de entonces ingresaría a la historia; en palabras de Scalabrini Ortiz: “Eran los hombres que están solos y esperan que iniciaban sus tareas de reivindicación. El espíritu de la tierra estaba presente como nunca creí verlo.”

viernes, 22 de mayo de 2015

El Rosariazo, la rebelión de una ciudad entera contra la dictadura de Ongania

Blas García - http://www.laopinionpopular.com.ar/noticia/5036-el-rosariazo-la-rebelion-de-una-ciudad-entera-contra-la-dictadura-de-ongania.html
El Rosariazo formó parte de una sucesión de movimientos de protestas contra la dictadura militar, incluyendo manifestaciones y huelgas, realizadas en la ciudad de Rosario, entre los meses de mayo y septiembre de 1969 contra el general Juan Carlos Onganía.
El autoritarismo de Onganía, y su desprecio por la política, habían cebado el fenómeno de la unidad obrero-estudiantil que, con el tiempo, amalgamó un frente político y social combativo y variado que terminó con su corto reinado.
Las convulsiones del Mayo Francés, la influencia del catolicismo tercermundista y su opción por los pobres, los movimientos revolucionarios de sesgo nacionalista y antiimperial, promovieron en un clima de tensión generalizada contra el gobierno militar, como culminación de una escalada comenzada pocos días antes, el 13 de mayo en la provincia de Tucumán, donde los trabajadores del ingenio azucarero Amalia habían tomado las instalaciones en protesta por el impago de sus salarios.
Al día siguiente, manifestaciones en la ciudad de Córdoba tomaron la calle contra la supresión del sábado inglés, vigente desde la década del '20. Más de 3.500 obreros reunidos en asamblea para fijar la posición del gremio se enfrentaron con la policía, lo que desembocó en un total de 11 heridos y 26 detenidos.
Posteriormente, en la provincia de Corrientes, los estudiantes universitarios protestaron contra el anuncio de un aumento del 500% en los precios del comedor universitario; la policía reprimió la marcha, matando al estudiante correntino Juan José Cabral.
Madura el Rosariazo
El 16 de mayo, a causa de la inquietud producida por el repudio a los sucesos de Corrientes en la Facultad de Medicina, el rector de la Universidad Nacional de Rosario decidió la suspensión de las actividades durante tres días.
Los estudiantes se congregaron en el Comedor Universitario, desde donde marcharon por el centro de la ciudad. Mientras tanto, desde la Capital Federal se anunció que se habían despachado refuerzos policiales a Corrientes y que la Gendarmería Nacional de Formosa estaba acuartelada en previsión de acontecimientos similares.
Al día siguiente, un grupo de unos 400 estudiantes se reunió nuevamente frente al Comedor Universitario, lanzando volantes y haciendo estallar artefactos de estruendo. La policía reprimió la manifestación que coreaba "Acción, acción, acción para la liberación".
Un periodista, Reynaldo Sietecase, describió así los eventos:
Un grupo de estudiantes, perseguidos por la policía, corre por la calle Corrientes hacia el sur y dobla por Córdoba, desde Entre Ríos aparecen más policías disparando sus armas. Los estudiantes y decenas de sorprendidos transeúntes quedan encerrados...

Algunos estudiantes junto a una docena de paseantes -incluidos varios niños- ingresan a la Galería Melipal. El lugar tiene una sola boca de entrada y salida, por lo que otra vez quedan atrapados a merced de los guardias.

Los agentes ingresan al edificio y reanudan la golpiza. Entre los policías se encuentra el oficial inspector Juan Agustín Lezcano, un ex empleado de la boite Franz y Fritz. La gente trata de evitar como puede la lluvia de golpes: se escuchan súplicas, llantos y alaridos. En medio de la confusión suena un disparo. Cuando la policía se repliega queda en el suelo, junto a la escalera que lleva a los pisos superiores, el cuerpo de Adolfo Bello con la cara ensangrentada.
Reacción por la muerte del estudiante Adolfo Bello
El estudiante Adolfo Bello murió pocas horas más tarde. Dos balazos en la frente habían destrozado su cabeza delante de una galería comercial, a metros de una de las esquinas célebres de la ciudad: Córdoba y Corrientes.
El ministro del Interior de la dictadura, Guillermo Borda, atribuyó la responsabilidad de los hechos a la actividad política y gremial de la izquierda.
La Confederación General del Trabajo de los Argentinos decretó el estado de alerta y citó a un plenario para el 20; mientras tanto, organizaba una olla popular para suplir el comedor, que había sido cerrado por orden de la autoridad. Las manifestaciones cobrarían cada vez más intensidad en los días siguientes.
Las asambleas estudiantiles estaban prohibidas. Los alumnos con pelo largo eran mal vistos o perseguidos. Las muchachas con minifalda también. Los estudiantes se congregaban en los comedores universitarios. Allí comían y debatían. Los comedores universitarios fueron cerrados por las autoridades. Los estudiantes armaron una olla popular frente al local de la CGT A. La mezcla explosiva para la rebelión estaba rubricada.
El 20 de mayo, los estudiantes rosarinos anunciaron un paro nacional. Medidas similares tuvieron lugar en otras provincias: en Córdoba se realizó una marcha del silencio, en Corrientes, los docentes pidieron la destitución de las autoridades universitarias y en Mendoza se dispuso un paro de actividades y una marcha del silencio.
Estalla el Rosariazo
El 21 de mayo, las agrupaciones estudiantiles universitarias y de enseñanzas secundarias de Rosario y la CGT de los Argentinos convocaron a una nueva marcha de protesta, que partiría desde la olla popular instalada frente al local de la CGT A.
Raimundo Ongaro fue uno de los oradores en la asamblea previa. Las fuerzas de seguridad, mientras tanto, acordonaron la zona con fuerzas de infantería, caballería y vehículos blindados, instando a los manifestantes a disolver la concentración. Pese al operativo de seguridad se congregaron más de 4.000 personas.
Cuando iniciaron la movilización fueron reprimidos con gases lacrimógenos y fuerza física por la policía. El enfrentamiento devino campal, montándose barricadas en las calles y encendiéndose hogueras. Durante horas la policía intentó contener a los manifestantes, pero finalmente debió retirarse.
Desde las puertas de las casas y desde las ventanas de los departamentos comenzaron a arrojarse maderas, papeles, trapos, neumáticos para hacer barricadas, para la resistencia.
Los manifestantes intentaron brevemente tomar la Jefatura de Policía, pero renunciaron a la idea y ocuparon el rectorado de la Universidad y la sede de transmisión de LT8 Radio Rosario.
Ráfagas de balas fueron disparadas por la policía para frenar la insurrección. Cuando se disolvió un poco el desconcierto, ya entrada la noche, yacía sobre la vereda Luis Norberto Blanco, un estudiante metalúrgico de sólo 15 años. Estaba mal herido. Las fuerzas de seguridad atacaron también al médico que lo asistía y el joven murió pocos después en un sanatorio.
Desde la madrugada del 22, Rosario fue declarada zona de emergencia bajo jurisdicción militar. El general Roberto Fonseca quedó al frente del gobierno. Entre patrullas de gendarmería, 89 personas fueron detenidas como consecuencia de la marcha.
El 23, un grupo de 38 sindicatos dispuso la realización de un masivo paro industrial. Junto con una declaración de los sectores de la Iglesia más afines a los grupos obreros, la huelga fue un duro revés para el gobierno.
Más de 7.000 personas acompañaron al féretro de Blanco en su procesión hacia el cementerio y los obreros de la Unión Ferroviaria, que había adherido al paro, se manifestaron contra la suspensión de los delegados que tomaron la medida. El conflicto en los ferrocarriles sería agudo y desembocaría directamente en el Segundo Rosariazo pocos meses más tarde.
Mientras tanto, la oposición al gobierno se materializaba en la negativa de numerosos eclesiásticos a celebrar el Te Deum del 25 de mayo y pocos días más tarde en la insurrección del Cordobazo, seguido de un paro nacional. Cuando el 20 de junio el general Onganía visitó el rosarino Monumento a la Bandera, la CGT lo declaró persona non grata.
Apenas ocho días después un alzamiento de mayores proporciones aún, conmovía a Córdoba y a la nación. Se trató del Cordobazo y en opinión de uno de sus líderes, el sindicalista Agustín Tosco, tuvo una inocultable inspiración en aquellos días rosarinos de mayo.